Londres, 24 nov (EFE).- La mayoría de casos de abusos sexuales de menores en Inglaterra son cometidos por un familiar o un amigo y hasta el 85 por ciento de esos incidentes no se denuncian, según un informe divulgado hoy.
Se trata del mayor análisis detallado de este tipo de delitos cometidos en Inglaterra hasta la fecha, que se ha realizado a partir de información recabada de varias fuentes, entre ellas la policía, ayuntamientos y sondeos entre más de 750 víctimas.
Si bien hasta la fecha la mayor parte de la atención se ha centrado en aquellos casos cometidos en instituciones de menores, la mayoría se dan en entornos familiares o círculos de confianza del niño, según las conclusiones del documento.
Entre los hallazgos se desprende que dos tercios de los abusos se dieron dentro del entorno familiar del menor o en su círculo cerrado.
El informe detectó también que el 75 por ciento de las víctimas fueron niñas y los abusos ocurrieron cuando los menores tenían un promedio de 9 años.
Las víctimas con frecuencia no hablan de lo ocurrido hasta que llegan a la adolescencia o más tarde, cuando son capaces de reconocer lo que les ha pasado.
Anne Longfield, del Comisionado para la Infancia, observó que las recientes investigaciones sobre estos casos se habían centrado en instituciones.
«Ahora debemos despertar y abordar con urgencia la manera más común de abuso sexual de un menor, que ocurre a puerta cerrada con las familias o sus círculos de confianza», dijo.
Longfield instó al Gobierno británico a adoptar medidas urgentes para prevenir los abusos, y a que haya más formación para ayudar a profesores, servicios sociales, policía y otros profesionales a identificar esos casos.
«Siempre hay señales. Problemas de salud mental, niños que se vuelven retraídos o muestran un comportamiento muy sexual. Si conoces al niño, será evidente ver cambios en sus comportamiento», explicó esta experta.
El informe hace un llamamiento al Gobierno para que despliegue una mayor estrategia para evitar los abusos, que incluya un aumento de las responsabilidades de las personas que trabajan con niños y que se enseñe a los profesores a detectar señales en el menor.
También quiere que se enseñe a los niños a partir de los 5 años, en clases obligatorias, sobre las relaciones seguras y saludables; que se les instruya a hablar con un adulto adecuado si les preocupa un caso de posibles abusos y que las víctimas reciban apoyo si denuncian su caso.