Hay días en que, si acaso, aguanto a mi sombra, y eso no mucho. Hay días en que de plano no quiero hablar con nadie, no me cae bien nadie, y entonces me acuerdo de una película que no me gusta, pero que me parece que contiene una idea notable. La película es “Forrest Gump”. La película es cursi y usa metáforas manidas, recordemos la de la caja de chocolates, pero contiene una idea muy buena: la idea de correr o, mejor dicho, de caminar cuando las cosas salen mal.
Por Nicolás Alvarado