Un comunicado de la oficina de prensa vaticano informó que Poroshenko ha sido recibido esta mañana en audiencia por el pontífice y sucesivamente se entrevistó con el cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado, a quien acompañaba el Arzobispo Paul Richard Gallagher, Secretario para las Relaciones con los Estados.

“Las conversaciones, que se han desarrollado en una atmósfera de cordialidad y durante las cuales se han reiterado las buenas relaciones entre la Santa Sede y Ucrania, se han centrado principalmente en las cuestiones relacionadas con la situación de conflicto en el País”, dijo.

Según el comunicado, “hay un deseo compartido de que con el esfuerzo de todas las partes interesadas, se privilegien las soluciones políticas, empezando por la realización plena de los Acuerdos de Minsk.

Asimismo, añadió, se ha puesto de manifiesto la preocupación por las dificultades a la hora de enfrentar la emergencia humanitaria”.

Específicamente, dijo el comunicado, con una referencia especial al acceso de las organizaciones especializadas en la zona afectada por las hostilidades, a la asistencia sanitaria, al intercambio de prisioneros, además de a las repercusiones económicas y sociales del conflicto en todo el territorio.

El encuentro ha brindado la ocasión para poner de relieve el importante papel de las Iglesias en la sociedad, además de la aportación de las comunidades greco-católicas y de rito latino a la vida del país.

Francisco regaló al mandatario ucraniano un medallón con el relieve de un olivo y dijo: “este es mi deseo de paz para Ucrania”.

A través de su página en Facebook, Poroshenko dijo que el jefe de la Iglesia aceptó su invitación para visitar Ucrania en una fecha por determinar.