Ciudad de México, 11 de julio (SinEmbargo).– En unos cuantos días, la empresa española Obrascón Huarte Lain (OHL) pasó de ser considerada una de las constructoras consentidas del Presidente Enrique Peña Nieto desde que era Gobernador del Estado de México, a ser una empresa que presuntamente sobornó a funcionarios estatales y federales para obtener todo tipo de facilidades para obtener millonarios contratos de obra pública durante tres sexenios, así lo describe la oposición mexiquense.
Para el Partido Acción Nacional (PAN) el reciente escándalo confirma lo que han denunciado durante varios años: que existe una red de corrupción enquistada en el Gobierno de la entidad ligada a la española OHL, no sólo en este sexenio, sino que viene desde la época en que Peña Nieto era coordinador de los diputados del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el Congreso del Estado de México.
“Siempre han ido de la mano los dos temas: el crecimiento [político] de Enrique Peña Nieto con el de OHL gracias al Circuito Exterior Mexiquense y otras obras en el Estado de México”, afirmó el dirigente estatal del PAN, Óscar Sánchez Juárez.
Para el dirigente regional no es casualidad que los escándalos por presunta corrupción de miembros directivos de OHL hayan permeado al gabinete de Peña Nieto, involucrando a Gerardo Ruiz Esparza, actual Secretario de Comunicaciones y Transportes, y ex secretario de Comunicaciones del Estado de México del 2005 al 2011.
“Yo apelaría a que por lo menos el secretario sea destituido o que él mismo por un poquito de dignidad o vergüenza entregue su renuncia, porque es triste esto que está pasando en el país”, dijo a SinEmbargo el panista Óscar Sánchez.
El pasado 5 de mayo, la prensa española reveló la grabación de dos audios que contienen llamadas telefónicas relacionadas con representantes de OHL y funcionarios del gobierno del Estado de México, en donde se destapa un posible contubernio en la construcción y operación del segundo piso del Periférico Mexiquense conocido como Viaducto Elevado Bicentenario.
En uno de los audios se escucha a directivos de la empresa OHL, declarar que en los contratos de obra civil es común realizar un sobrecosto de al menos 25 por ciento del costo real de la obra. Además se entiende que supuestamente se triplicó de manera intencional el costo de la construcción del “Viaducto Bicentenario”.
La difusión de los audios, independiente de que se trate en sí mismo de un supuesto ilícito, han llegado al primer círculo del gabinete presidencial, específicamente hasta la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), cuyo titular, Gerardo Ruiz Esparza, ha sido implicado en un supuesto contubernio para brindar acceso a información privilegiada a la empresa española.
Como titular de la SCT Ruiz Esparza ha estado constantemente en el ojo de huracán, principalmente por los lazos que mantiene el Gobierno federal con empresas que apoyó y benefició con millonarios contratos desde que Peña Nieto era Gobernador del Edomex. Por ejemplo, con Grupo Higa, cuya filial junto con una empresa china, ganó la licitación para construir el Tren de Alta Velocidad México-Querétaro.
EDOMEX Y OHL, VIEJOS ALIADOS
Los vínculos de la empresa OHL con el gobierno del Estado de México se remontan a hace más de una década, desde que Arturo Montiel Rojas era Gobernador de la entidad. Tuvo su mayor amplitud con la administración de Enrique Peña Nieto y continúan con el actual mandatario, Eruviel Ávila Villegas.
Entre los sexenios de Montiel y Peña, la empresa OHL obtuvo las concesiones de tres obras de alto impacto, cuyas inversiones rebasan los 37 mil millones de pesos. En un punto de acuerdo presentado por Acción Nacional ante la Comisión Permanente se estima que los ingresos de esta empresa provienen en un 70 por ciento de las concesiones que obtuvo en el Estado de México con ambos mandatarios.
Asimismo, en el texto presentado el pasado 20 de mayo se calcula que las concesiones otorgadas a la empresa OHL en el Estado de México representan el 50.1 por ciento de los ingresos totales de la compañía española en el país, así como el 63.3 por ciento de sus ingresos por cobro de peajes en las diferentes vías operadas por la empresa.
