Luis Almagro, secretario general de la OEA, presentará un informe sobre Venezuela en el que considerará «la escasez de alimentos y de medicinas, los casos de corrupción que puedan haber, la situación de los derechos humanos y la libertad de expresión, y una vía para que el país siga adelante». Con esto, existe la posibilidad de que la organización inicie un proceso de votación para resolver en torno a la situación venezolana, en cuyo caso extremo, cabría la posibilidad de una suspensión a Venezuela como miembro del organismo.
Washington, 24 de mayo (EFE).- El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, consideró hoy que la «única salida» a la crisis de Venezuela es el referendo revocatorio contra el Presidente Nicolás Maduro que promueve la mayoría opositora del Parlamento.
«La única salida, que es algo en lo que debemos trabajar en los próximos días o semanas, es el camino institucional, el camino constitucional, que significa devolver la decisión al pueblo», dijo hoy Almagro en una entrevista con Christiane Amanpour en CNN Internacional.
El titular de la OEA ya se había posicionado a favor del referendo revocatorio la semana pasada, cuando afirmó en un duro y personal mensaje que Maduro será un «dictadorzuelo más» si no permite la consulta que la oposición quiere celebrar este año.
«El referendo revocatorio no le pertenece a Maduro, ni le pertenece a (Henrique) Capriles (líder opositor). Le pertenece a la gente y esa gente tiene que resolver su situación actual y quiere tomar una decisión al respecto. Por eso no se les puede robar, esa decisión es muy importante, es muy importante que se celebre ese referendo», afirmó Almagro.
El excanciller uruguayo (2010-2015), que este jueves cumplirá un año al frente de la OEA, presentará próximamente un informe sobre Venezuela en el que considerará «la escasez de alimentos y de medicinas, los casos de corrupción que puedan haber, la situación de los derechos humanos y la libertad de expresión, y una vía para que el país siga adelante».
Con toda probabilidad, a tenor de las declaraciones de Almagro en el último mes, a ese informe le seguirá la invocación del artículo 20 de la Carta Democrática Interamericana, que da al secretario general potestad para someter a consideración del Consejo Permanente «una alteración del orden constitucional que afecte gravemente al orden democrático» de un Estado miembro.
Con ese paso al frente se abre un proceso de reuniones y votaciones que pueden tener como consecuencia desde resoluciones o gestiones diplomáticas hasta la suspensión de Venezuela como miembro del organismo, extremo para el que es necesario el voto de dos tercios de los 34 cancilleres.
«El único camino para institucionalizar el diálogo en el continente sería a través de esa convocatoria del Consejo Permanente que puede decidir empujar en esa dirección (pedir que se permita el referendo). Pero tendría que ser un diálogo que diera resultados», señaló hoy Almagro.
«No podemos solo sentarnos y hablar. Tenemos que dar pasos adelante en esto, liberar a los presos políticos, porque es una contradicción en sí misma tener presos políticos y democracia», defendió.
«Para tener una democracia tienes que respetar la Constitución y someterte al referendo, tienes que tener equilibrio entre los diferentes poderes del Estado, un Poder Judicial completamente independiente, y eso es lo que debemos proporcionar en Venezuela, que riga el Estado de Derecho», concluyó.
Preguntado por su duro y polémico mensaje contra Maduro de la semana pasada, Almagro defendió que él no insultó a nadie y que lo único que hizo fue «hablar de principios que están muy claros en la Carta Democrática» y «que todo el mundo ha acordado», en referencia a los 34 Estados miembros de la OEA que firmaron el documento por unanimidad en 2001.