Pekín, 27 sep (EFE).- Cinco famosas feministas chinas que este año fueron arrestadas cuando preparaban una campaña contra el acoso sexual dirigieron hoy una misiva al secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, para recordarle la represión de la mujer en China y pedir que sus casos y otros sean atendidos.
Poco antes de que la Asamblea General de la ONU en Nueva York celebre un encuentro mundial sobre mujeres liderado por Ban, el presidente chino, Xi Jinping, y la directora ejecutiva de ONU Mujeres, Phumzile Mlambo-Ngcuka, las «Cinco Feministas», como se las conoce en China, aseguraron que tienen grandes esperanzas en esa reunión.
«El presidente Xi puede en ella dar ejemplo y reforzar los compromisos tomados en la Conferencia Mundial sobre Mujeres (celebrada en Pekín en 1995, y cuyo aniversario conmemora el encuentro de hoy) anunciando planes concretos para promover la igualdad de genero y los derechos de la mujer», destaca la carta.
Las cinco activistas (Li Tingting, Wei Tingting, Wu Rongrong, Wang Man y Zheng Churan), quienes ya habían dirigido una carta a Ban el pasado julio, recuerdan en esta nueva misiva que se les detuvo cuando preparaban una campaña contra el acoso sexual en los transportes públicos el pasado marzo.
«Gracias a usted y a la comunidad internacional, estamos en libertad, por insuficientes evidencias. Tras 37 días de detención fuimos liberadas bajo fianza el 13 de abril, pero los cargos aún no han sido retirados», recordaron las firmantes.
La reunión de hoy podría ayudar a que su caso sea totalmente archivado por la Justicia china, «lo que podría servir para reconocer a todos los jóvenes chinos que luchan por la justicia social, y un buen paso hacia la verdadera igualdad de géneros en China» y en el mundo, subrayaron.
Las cinco feministas lamentan que todavía sufren muchas restricciones de movimientos, y que su abogada defensora, Wang Yu, fue detenida dentro de la campaña contra letrados chinos dedicados a casos de derechos humanos.
«La sociedad civil (china) no puede ser un socio eficaz del Gobierno o de las Naciones Unidas», denuncia la carta, donde se asegura que el actual panorama en el régimen comunista es «devastador».
Ayer, sábado, la organización Amnistía Internacional aseguró que el hecho de que el presidente chino sea uno de los anfitriones de la reunión sobre la mujer hoy en Nueva York constituía una «hipocresía», dada la persecución de muchas mujeres chinas conocidas por su activismo en pro de las libertades fundamentales.
La organización con sede en Londres citó casos de activistas como el de Su Changlan, que afronta una posible pena de 15 años de cárcel por «subversión» tras colaborar en campañas en las que se pedía el fin de la violencia contra las mujeres, así como el matrimonio precoz o forzado.
También denunció la situación de la periodista independiente Gao Yu, condenada a siete años de prisión por «desvelar secretos de Estado», un delito que los grupos de derechos humanos consideran en su caso injustificado y un ataque a la libertad de prensa.