El Banxico reconoce que su futura decisión de política monetaria dependerá de los efectos de lo implementado por la Reserva Federal en Estados Unidos, la cual mantuvo ayer su tasa de interés entre cero y 0.25 por ciento. No se puede descartar el riesgo de que las economías emergentes con mayores vulnerabilidades macroeconómicas enfrenten un proceso desordenado de ajuste económico y financiero.
Ciudad de México, 29 de octubre (SinEmbargo).– La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) ha decidido mantener en 3 por ciento la Tasa de Interés Interbancaria a un día, como parte del objetivo de alcanzar una inflación del 3 por ciento.
«Las condiciones de la economía siguen mostrando debilidad, la inflación general ha continuado descendiendo y se espera que se mantenga por debajo del objetivo durante 2015, la inflación subyacente ha permanecido por debajo de 3 por ciento y las expectativas de inflación están bien ancladas, a pesar de la depreciación de la moneda nacional», explicó en un comunicado.
Sin embargo, agrega, las posibles acciones de política monetaria de la Reserva Federal podrían tener repercusiones sobre el tipo de cambio, las expectativas de inflación y, por ello, sobre la dinámica de los precios en México.
La Junta de Gobierno, dijo, se mantendrá atenta a la evolución de todos los determinantes de la inflación y sus expectativas para horizontes de mediano y largo plazo, en particular a la postura monetaria relativa entre México y Estados Unidos, al traspaso de movimientos del tipo de cambio a 29 de octubre de 2015, así como a la evolución del grado de holgura en la economía.
La actividad económica en México continúa mostrando un crecimiento moderado, expone. Las exportaciones han perdido dinamismo, dada la desaceleración de la demanda externa, los deprimidos precios del petróleo y la reducción de la plataforma de producción.
Por su parte, la inversión ha mantenido un crecimiento bajo. Sin embargo, el consumo se ha fortalecido, apoyado por el mayor empleo, el incremento tanto en las remesas como en el financiamiento bancario y los bajos niveles de inflación.
Aun así, prevalecen condiciones de holgura en la economía en su conjunto y en el mercado laboral, por lo que no se anticipan presiones generalizadas sobre los precios provenientes de la demanda agregada, ni de los mercados de insumos.
Se considera que el balance de riesgos para el crecimiento se deterioró respecto de la decisión previa de política monetaria.
ECONOMÍA EN EL MUNDO
La economía mundial ha continuado debilitándose. La modesta recuperación de las economías avanzadas y la persistente desaceleración en las emergentes se han retroalimentado a través del menor dinamismo del comercio internacional y de los mercados financieros.
La economía de Estados Unidos ha venido expandiéndose a un ritmo moderado, en parte por la apreciación del dólar y de una menor demanda global. El mercado laboral en dicho país sigue mostrando una recuperación, aunque más lenta que en el pasado a juzgar por la desaceleración de la creación de empleos en los últimos meses. La inflación se mantiene en niveles bajos como reflejo de la evolución reciente de los precios de la energía y de la apreciación del dólar.
En este entorno, la Reserva Federal ha señalado que sus acciones futuras dependerán de la evolución de la actividad económica, del mercado laboral y de la inflación.
En la gran mayoría de las economías emergentes la actividad económica siguió perdiendo vigor, en parte por los bajos precios de las materias básicas y la desaceleración de China, mientras que el comportamiento de la inflación ha sido más divergente, por lo que la respuesta de política monetaria también ha sido diferenciada entre países.
Sin embargo, se espera que las condiciones monetarias a nivel global permanezcan extraordinariamente acomodaticias en el futuro previsible.