Martín Moreno-Durán
24/12/2014 - 12:00 am
FICREA y Liverpool: otros dos agravios
+ ¿Quién responde a 6, 633 familias defraudadas? + ¿Por qué Liverpool encubrió un asesinato? Quisiera haber escrito en Navidad un cuento breve. O una historia más amena. Ligera. Pero 2014 cierra con el sello del año: el abuso del poder, la impunidad, el agravio hacia los ciudadanos. Y ante ello, no debemos cerrar […]
+ ¿Quién responde a 6, 633 familias defraudadas?
+ ¿Por qué Liverpool encubrió un asesinato?
Quisiera haber escrito en Navidad un cuento breve. O una historia más amena. Ligera. Pero 2014 cierra con el sello del año: el abuso del poder, la impunidad, el agravio hacia los ciudadanos. Y ante ello, no debemos cerrar los ojos ni dar tregua a la denuncia periodística. El dolor no respeta las épocas del año.
Y lo que hoy está pasando en México, es indignante. Inaceptable.
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Lo que ocurre con los 6 mil 633 ahorradores defraudados por FICREA – se calcula un daño patrimonial a familias mexicanas por casi 3 mil millones de pesos-, merece un nombre: robo, y no otra cosa.
Indignante, que una Sociedad Financiera Popular (Sofipo), llamada FICREA, haya desviado los recursos que, en realidad, son ahorros de ciudadanos que confiaron en ellos. ¿Qué hicieron con esas fortunas? “Casas en el extranjero, yates, aviones, vehículos de lujo y de carreras de Fórmula 1 y NASCAR, fueron el destino de varios millones de pesos de ahorradores afectados por FICREA” (Gonzalo Soto/ Reforma/ 20/XII/2014). Lo dicho: se los robaron.
Preocupante, que el presidente de la CNBV, Jaime González Aguadé, haya declarado el viernes pasado que tras la investigación y auditoría realizadas a FICREA, “se determinó la disolución y liquidación de la sociedad, cuyo socio mayoritario es Rafael Olvera Amezcua”. ¿Así, y nada más? ¿Borrón y cuenta nueva? ¿Y el dinero de los ahorradores? González Aguadé debe saber que bajo ninguna circunstancia los ahorradores defraudados aceptarán perder su dinero. Hasta hoy, no ha tenido la valentía de darles la cara. ¡Ah, pero eso sí, en su cuenta de Twitter se la pasa felicitando por su cumpleaños a Alfredo del Mazo, a José Narro y a todo mundo! Para eso sí tiene tiempo, y no para enfrentar un atraco financiero a ciudadanos.
Inaceptable, que el presidente de la Condusef, Mario di Costanzo, ofrezca reponer “hasta un 35%” de lo que tenían ahorrado los ciudadanos defraudados. ¡Al carajo, señor di Costanzo! A los ahorradores se les debe reponer todo su dinero, no migajas ni limosnas. Ni son aboneros ni mucho menos van a regalar el trabajo de toda una vida.
No, señores de la CNBV, de la Condusef y de Hacienda: el robo de FICREA 6 mil 633 ahorradores y a sus familias, no se va a quedar impune. Ya no más abusos. Ya no más agravios.
Los ahorros de los defraudados por FICREA son producto del trabajo, y no resultado de favores al poder ni por tráfico de influencias o de componendas gubernamentales con aroma a corrupción.
Si quieren buscar delitos, hurguen en la Casa Blanca y en el Grupo Higa.
Por cierto, y hablando de beneficiarios del Grupo Higa: el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, ni una palabra ha dicho ante el robo financiero más grave a ahorradores de los últimos años.
Su silencio también agravia.
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Es FICREA y es Liverpool.
Hasta hoy, la sucursal Liverpool en Perisur se ha negado a entregar la clave para determinar quién fue el asesino (a) de la empleada Angélica Trinidad Romero Severiano, la noche del sábado 15 de noviembre pasado: los videos de las cámaras de vigilancia. ¿Por qué las está ocultando Liverpool, tiendas propiedad de uno de los 35 hombres más ricos de México: Max Michel Suverbille?
Los abogados del poderoso emporio alegan que hasta que el MP no acepte formalmente la denuncia por homicidio en contra de Angélica, no entregarán los videos. Chorradas. Si tuvieran la intención de aclarar el crimen, ya hubieran cooperado.
Angélica Trinidad Romero fue asesinada la noche del 15 de noviembre pasado, fin de semana del “Buen fin”.
Su familia nada supo de ella el sábado.
El domingo 17, temprano, fue notificada de que Angélica había fallecido.
“Nos dijeron en Liverpool que le había dado un infarto al miocardio”, asegura Omar, primo de Angélica, al reportero José Antonio Aranda.
Cuando la familia llegó a Liverpool Perisur, les salieron con que el cuerpo ya estaba en la funeraria “Gris”, en Tlalpan, a donde se trasladaron y de milagro evitaron que fuera cremado.
Revisaron el cadáver y descubrieron que tenía un golpe en la cabeza y moretones en su cuerpo. De allí se lo llevaron a la PGJDF y el resultado de la necropsia los dejó helados: Angélica había muerto por “aplastamiento de tórax y ahorcamiento”.
Angélica fue asesinada.
– Mi prima nos había contado que recién tuvo un problema con un drogadicto que trabajaba con ella; inclusive, que había habido una violación dentro de Liverpool-, narra Omar.
Hoy, el jurídico de Liverpool retiene los videos de seguridad de la tienda, que son capaces de detectar hasta quién se roba un alfiler. Seguramente tienen registrado el crimen.
Cuando en el Bar-Bar se baleó a Salvador Cabañas, de inmediato –y hasta la fecha-, se clausuró el lugar. Hasta hoy sigue cerrado injustamente.
Luego entonces, ¿por qué la PGJDF no ha clausurado Liverpool Perisur, donde sí se cometió un asesinato?
Los poderosos mandan.
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Los casos de FICREA y de Liverpool Perisur se suman a la lista de agravios en contra de mexicanos. Se agregan al rosario de impunidad que tiene de rodillas a este país.
No lo permitamos, cada quién desde su trinchera.
¡Ya basta!
ABRAZO. A pesar de las adversidades, no podemos dejar de enviar un abrazo navideño a los lectores de esta Red Pública. Han sido generosos con sus lecturas este año. El compromiso con ustedes es grande. Por lo pronto, intenten pasarla bien.
Twitter: @_martinmoreno
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