Atenas, 12 nov (dpa) – Una huelga general de 24 horas convocada en Grecia en protesta contra la política de recortes del Gobierno paralizó hoy gran parte de la actividad en el país, en la primera medida de gran alcance contra la política del ejecutivo de izquierda del primer ministro, Alexis Tsipras.
«Luchamos contra el empobrecimiento, paren ahora el programa de ahorro», gritaban los manifestantes en un acto convocado en Atenas al que acudieron miles de personas.
Numerosos manifestantes llevaban hoy globos en los que se leía: «La palabra de Alexis Tsipras», en referencia a que sus promesas electorales no eran más que aire.
Un grupo de unos 300 encapuchados lanzaron piedras y artefactos incendiarios contra la policía, a lo que los funcionarios respondieron con gas lacrimógeno y granadas de humo, contaron testigos.
Los analistas ven en la huelga un pulso entre el gobierno y los sindicatos.
Ministerios, autoridades públicas, escuelas, teatros, el transporte de cercanías, trenes y ferris cesaron sus actividades, informaron las asociaciones sindicales pública y privada, ADEDY y GSEE, así como el sindicato comunista PAME.
Casi todos los vuelos internos fueron también cancelados, pero los internacionales se efectuaron con normalidad, dijo una portavoz del aeropuerto de Atenas.
Los médicos de los hospitales públicos tratan sólo casos de urgencia. «Necesitmos urgentemente personal. Los hospitales se vienen abajo», dijo a dpa el ortopedista Giorgos Tagaris.
También la mayoría de lugares arqueológicos como la Acrópolis de Atenas y los museos permanecieron cerrados.
El servicio de recogida de basuras tampoco está trabajando e incluso la capilla de la música de la ciudad acudió a las protestas para acompañarlas de música.
Las radios y televisiones no emiten noticias desde las 6:00 horas (4:00 GMT), en medio de la huelga de periodistas que hará que el viernes no se editen diarios.
Tsipras prometió al iniciar su primer mandato en enero que pondría fin al programa de recortes en las negociaciones con los acreedores de Grecia pero en julio tuvo que aceptar un nuevo programa de reformas y recortes ante el peligro de bancarrota del país a cambio de recibir nuevas ayudas millonarias.
Después convocó nuevas elecciones el 20 de septiembre en las que volvió a ganar pese a su cambio de rumbo.
A cambio de hasta 86 mil millones de euros en ayudas Atenas tendrá que hacer fuertes recortes, entre otros en jubilaciones y salarios.
