Para el organismo, dicha estrategia es prioritaria para apuntalar los instrumentos vigentes de promoción, fortalecer la estructura productiva y ofrecer a las empresas micro, pequeñas y medianas, herramientas de apoyo, acompañamiento y orientación que les permitan sumarse a la tarea modernizadora del país.
México, 1 Nov (Notimex).- México necesita impulsar otra reforma económica de gran calado, la política industrial de nueva generación, sostuvo la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).
El organismo afirma que sin ella difícilmente acabaran los contrastes existentes y la economía no tendrá el combustible necesario para alcanzar el crecimiento acelerado.
Para el organismo, dicha estrategia es prioritaria para apuntalar los instrumentos vigentes de promoción, fortalecer la estructura productiva y ofrecer a las empresas micro, pequeñas y medianas, herramientas de apoyo, acompañamiento y orientación que les permitan sumarse a la tarea modernizadora del país.
Considera que además de articularse la política industrial que se necesita, es preciso que el Instituto Nacional del Emprendedor (Inadem) y la banca de desarrollo construyan un programa para el fondeo de la reconversión productiva y competitividad, porque “estamos a tiempo para lograrlo”.
Dicho programa, continúa, debe ser en favor de los sectores y empresas industriales que disponen de capacidad, talento y compromiso para modernizarse, actualizar procedimientos y tecnologías, así como capacitar mejor a sus trabajadores, para convertirse en proveedores confiables y competitivos.
En su publicación “Radiografía de la economía y la industria mexicana”, el organismo industrial estima que este último trimestre de 2015, el balance de resultados en materia económica ofrece luces y sombras.
Expuso que la inflación, las tasas de interés y las finanzas públicas se mantienen estables y no representan peligros potenciales para la evolución de la economía en los meses por venir y mejora el empleo, mientras que la industria automotriz sigue reportando niveles históricos en producción, ventas y exportaciones.
Sin embargo, aclara, la producción, la inversión y buena parte de las exportaciones no petroleras han perdido dinamismo y no hay una mejoría sustancial en la percepción de empresarios y consumidores en materia económica.
Estima que por ello no hay que perder de vista que contar con una política industrial activa, integral e incluyente, es un factor crucial para elevar la competitividad, modernizar a las pequeñas y medianas empresas, incrementar la productividad y mejorar la calidad de vida en los hogares.
Para el organismo industrial, perfeccionar la apertura comercial es una tarea que debe complementarse con el fortalecimiento de la base industrial.
La suscripción de acuerdos como el Acuerdo Estratégico Transpacífico de Asociación Económica (TPP) amplía las opciones para exportar productos mexicanos a otros países, pero su cabal aprovechamiento depende de la diversificación de empresas exportadoras y de la creación de sólidas cadenas de valor.
Subraya que el éxito del esfuerzo exportador supone, necesariamente, incrementar el contenido nacional, y esa debe ser una de las prioridades.