Tras una larga y ardua investigación, he descubierto que Jesper no solo es un gato que esquía, sino que además está realmente metido en el mundo de los deportes de invierno.
Por Sean Newell
Ciudad de México, 16 de febrero (SinEmbargo/VICE).- No te mentiré, querido lector: estamos un poco de bajón tras el fin de semana del All-Star de la NBA y esperamos con ansia la vuelta de la Champions League esta tarde, así que mientras tanto debemos entretenernos con algo chulo y divertido y alegre y bonito y chingón y más adjetivos de buen ambiente que ahora no se me ocurren.
Así que hemos decidido hablarles de Jesper, el gato esquiador. ¿Por qué no? Es bonito, pequeño, peludo y hace deporte: podría ser perfectamente un redactor júnior en Vice.
Técnicamente, el nombre del gato es Jesperpus, pero todo el mundo lo llama Jesper.
Tras una larga y ardua investigación, he descubierto que Jesper no solo es un gato que esquía, sino que además está realmente metido en el mundo de los deportes de invierno. Puedes encontrarlo en Suecia, su país de origen, donde se dedica a tirar de su dueña cuando esta se cansa de esquiar como si de un perro de trineo se tratara.
Jesper, además, tiene literalmente miles de followers en Facebook. Es una estrella.
Jesper tiene cara de ser un buen gato. Al menos yo le respeto enormemente. Fíjense en cómo se cansa de tirar de su dueña como si de un perro de trineo se tratara; decide que basta, y sanseacabó. «Recógeme y hazme cariños», parece decirle a su dueña en el video.