El Gobierno de la Ciudad de México y de las demás entidades de la megalópolis (Estado de México, Hidalgo, Puebla, Morelos y Tlaxcala) han fallado en ofrecer verdaderas alternativas de movilidad al automóvil que ofrezcan condiciones de seguridad, comodidad y rapidez a sus usuarios, acusaron expertas. Mientras se reporta un colapso en el transporte público de la capital, el Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, ofreció una disculpa a los ciudadanos.
Ciudad de México, 5 de abril (SinEmbargo).- A partir de este día y hasta el próximo 30 de junio, todos los vehículos en la capital y parte del Estado de México dejarán de circular una vez por semana sin importar su holograma, pero ¿es realmente una medida efectiva? A corto plazo sí. Pero expertas señalaron hoy que si la medida se extiende puede ser contraproducente, ya que se significaría un despunte en la congestión por el aumento en el parque vehicular.
«En suma, aunque las medidas de la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe) son la única opción viable de corto plazo, serán insuficientes y hasta contraproducentes si no se atienden los problemas estructurales», advirtió Gabriela Alarcón, directora de Desarrollo Urbano del Instituto Mexicano para la Competitividad A.C. (IMCO).
«El hecho de dejar de manera permanente a lo largo de todo el año este Hoy No Circula generalizado que afecta también a los hologramas cero y doble cero podría tener consecuencias muy parecidas a las del principio del programa en 1992, hay evidencia científica con estudios de la Universidad de Chicago de Lucas Davis que básicamente muestran cómo la población se tiene que adaptar a esta nueva situación y la manera en la que lo hace es comprando otra unidad, de tal manera que puedan estar con placas alternadas para que puedan circular diario con alguno de sus coches y esto lo que incentiva es el crecimiento del parque vehicular. Lo que vemos ahora es este riesgo: si la medida queda como permanente, después del 30 de junio, incentivaría un crecimiento del parque vehicular aún más acelerado, sin dar una solución definitiva al problema que en realidad se podría encontrar en alternativas como el transporte público», subrayó Fatima Masse, consultora del IMCO.
Este martes, en el primer día de la medida emergente del Hoy No Circula, los principales medios de transporte de la Ciudad de México quedaron sobrepasados ante la cantidad de personas que los emplearon. En el Metro como en el Metrobús se apreciaban largas filas, tanto para acceder a los servicios, como para recargar tarjetas y adquirir boletos.
Los primeros datos aportados por las autoridades dan cuenta de un aumento del 10 por ciento en las usuarios del Sistema de Transporte Colectivo (STP) y en el Metrobús. Mientras que los trolebuses tuvieron que disminuir la frecuencia de su paso.
Al respecto, el Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera Espinosa, se disculpó con los ciudadanos afectados por la nueva norma del programa Hoy No Circula, sin embargo, reiteró que la medida es necesaria para hacer frente a un tema de salud pública.
«Quiero aprovecha esta oportunidad para decirle a la ciudadanía que lamento mucho que tenga este inconveniente, no nos gusta que la ciudad tenga que padecer […] Estamos de nueva cuenta ofreciendo una disculpa a la ciudadanía por las molestias que se puedan causar», dijo Mancera a medios en la explanada de la delegación Iztacalco.
De acuerdo con Martín Gutiérrez Lacayo, coordinador ejecutivo de la Comisión Ambiental de la Megálopolis (CAMe), en caso de que se activen las fases I y II de Contingencia Ambiental se reducirá hasta el 40 y 50 por ciento de la circulación del parque vehicular en la zona metropolitana de la Ciudad de México.
Lo anterior, lo expuso Gutiérrez Lacayo en una reunión con la Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales de la Cámara de Diputados y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Gabriela Alarcón dijo este martes que los efectos del Hoy No Circula en este año pueden ser incluso menores que los que tuvo en los años noventa, ya que hoy existen otras opciones de movilidad particular para sustituir el automóvil, por ejemplo, taxi o Uber y en realidad el consumo de gasolina se traduce en más emisiones, por lo que la contaminación podría mantenerse.
Al presentar el informe Análisis de una contingencia anunciada: Recomendaciones para cuidar la calidad del aire en el largo plazo, las expertas señalaron cuáles son las principales causas del problema e hicieron algunas sugerencias dirigidas a las autoridades, con el fin de que se promuevan políticas públicas que contribuyan a mitigar la contaminación a largo plazo.
De acuerdo con Fátima Masse, dos son los factores causantes de la contaminación en la Ciudad de México: el primero es la tecnología obsoleta de los vehículos y el segundo es la congestión provocada por la ausencia de opciones de movilidad diferentes al automóvil.
En el caso del primero, el IMCO alertó sobre la utilización de vehículos con dos generaciones de retraso en México, lo cual implica que los automotores en nuestro país emitan entre un 70 y 80 por ciento más de óxidos nitrosos (NOx) y hasta 98 por ciento más de partículas (PM), esto en el caso de los vehículos pesados, comparados con los que circulan en Estados Unidos y la Unión Europea, algo similar a lo que ocurre con los vehículos ligeros.
Por ejemplo, el 70 por ciento de los vehículos recolectores de basura que circulan en la capital y el Estado de México tienen una antigüedad cercana a los 40 años.
Las especialistas en temas de urbanización señalaron que las medidas de largo plazo deben estar orientadas a ampliar la cobertura del transporte público de calidad, a una gestión más eficaz del uso del automóvil, así como a la apuesta por los vehículos más limpios, lo cual se establece en la NOM 042 y 044, esta última, detenida desde hace dos años por la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
«La Semarnat está en falta desde 2011 al no haber actualizado las normas oficiales correspondientes (042 y 044). Que a su vez, se deriva del incumplimiento en la distribución de combustibles de ultra bajo azufre (UBA) que Pemex debió realizar desde 2009», denunciaron.
En cuanto al segundo factor, Alarcón y Masse expusieron que tanto el Gobierno de la Ciudad de México como los del resto de las entidades de la megalópolis (Estado de México, Hidalgo, Puebla, Morelos y Tlaxcala), «han fallado en ofrecer verdaderas alternativas de movilidad al automóvil que ofrezcan condiciones de seguridad, comodidad y rapidez a sus usuarios».
Lo anterior, informaron, se debe principalmente a que 74 por ciento del presupuesto para movilidad se destina a infraestructura para el automóvil, por lo que que no se ha logrado ampliar la cobertura y capacidad del transporte público de calidad, por ejemplo, Metrobús, Metro, Suburbano, a toda la Zona Metropolitana y el Valle de México, además se ha actuado muy poco para poner en orden al transporte concesionado que incluye microbuses y combis.
Finalmente, Alarcón acusó que «la reacción de los gobiernos ha sido muy limitada».