El paquete fiscal, expuso, es aún insuficiente para promover más la productividad y competitividad del sector industrial mexicano, pero reflejada varias de las propuestas de los industriales en la materia, de acuerdo con un comunicado.

El líder de los industriales reconoció la apertura y disposición al diálogo por parte de los legisladores a las propuestas de la planta productiva mexicana, e indicó que el incremento de las deducciones inmediatas para las medianas empresas, de hasta 100 millones de ingresos, son un aliciente para la reactivación y renovación de los activos productivos.

Respecto al incremento del monto para la deducibilidad de autos de 130 a 175 mil pesos, Herrera Vega destacó que “esto mejora las condiciones, pero aun así creemos que se debería considerar continuar incrementando valor para que los vehículos que usan nuestros trabajadores y empresas pudieran tener las medidas de seguridad mínimas necesarias”.

Otra medida positiva para la industria nacional es que el sector minero podrá acreditar el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) del diésel contra el Impuesto Sobre la Renta (ISR).

Sin embargo, en opinión del presidente de la Concamin se debería autorizar, además, la deducción de los periodos preoperativos.

Herrera Vega calificó como positivo para los trabajadores de la planta productiva mexicana la autorización a cinco salarios o 15 por ciento las deducciones personales, toda vez que contribuirá a beneficiar el poder adquisitivo de los mexicanos y reactivar la actividad económica.

De igual forma, la autorización para que quienes tengan incapacidades permanentes puedan acreditar los gastos inherentes a sus atenciones.

Otro de los resultados a destacar, es el relativo a la capitalización delgada a las empresas del sector de energía, agregó.

Entre los temas que quedaron pendientes para la industria mexicana, Herrera Vega señaló los incentivos en el sector autotransporte para la actualización del equipo utilizado, ya que esto contribuiría a la actualización de la flota vehicular.

También, la derogación de 3.0 por ciento del IEPS a las telecomunicaciones, la deducción de gastos en restaurantes por lo menos a 50 por ciento, así como la deducibilidad de prestaciones sociales, ya que esto incrementaría el poder adquisitivo de los propios trabajadores.

El presidente de la Concamin indicó que los industriales continuarán de manera permanente sus trabajos de interlocución con el Congreso, a fin de transmitir las propuestas del sector industrial en su conjunto, ya que la agenda legislativa del sector incluye varios temas de prioridad para la industria.