+Censura, ofensas, mentiras: el sello del priismo

+ Chuayffet actuó con lógica: despidió a Fausto

La forma: cuando Fausto Alzati, director de TV Educativa de la SEP –sí, el mismo que se inventó un doctorado por Harvard al arranque del gobierno de Zedillo-, interrumpió insolente, ebrio, despótico, la lectura del poema de la artista Aurora Reyes durante un acto oficial. El fondo: el profundo autoritarismo del PRI en su regreso al poder.

La forma: el secretario particular del…¡presidente de México!, Erwin Lino –así se llama-, se mofa de la desgracia de los migrantes centroamericanos, retuiteando una broma cruel en TW: futbolistas hondureños trepados en el fuselaje de un avión a su llegada a Brasil, emulando a sus paisanos que viajan a bordo de “La Bestia”. El fondo: la profunda soberbia e ignorancia que emana desde Los Pinos un hombre cercano e íntimo de Peña Nieto.

A final de cuentas, tanto Alzati como Lino son dos botones de muestra del priismo actual, el de siempre: volviendo al poder sostenidos por su tripié histórico: el autoritarismo, la censura, el agravio.

¿Cuántos Alzatis y Linos hay entre los priistas en México? Miles. Decenas de miles, desgraciadamente.

No hay viejo ni nuevo PRI. Hay uno. El de hoy. El de siempre.

Y sí: son ellos, los priistas. No cambian. Ni cambiarán.

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El caso de (Ne) Fausto Alzati, es digno de siquiatra.

No sólo es un mentiroso crónico, porque vaya que se necesita estómago y cara dura para inventarse un Doctorado en Harvard, como ocurrió en 1994 cuando el diario Reforma lo exhibió, demostrado su embuste. Alzati sólo duró dos meses al frente de la SEP zedillista.

No sólo es un tramposo, ya que en enero pasado apareció en la lista de morosos del SAT.

Hoy, se pinta como un vulgar borrachín mala copa: arbitrario, ofensivo, mentiroso, y hasta cobarde. ¡Prohibido invitar a fiestas a Alzati! Vamos, a reserva de que se quiera pasar un mal rato.

Durante la ya conocida y pública intervención desafortunada de Alzati durante la exposición de 70 obras a caballete de Aurora Reyes, primera muralista mexicana, Fausto –envuelto en los vapores del alcohol, a decir de los asistentes al evento realizado en la sede de Televisión Educativa de la SEP-, tuvo exabruptos como estos:

-¡No tengo porqué escuchar esta mierda…!, ladró Alzati ante los asistentes  cuando Ernesto Godoy –nieto de Aurora Reyes- leía el poema “Hombre de México”. “No voy a permitir que ofendan a mi presidente Peña Nieto”, escupió. Su visión oscurantista no le permitió discernir que Reyes escribió ese poema…¡hace 66 años! Ni Peña Nieto había nacido.

-¡A ver, negro, vente para acá…aunque seas negro y feo te queremos!, gritó dirigiéndose al director de Contenidos de TV Educativa. Hasta tufos racistas emanó Alzati.

-¡Quién esté conmigo qué grite: que viva Peña Nieto!, arengó Alzati. Silencios. ¡Qué viva Peña Nieto!, insistió. Nada. Un grito surgió entonces: ¡Qué viva Aurora Reyes! Los vivas se multiplicaron. Alzati quedó en ridículo.

-“Aclaro: no censuré poema alguno. Su lectura no estaba programada. Me molestó ser sorprendido. Inauguré la exposición y me retiré. Es todo”, ofreció Alzati en su cuenta de TW (@alzati_phd). Pero horas antes, había advertido por la misma vía: “Ordené que la retiraran. No permitiré ataques a @EPN en mi área de responsabilidad”. Alzati no sólo quedó como servil e ignorante, de paso, se exhibió como cobarde. Zacatón, le dirían en el barrio.

 El lunes pasado, la SEP emitió un comunicado anunciando el despido de Fausto Alzati como titular de Televisión Educativa. Emilio Chuayffet actuó con lógica: sostener a Alzati era imposible. Y lo corrió.

No tenía de otra.

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Lo que hizo Chuayffet –correr a Alzati-, no lo hizo Enrique Peña Nieto. Hasta hoy, el presidente de México tolera que su secretario particular se burle de los migrantes hondureños que viajan en ese tren de la muerte llamado “La Bestia”, personificados, ahora, en los futbolistas de la Selección de Honduras que viajaron a Brasil.

El pasado 12 de junio, Erwin Lino retuiteó la mofa hacia los hondureños a través de su cuenta (@Erwin_Lino). Lino debería saber que detrás de esa broma macabra hay dolor, muertos, injusticias, asesinatos, extorsiones, racismo. Aun así le dio RT a ese tuit ofensivo.

Pero Lino –igual que Alzati-, actuó con cobardía.

Ese mismo día, publicó un tuit propio que decía: “Mi cuenta ha sido utilizada por alguien ajeno a mi (sic). Ya cambié mi contraseña y mi mail. Una disculpa por el twitt publicado con anterioridad”.

¿Alguien le cree a Erwin Lino?

¿Lo hackearon de verdad?

¿Quién le cree a Erwin Lino?

Nadie.

Y en lugar de asumir su responsabilidad de manera viril, opta por el embuste: evadir, de manera cobarde, su desatino. Me hackearon. ¡Sí, cómo no! Otro zacatón. Como Alzati.

Vaya par.

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Las ofensas de Alzati las reveló el diario digital @elrespetabledf, dirigido por una mujer: Ivabelle Arroyo, después de que Héctor y Ernesto Godoy – nietos de Aurora Reyes-, las hicieran públicas en las redes. Después las retomamos y ampliamos varios periodistas, en radio, prensa escrita y portales, incluido, de manera destacada, SinEmbargoMX. Bien por ellos.

Ese es el camino: denunciar y hacerlo público.

No hay de otra.

Twitter: @_martinmoreno 

Martín Moreno-Durán

https://dev.sinembargo.mx/author/moreno/

Periodista. Escritor. Conductor radiofónico. Autor de los libros: Por la mano del padre. Paulette, lo que no se dijo. Abuso del poder en México. Los demonios del sindicalismo mexicano. El Derrumbe Retrato de un México fallido. El Caso Wallace. 1/Julio/2018: Cambio Radical o Dictadura Perfecta, y de la novela Días de ira.

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