Washington, 30 oct (EFE).- El diplomático venezolano Bernardo Álvarez volvió a Estados Unidos para asumir hoy su cargo como nuevo embajador ante la Organización de Estados Americanos (OEA) después de que EU le expulsara del país en 2010, cuando ejercía como jefe de la misión diplomática del país caribeño en Washington.
Álvarez, de 59 años y que recientemente se ha desempeñado como diplomático en Europa, presentó hoy las cartas que lo acreditan como representante permanente de Venezuela ante el organismo hemisférico en sustitución de Roy Chaderton, que ha ejercido el cargo durante más de siete años.
«Creo que nos toca a nosotros estar aquí en responsabilidad, en medio de lo que muchos han llamado un resurgimiento de América Latina y el Caribe», destacó Álvarez durante la ceremonia en la sede de la OEA en Washington y ante el Secretario general de la organización, Luis Almagro.
El que fuera embajador de Venezuela ante EU entre 2003 y 2010 mencionó durante la entrega de sus credenciales a otros entes como la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América (ALBA).
«Esas son organizaciones muy importantes que han surgido en los últimos años y son el corazón de una nueva integración», defendió Álvarez, cuyo país gobernado por Hugo Chávez, jefe de Estado desde 1999 hasta su muerte en 2013, fundó nuevas alianzas regionales en el Caribe, como Petrocaribe, creado en 2005.
La OEA, criticada por Venezuela, es un «organismo interesante para dialogar sobre otros actores de la región como EU y Canadá», destacó Álvarez, que aseguró que buscará una relación «franca e institucional» con Almagro, elegido como secretario general de la OEA el pasado 18 de marzo.
El nuevo representante se encargará de asumir hasta el próximo 31 de diciembre la Presidencia del Consejo Permanente de la OEA, cargo rotatorio que ejercen todos los países miembros y que Venezuela aceptó el pasado 1 de octubre para ostentarlo durante los tres meses siguientes.
«Acabas de llegar y ya eres Presidente del Consejo Permanente. Esa es una de las trayectorias más meteóricas que se ha visto en la OEA», bromeó Almagro durante el acto.
En su intervención, el Secretario General de la OEA recordó que el antecesor de Álvarez, Roy Chaderton, «pronosticó un gran número de desacuerdos políticos» con la organización, pero acabó teniendo con Almagro «una gran relación personal».
«Las largas series de desacuerdos políticos si podemos evitarlos, eso va a ser genial. Y si no, espero que encontremos la manera de que los dos mantengamos la credibilidad», destacó Almagro, que expresó su deseo de trabajar con el nuevo representante del país caribeño en el organismo.
EU, donde tiene sede la OEA, y Venezuela no tienen embajadores desde 2010, cuando el Gobierno de Hugo Chávez rechazó la designación de Larry Palmer como nuevo jefe de la misión diplomática estadounidense en Caracas.
En respuesta, Estados Unidos revocó entonces el visado al Embajador Bernardo Álvarez.
«Es una ciudad que conozco y siempre es agradable volver a un sitio que uno conoce y donde tiene raíces. Esta sigue siendo una ciudad muy interesante para los que nos interesa y nos gusta la Política», dijo Álvarez a los medios tras acreditarse como nuevo embajador de Venezuela ante la OEA.