Las encargadas refieren que no dejarán su cargo hasta que el Ayuntamiento «liquide la deuda que como institución» tiene con el Centro.
Ciudad de México, 4 de noviembre (SinEmbargo).– Alejandra Otriz y Ana Libia Valltierra, actuales directora y encargada del Centro de Control Canino y Felino de Chilpancingo, Guerrero, denunciaron en entrevista para SinEmbargo ser víctimas de un «despido injustificado y arbitrario» por parte del Ayuntamiento municipal.
Las también animalistas indicaron que el día de ayer cerca de 12 a 14 personas acudieron a las instalaciones del centro a «desalojarlas» con el fin de dar posesión a un nuevo director para el lugar, a pesar de que no existe ningún anuncio oficial del nombramiento y de que «durante los últimos tres años han tenido en total abandono este lugar»:
«Estas personas vinieron a decirnos que por órdenes del Alcalde, Marco Antonio Leyva Mena, teníamos que irnos, que porque ellos necesitan que llegue el nuevo director, debido al cambio de administración. Dijeron que venían a levantar un acta [no especificaron de qué]. Es muy lamentable que ellos aparezcan después de tres años de nunca haber venido», denuncia Ana Libia.
Con anterioridad, la animalista había señalado a este medio que desde que ella y Alejandra Ortiz están a cargo de la «perrera» las autoridades no ofrecieron ningún apoyo para su manutención:
«Durante los tres años del Alcalde anterior acudimos a él, con el entonces Secretario de Salud [Alejandro Floylan Leyva] y la Regidora de Salud [Yeni Solis], pero siempre nos dijeron que no había presupuesto. Pedíamos medicamento, material de curación, de limpieza, si quiera que nos prestaran a uno de esos veterinarios que cobran en la nómina y que no conocemos, pero nunca nos hicieron caso».
«Ahora –acusa la encargada– vienen a decirnos, después de que ellos nunca nos han pagado, ni a los empleados, ni han invertido en la infraestructura, que necesitan el lugar porque ellos ‘tienen que administrar el recurso’, pero no existe tal, porque desde hace tres años que el Ayuntamiento no da ni un centavo. Además, ellos aparecen para hacer cambio de la dirección del Centro cuando el anterior director estuvo más de 20 años en el cargo. No es el puesto el que nos importa, sino que nunca han dado nada aquí como para reclamar el lugar de un día para otro».
La denuncia también se ha hecho a través del portal de Facebook del Centro con algunas publicaciones. En una de ellas se señala: «En cuanto el señor alcalde, a nombre del ayuntamiento, liquide la deuda que como institución tiene, con gusto nos retiramos. La ayuda a los animales la damos nosotras. NO el municipio» (sic).
Además, indican que: «En cuanto el edil nos informe que lugar se nos ha destinado para dar cobijo y alojamiento a los casi 200 perritos que mantiene la sociedad civil, no el ayuntamiento, con gusto nos retiramos. Cuando reconozcan que nos hicimos cargo de un problema que correspondía resolver a las autoridades y no a dos personas, nos vamos».
«Se trata de un despido arbitrario porque ni siquiera existe el anuncio oficial de un nuevo director ni nos dieron plazo para irnos –sostiene Ana Libia Valtierra–. Ellos vienen a exigir unas instalaciones a las cuales no tienen derecho porque nunca en estos tres años se han hecho cargo de ellas. Al final de todo el cargo es lo de menos, nosotras queremos saber qué harán con los casi 200 perritos que tenemos aquí, porque la protección animal no es una premisa en sus vidas y mucho menos en su forma de gobernar».
Hasta el cierre de esta edición, el Ayuntamiento de Chilpancingo no hizo anuncio del cambio de director para el Centro de Control Canino y Felino y personal de la Secretaría de Salud Municipal indicó no tener conocimiento de la situación.
