Apple enfrenta actualmente una orden de un juez federal para ayudar al FBI a entrar en el iPhone empleado por el autor de la matanza en San Bernardino. Sin embargo, crear un software que permita al FBI desbloquear el teléfono del sospechoso podría hacer que millones de terminales más sean vulnerables a piratas informáticos y delincuentes, advirtió el director ejecutivo de Apple, Tim Cook.
Por Verena Dobnik
Nueva York, EU, 19 de febrero (AP).- Policía y fiscales de la ciudad de Nueva York dijeron el jueves que la tecnología de cifrado de alto nivel presente en los teléfonos celulares de Apple obstaculiza sistemáticamente investigaciones criminales. Y predicen que el problema podría empeorar ya que cada vez más delincuentes descubren las posibilidades de estos dispositivos para guardar secretos.
Los investigadores no pueden acceder a 175 dispositivos de Apple almacenados en el departamento de ciberdelincuencia de la fiscalía por el cifrado incluido en los últimos sistemas operativos de la empresa, dijo el fiscal de distrito de Manhattan Cyrus R. Vance Jr. en una conferencia de prensa.
«Son pruebas garantizadas», dijo agregando que la incapacidad de entrar en los terminales es especialmente problemática porque muchas de las pruebas que antes se guardaban en archivadores, en papel y en cajas fuertes, ahora están solo en los smartphones de los delincuentes.
Apple señala que la encriptación de los datos es una importante herramienta de privacidad, y muchos defensores de la privacidad han elogiado a la empresa, diciendo que la apertura de sus dispositivos a la vigilancia del gobierno, que tiene capacidad de espiar a los usuarios, podría utilizarse en exceso en países con regímenes autoritarios.
«No hay una llave mágica que solo puedan usar los buenos y no los malos», dijo Cindy Cohn, directora ejecutiva de Electronic Frontier Foundation, una organización de libertades civiles digitales.
«Cualquier vulnerabilidad que Apple se vea obligada a crear en sus teléfonos puede y será explotada por delincuentes para hacerlos menos seguros», apuntó Cohn. «Esto es realmente una cuestión de seguridad frente a vigilancia».
Apple, con sede en Cupertino, California, enfrenta actualmente una orden de un juez federal para ayudar al FBI a entrar en el iPhone empleado por el autor de una balacera el pasado diciembre en San Bernardino, también en California. Un portavoz de Apple no devolvió una llamada de teléfono el jueves pidiendo comentarios sobre las preocupaciones delas autoridades de la ciudad de Nueva York.
Vance no ofreció detalles sobre los casos que se estaban viendo afectados. Pero el comisario de la policía, William Bratton, dijo que un teléfono incautado en la investigación de un tiroteo a dos agentes en el Bronx el mes pasado está entre los inaccesibles para los detectives.
El celular fue mostrado el jueves junto a otros terminales, iPads y tablets parecidas a los 600 dispositivos investigados por el equipo del fiscal, de los cuales 175 resultaron ser inaccesibles.
Bratton dijo que los delincuentes son cada vez más conscientes de la protección que ofrecen estos dispositivos. Un reo de un penal de la ciudad fue grabado recientemente cuando, en una conversación telefónica, decía que el cifrado del iPhone era «otro regalo de dios», agregó.
Vance dijo que los investigadores dependen de los datos de los celulares para investigar asesinatos, pornografía infantil, robos y suplantación de identidad. Esto podría incluir comprobar la lista de contactos del sospechoso para obtener el los nombres de posibles testigos o cómplices, u observar videos o fotografías incriminatorias, explicó.
El CEO de Apple, Tim Cook, advirtió que crear un software que permita al FBI desbloquear el teléfono del sospechoso de San Bernardino podría hacer que millones de terminales más sean vulnerables a piratas informáticos y delincuentes.