Hasta el momento sólo el Gobierno de México anunció que enviará a rescatistas que ayuden con la labor de búsqueda.
Guatemala, 3 oct (EFE).- Las autoridades de socorro de Guatemala elevaron hoy a 85 los muertos y mantuvieron en unos 350 los desaparecidos por el deslizamiento de tierra que arrasó con un asentamiento cercano a la capital, al tiempo que han suspendido las labores de búsqueda por seguridad.
El desastre ocurrió el jueves por la noche en El Cambray II, del municipio de Santa Catarina Pinula, a escasos 20 kilómetros de la capital guatemalteca.
Según cifras oficiales del Ministerio Público (MP-Fiscalía), hasta el momento son 85 los cadáveres recuperados, aunque el portavoz de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) en el lugar, Sergio Cabañas, que maneja cifras menores por los protocolos, informa de 69 fallecidos, 34 rescatados, casi 200 albergados y 2 mil 500 evacuados. Los equipos de rescate y habitantes de la zona seguían buscando cuerpos de víctimas en el barrio de El Cambray II, al caer la noche del sábado.
Cabañas indicó que en las labores participan mil 600 personas con «capacidad operativa». A ellos se suman decenas de voluntarios con palas y piochas, aunque se les permite ingresar para colaborar por turnos.
Algunas viviendas quedaron hasta 20 metros bajo la superficie terrestre, dijo el jefe de bomberos Fritz García-Gallont al diario «Prensa Libre».
Los equipos suspendieron anoche las labores por el cansancio luego de más de 12 horas de trabajo desesperado y la falta de visibilidad.
Los bomberos informaron que algunos voluntarios se quedaron en el lugar durante la noche para tratar de escuchar voces debajo de los escombros.
A lo largo de 160 metros lineales donde antes había casas, ahora no hay más que terreno plano y debajo de esa tierra los rescatistas buscan a las víctimas.
En el lugar un cerro se partió en dos debido a la fragilidad del terreno tras varios días de lluvias. El conjunto de viviendas era habitado por familias de condición humilde que se establecieron a la orilla del río Pinula. El cerro que se derrumbó se alzaba junto al poblado con una altura de más de 50 metros.
El suceso se registró en la medianoche del jueves y la acción coordinada para la búsqueda de supervivientes se activó en la madrugada del viernes.
Entre los cuerpos de las víctimas identificadas se cuenta el de Quayni Bonilla Sandoval, seleccionado nacional de squash.
Guatemala es considerada por las Naciones Unidas como uno de los diez países más vulnerables al cambio climático en todo el mundo.
En junio, Reino Unido, Alemania, Francia y la Unión Europea (UE) instaron a Guatemala a debatir y asumir acciones para reducir el impacto negativo del cambio climático en el país de 15.8 millones de habitantes de cara a la Conferencia sobre Cambio Climático (COP21) a celebrarse en diciembre en París.
El Presidente guatemalteco, Alejandro Maldonado, quien asumió el 3 de septiembre tras la renuncia de Otto Pérez, dijo que el Estado está haciendo su mejor esfuerzo por atender la emergencia, pero reconoció la falta de recursos. Explicó que la comunidad internacional ya comprometió el apoyo necesario y que se espera la ayuda del sector privado.
Varias empresas reaccionaron inmediatamente trasladando comida para los rescatistas y sobrevivientes.
La embajada de Estados Unidos expresó su solidaridad por medio de su cuenta de Twitter: «La Embajada y el pueblo de los Estados Unidos expresan sus más profundas condolencias».
El Gobierno de México enviará un grupo especializado en rescate a Guatemala, informó hoy el coordinador nacional de Protección Civil, Luis Felipe Puente.
«Por instrucciones del Presidente Enrique Peña Nieto y coordinado por el secretario de Gobernación (ministro del Interior) Miguel Ángel Osorio Chong, se envían especialistas en rescate en apoyo a Guatemala», escribió Puente en su cuenta en Twitter.
En la madrugada de hoy, Peña Nieto expresó su solidaridad a Guatemala, también a través de la red social.
«A nombre de México, envío un mensaje de solidaridad a Guatemala, por las lamentables pérdidas humanas tras el deslave ocurrido en Cambray II», escribió el mandatario, en tanto que a través de un comunicado la Secretaría de Relaciones Exteriores expresó sus condolencias «por las consecuencias lamentables» del derrumbe.