Por Inés García Ramos
La organización criminal “Los Cuinis”, uno de los cárteles más poderosos y violentos en México, de acuerdo a Estados Unidos, cuenta con al menos 15 empresas en Jalisco y Quintana Roo, la cuales prestan sus servicios a la organización liderada por Abigael González Valencia. Así lo informó, este 19 de agosto, el Departamento de Tesoro de Estados Unidos, el cual incluyó a las compañías y a seis colaboradores del cártel, en la lista de narcotraficantes especialmente designados para bloquear sus transacciones en la Unión Americana. El cártel, con operaciones centrales en Jalisco, ya había sido señalado por el gobierno estadounidense como una entidad financiera bloqueada. Entre las empresas de “Los Cuinis”, aparecen Hotelito Desconocido, un hotel y spa de lujo ubicado en Tomatlán, así como las inmobiliarias Ahome Real Estate en Guadalajara, Jalisco y Bric Inmobiliaria en Zapopan, Jalisco.
Mientras que entre los centros comerciales, aparecen la Plaza Tules en Zapopan, Jalisco y Zaman Ha Center en Playa del Carmen, Quintana Roo. Además de Abigael González Valencia “El Cuini”, quien es identificado como operador financiero para el Cártel Jalisco Nueva Generación y su cuñado Nemesio Oseguera Cervantes “El Mencho”, el gobierno de Estados Unidos identifica a Jennifer Beaney Camacho Cazares, Diana María Sánchez Carlon, Silvia Romina Sánchez Carlon, María Elena Márquez Gallegos, Wendy Dalaithy Amaral Arévalo y Fernando Torres González. Si bien, “El Cuini” se encuentra recluido en la penitenciaría de El Altiplano desde su arresto el 28 de febrero de 2015 en un operativo de la Marina Armada en Puerto Vallarta, Jalisco, “El Mencho” continúa prófugo. Ambos son acusados por la Fiscalía Federal de Columbia en Estados Unidos de los delitos de narcotráfico, por lo que la Corte de ese distrito, emitió una orden de aprehensión provisional con fines de extradición, la cual todavía no ha sido ejecutada ya que el narcotraficante se amparó.
De acuerdo con John E. Smith, director de acciones de la Oficina del Tesoro para Control de Activos Extranjeros, esta designación “marca el primer paso en desmantelar esta significativa red de negocios. Estos negocios e individuos no podrán continuar operando bajo el velo de la legitimidad”. La ampliación de esta sanción, implica que cualquier activo de la empresa o personas bajo jurisdicción de Estados Unidos, queda congelada y se le prohíbe a cualquier ciudadano entablar transacciones financieros con ellos.
Las sanciones financieras para quienes violen estas disposiciones fiscales en Estados Unidos, son de hasta 10 millones de dólares y diez años de prisión. A través de un comunicado de prensa, la Oficina informó que en esta operación participaron la División de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos en Los Ángeles.