“No olvidemos que la construcción del circuito mexiquense empezó en el sexenio de Arturo Montiel. Hoy ya terminó su periodo, ya terminó el periodo de Enrique Peña, ya estamos prácticamente en la recta final de Eruviel Ávila y es una obra que no se ha terminado de construir”, explicó Óscar Sánchez.
La oposición mexiquense lleva varios años en la búsqueda de información sobre las posibles irregularidades en las contrataciones del Gobierno del Estado de México con OHL. Sin embargo, al igual que la mayoría de los periodistas y ciudadanos, se ha topado con un muro de opacidad edificado desde el gobierno central en Toluca.
La situación no ha sido diferente para los legisladores panistas, quienes sostienen que todos los proyectos relativos a este asunto han sido bloqueados por la mayoría de diputados priistas en el congreso estatal. De esta forma, ha sido imposible desde allegarse de información hasta solicitar investigaciones formales sobre los contratos con OHL.
“Nos vemos limitados por la propia composición de la Cámara de Diputados, porque la mayoría la tiene el PRI [Partido Revolucionario Institucional] y mientras ellos no permitan la revisión de estos temas, la verdad es que será muy difícil y lo lamentable es que los seguimos pagando todos los mexiquenses”, explicó el líder panista estatal.
Esta situación no es exclusiva de esta legislatura local, pues han sido legisladores priistas en distintos periodos legislativos quienes han rechazado atender las solicitudes de rendición de cuentas.
MÁS DE 400 POR CIENTO DE SOBREPRECIO
El dirigente estatal del PAN y anteriormente Diputado local integrante de la Comisión de Planeación y Gasto Público, consideró urgente investigar las condiciones en que se ha construido y opera OHL el Circuito Exterior Mexiquense, una obra, dijo, plagada de irregularidades y sobreprecios desde su inicio.
“Sin embargo, es una obra que hoy en día lleva más de 400 por ciento de sobreprecio. Y lo peor del caso nos está saliendo todavía más caro a los que tenemos la necesidad de circular por allí y en eso no hemos tenido una respuesta favorable del gobierno estatal”, expuso Óscar Sánchez.
El Circuito Exterior Mexiquense tiene una longitud de 155 kilómetros y recorre 18 municipios de la entidad. El proyecto está estructurado en cuatro fases, las fases I, II y III, actualmente en operación, suman 110 kilómetros, y rodean la zona metropolitana de Ciudad de México de norte a sur por el oriente y de este a oeste en su extremo norte.
La empresa Concesionaria Mexiquense S.A de C.V. del Grupo OHL, informó que la inversión realizada hasta ahora ronda los mil 394.1 millones de euros, aproximadamente 24 mil 400 millones de pesos.
Reportó además que los ingresos de peaje en 2014 se incrementaron un 12.1 por ciento, asimismo, informó que obtuvo la mejor calificación en niveles de servicio y estado de la vía entre las autopistas de cuota del Estado de México.
Sin embargo, a decir del dirigente panista, quienes diariamente circulan por la autopista se encuentran con un mal servicio, una obra maltratada, cara y que constantemente va incrementando sus tarifas.
“Hemos señalado en la revisión de las cuentas públicas lo excesivo del crecimiento del costo de la obra, insisto más de 400 por ciento, en una obra que ha trascendido varios sexenios, y tal parece que va a trascender este también”, destacó el líder estatal panista.
Por el Circuito Exterior Mexiquense circulan más de 283 mil vehículos diariamente, a través de sus 154 kilómetros de longitud.
El costo del peaje varía según los tramos recorridos. Sin embargo, el costo de viajar en automóvil desde el extremo norte en Jorobas hasta el extremo oriental en Chalco tiene un costo total de 262 pesos, con un recorrido total de 86 kilómetros.
De acuerdo con información de la propia empresa la concesión otorgada en 2003 para la construcción del Circuito Exterior Mexiquense tuvo un aumentó en la cuota promedio de 7.6 por ciento, lo que superó el incremento inflacionario a nivel nacional, que fue tasado en 4.34 por ciento.
