Actualmente en México es bajo el porcentaje de personas que al enfrentar un proceso de quimioterapia tienen el recurso para adquirir pelucas que mejoren su calidad de vida, por lo cual, existen grupos que se dedican a la fabricación y venta de estos accesorios a costos simbólicos para las personas que así lo requieren.
Ciudad de México, 5 de abril (SinEmbargo/Pulso).- La pérdida de cabello provocada por la radiación y quimioterapia es el efecto secundario al que más temor le tiene un enfermo de cáncer, principalmente las mujeres, que ven en una cabellera larga un símbolo de femineidad.
Según información brindada por conocedores del tema, la pérdida de cabello en una mujer que enfrentó un proceso quirúrgico de extracción de mamas, simboliza un obstáculo mayor en su vida, pues los senos y el cabello largo es lo que a simple vista distingue a un hombre de una mujer.
Para esto, existen opciones a las que pueden recurrir las personas que enfrentan alopecia por tratamientos médicos, que van desde el uso de un gorro hasta la adquisición de una peluca oncológica, las cuales pueden costar hasta tres mil pesos.
La elaboración de las pelucas oncológicas utilizadas por el daño del folículo piloso luego de un tratamiento oncológico requieren de un trabajo manual intenso, lo que hace a la vez que el precio de este tipo de accesorios sean más caro.
Actualmente en México es bajo el porcentaje de personas que al enfrentar un proceso de quimioterapia tienen el recurso para adquirir pelucas que mejoren su calidad de vida, por lo cual, existen grupos que se dedican a la fabricación y venta de estos accesorios a costos simbólicos para las personas que así lo requieren.
La respuesta de RETO
Grupo RETO es uno de los entes que se dedican a la recolección de cabello natural para la posterior elaboración de pelucas, explicó Lorena Córdova Maza, integrante de este grupo, quien señaló que una peluca puede tardarse de mes a mes y medio en ser elaborada, pues su fabricación es un proceso artesanal.
Las melenas postizas deben de ser elaboradas con cabello natural y tienen una vida de hasta 10 años, informó la activista, quien refirió que para la elaboración de cada peluca se requieren de por lo menos 6 trenzas de 30 centímetros.
Las pelucas oncológicas pueden ser realizadas gracias a la donación que realiza la población de cabello natural no maltratado y sin procedimientos químicos, sin embargo, la donación de cabello es aún baja entre la población.
Tan sólo en el Grupo RETO se reciben de 30 a 40 trenzas al mes, las cuales son colocadas en contenedores plásticos y después son entregadas a las damas voluntarias de dicha fundación quienes con bastidores tejen cada una de las fibras capilares, no sin antes dar un acabado natural y uniforme en color al pelo.
Según estimaciones de Córdova Maza, alrededor de 5 a 10 personas solicitan una peluca mensualmente, sin embargo, no siempre se les otorga el accesorio pues no se cuenta con la materia prima suficiente para realizarlos.
“Unas 30 o 40 trenzas al mes alcanzan para tres o cuatro pelucas máximo, que tiene una duración de más de diez años. Sólo tienen que cepillarla como cabello normal, pero aún son pocas las personas que tienen la cultura de la donación. Hay muchísimas personas que lo necesitan, muchas personas no se acercan porque no saben que existe esta posibilidad, las personas enfermas, buscan mejorar su autoestima, porque al caerse el cabello se nota su enfermedad y esto les afecta”, señaló.
Un proyecto escolar que se convirtió en una forma de ayudar
La recolección de cabello, para ayudar a pacientes enfermos de cáncer, se convirtió en una forma de vida para un grupo de por lo menos tres estudiantes de la Escuela Normal de San Luis Potosí, quienes con un simple proyecto escolar para pasar la materia “Exploración y conocimiento del mundo”, iniciaron la campaña permanente denominada “Donar está de pelos” a través de la cual semestralmente recolectan hasta 200 trenzas que son donadas a grupos que se dedican a la elaboración de pelucas, informó Cecilia García estudiante de la Normal del Estado y líder del grupo.
Señaló que al arranque de la campaña se recibían sólo 75 trenzas, sin embargo el número de donadores ha incrementado.
Desde hace dos años las jóvenes dedican parte de su tiempo a recolectar trenzas a través de eventos semestrales.
“Esto fue solamente para pasar la materia pero nos sentimos muy bien de ayudar a la gente que lo necesita, nosotros cada seis meses hacemos una colecta y se lleva el cabello al grupo RETO pues son ellos los que se encargan de hacer talleres de autoestima, motivación y autoexploración además de que ayudan mucho a las personas que requieren de una peluca”, dijo.
Cecilia García señaló que los donadores de cabello están obligados a entregar un cabello limpio y seco, con una longitud superior a los 15 centímetros, de preferencia virgen, o sea que no hayan sido sometidos a tratamientos permanentes como la base o decoloraciones.
El proyecto que inicio como una tarea escolar ha impactado no sólo a potosinos, sino también a residentes de estados vecinos como Querétaro, Zacatecas y Estado de México, que envían cabello o apoyan con la promoción del grupo en sus estados.
El contacto para realizar una donación vía Facebook es a través del sitio denominado “Donar está de pelos” o al teléfono 44 41 70 98 73, los interesados también pueden realizar su donativo en la Escuela Normal del Estado entre las 8 y las 14 horas.
Donar sinónimo de humanismo y valores
“Si como padres enseñamos a los hijos a desprendernos de lo que tenemos para ayudar a otros, podremos fortalecer los valores en la sociedad”, dijo Alicia Martínez Martínez, quien acudió la tarde del lunes a donar el cabello de su pequeña hija de ocho años al grupo “Donar está de pelos”.
Tras una plática con la menor, un año y medio de espera para que le creciera el cabello y ver algunas películas en donde se habla del cáncer en niños y personas adultas, Regina Martínez en compañía de su mamá y su oso de peluche, respondió al llamado del grupo y donó cerca de 28 centímetros de cabello.
Así como Regina, Cecy de 15 años donó 30 centímetros de su cabellera tras mencionar: “a mi nada me cuesta desprenderme de mi cabello, total a mí me vuelve a crecer y lo que yo me corte serán bendiciones para quienes lo necesitan”.
Corazón de fe
A la par de la campaña que realizan las jóvenes estudiantes de la normal, existen otros grupos que iniciaron programas de recolección de cabello, uno de estos es “Corazón de Fe” grupo a través del cual, algunas estéticas ofrecen corte de cabello gratuito a quienes busquen donar su melena a niños con cáncer, lo recolectado será entregado a la Asociación Mexicana en Ayuda a Niños con Cáncer A.C (AMANC) y Alianza Anti Cáncer Infantil, informó Carmen Martínez, titular del grupo.
Señaló que aunque de momento sólo un salón de belleza se ha unido al movimiento, se espera que en próximos días, más salas se sumen al proyecto que durará cerca de seis meses.
“Estamos buscando salones de prestigio para que se corte bien el cabello y sean responsables, no podemos mandar a los donadores a cualquier lugar, tienen que tener prestigio y deben de saber hacer las cosas”, puntualizó Carmen Martínez.