Atletas revelaron que ante el riesgo que implica viajar a Río de Janeiro, ni el Comité Olímpico Mexicano ni la Conade han emitido recomendaciones para evitar un contagio de virus del zika.
Ciudad de México, 11 de febrero (SinEmbargo/JuanFutbol).- El 1 de febrero, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el virus del Zika como crisis de salud pública mundial. Con los juegos Olímpicos de Río de Janeiro en puerta, países como Estados Unidos y Kenia analizan la posibilidad de no ir. Mientras tanto, en México, algunos atletas revelan que ni siquiera han recibido recomendaciones por parte del Comité Olímpico Mexicano (COM) y la Conade.
La doble medallista olímpica en clavados Paola Espinosa, dice estar preparada, pero no por aviso del Comité: «Por lo que a mí respecta voy a cuidarme, irme bien preparada, llevaré mi repelente, usar playera de manga larga para evitar que me pique algún mosquito. Tratar de tomar las medidas necesarias para evitar el contagio. No me han avisado oficialmente por parte del Comité o la Conade, pero sí lo he escuchado y lo he visto en las noticias”, declaró en entrevista con el diario RÉCORD.
Por su parte, Ismael Hernández, subcampeón panamericano en pentatlón moderno, consideró que en México hay enfermedades parecidas y que con las medidas necesarias puede evitarse el contagio: “justo en la semana convocaron a las federaciones para darles detalles. Sí es un riesgo, pero hay que tomar las previsiones necesarias para evitar el contagio […] si bien en Brasil la situación es pandémica, no olvidemos que en México tenemos enfermedades de similar propagación”.
Irving Pérez, sin embargo, dijo que las cosas en Brasil están “súper bien” y que los medios de comunicación agrandan el asunto: “es un tema delicado, pues se trata de la salud, pero se acaba de hacer el festival en Río y las cosas súper bien, sin contratiempo. La prensa hace las cosas más grandes de lo que realmente son. Hace un año se hablaba de la contaminación del mar en Copacabana, yo estuve ahí en agosto pasado y el agua no tiene ningún problema, está más contaminado el lago de Valle de Bravo y se hacen triatlones”, aseveró el triatelta.
Faltan menos de seis meses para Río 2016 y, si bien, existen medidas de prevención como evitar el agua estancada o utilizar repelentes, no hay una vacuna y el riesgo de infectarse es muy alto, esperemos que tanto el COM como la Conade preparen a los atletas para evitar problemas.