Ciudad del Vaticano, 8 oct (EFE).- El Papa Francisco instó a los participantes del Sínodo, que comenzó el pasado lunes, a que eviten pensar que existen «complots» o «manipulaciones» y que se tengan confianza, explicó hoy el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi.
Lombardi fue llamado por la prensa a responder sobre la expresión del Papa, que habló de «hermenéutica de la conspiración» en su discurso del pasado martes a los llamados «padres sinodales», y que fue publicada por un participante, pero no comunicada por el Vaticano.
El portavoz vaticano no desmintió que el Papa dijera esas palabras y explicó que así Francisco quiso expresar «que hay que tener una plena confianza los unos en los otros, estar convencidos de lo que se expresa, y que el proceso sinodal se celebra en plena libertad y expresión sincera de las propias opiniones».
Y «que no se puede pensar que hay complots y personas que intentan manipular la visión del Sínodo desde el interior o el exterior», añadió Lombardi interpretando las palabras del Papa.
Les instó, agregó el portavoz vaticano, a que esta asamblea que trata temas relacionados con la familia, «sea un proceso, un intercambio de comunicación que se realice con sinceridad y tranquilidad».
La prensa italiana destaca hoy en algunos artículos cómo algunos participantes – cardenales y obispos – criticaron la metodología utilizada y criticaron que el Sínodo esté «pilotado para tomar un camino aperturista».
Estas críticas llevaron al Papa, explica la prensa, a tomar la palabra el martes para hablar de la «hermenéutica de la conspiración».
Las sesiones del Sínodo continúan en estos días y desde ayer se reúnen los círculos menores, los grupos por idiomas en los que se ha dividido a los 270 padres sinodales, para redactar una primera análisis.
En la rueda de prensa diaria que ofrece el Vaticano sobre el Sínodo, el cardenal italiano Edoardo Menichelli defendió hoy que se hable en la asamblea del papel de las mujeres y de los homosexuales, ya que dijo, «son hermanos que viven en el contexto de una familia».
Por su parte, el obispo sirio católico Ignace Youssif III Younan explicó el problema de las familias divididas y destrozadas al escapar del infierno que es actualmente Siria e Irak. EFE