Algunos de ellos iniciaron desde muy jóvenes como voluntarios en otras asociaciones, otros sabían que amaban a los animales desde muy niños y querían ayudarlos. También están los que iniciaron rescatando a un solo perro, algunos tienen un trabajo estable y se dedican a una asociación en su tiempo libre.
Por otro lado, forman una voz importante que hace presión en las decisiones de los representantes mexicanos a la hora de presentar iniciativas o reformas a leyes. Existen muchos más activistas independientes, asociaciones, organizaciones no gubernamentales que están distribuidos por todo el país que se enfocan a la protección de la fauna local, pero también están los activistas que representan los malestares de grupos más grandes.
Ciudad de México, 28 de junio (SinEmbargo).– El movimiento animalista conformado por estos miembros en todo México, atraviesa por un proceso de profesionalización y en la separación de las protestas, así como las acciones para alcanzar una injerencia mucho mayor, como lo son otros movimientos similares en otros países como Alemania, Suiza, Chile, Inglaterra y más.
Así, entre historias de desgracias y logros, existe un factor común entre estos 10 activistas que hacen cambios para mejorar la vida de los animales mexicanos: el amor hacia ellos.
PATRICIA RUIZ, MILAGROS CANINOS
Si tan sólo fuera real que se pueden separar los problemas que padece la sociedad mexicana con los que padecen los animales dentro del país también.
Uno de los casos más famosos de maltrato animal, fue cuando grupos de delincuencia organizada alcanzaron a Pay de Limón, un perro que fue mutilado de sus dos patas en Zacatecas. Diarios como The Telegraph, la BBC en Londres y programas de televisión como el de Oprah Winfrey en Estados Unidos, dieron fama al perro que hoy puede caminar con prótesis de fibra de carbono.
Pero no todo fue fama y reconocimiento para Paty Ruiz, directora de la Fundación Milagros Caninos en el Distrito Federal.
“Para mí ha sido muy difícil toparme con el gobierno, con empresas y gente que ni apoya y al contrario maltrata, también con el hecho de que no existen leyes que se cumplan”, dice en entrevista con SinEmbargo.
Ella inició con el rescate de un perro, Clavo, que falleció ahogado mientras ella dormía y eso le ocasionó un sentimiento de culpa al no poder evitar pensar que lo pudo haber ayudado si no hubiera estado dormida.
“Yo entendía perfectamente cuál era el sentido de su vida y su compañía […] él murió ahogado, entonces empecé a rescatar uno y dos y así hasta 800, a todos en situaciones extremas. Ahora entiendo perfectamente el sentido de su muerte”, confiesa la protectora sobre su perrito Clavo.
Milagros Caninos es responsable del rescate de más de 800 perros a partir de entonces, todos en situaciones de maltrato o abandono extremo, ha sido reconocida con el Premio Nacional de la Mujer y de las personas más influyentes.
Ella invita a que las personas hagan la diferencia recogiendo a un animal, buscándole un hogar sin necesidad de un refugio o santuario.
ANTONIO FRANYUTI/ ANIMAL HEROES
Es diseñador industrial, empresario, padre, activista y director de Animal Heroes.
“Animales, lamento que nosotros seamos su mejor esperanza. Seguimos haciendo nuestro mejor esfuerzo”, advierte Antonio en sus redes sociales donde está bastante activo.
Él inició en el activismo porque los animales le gustaban desde niño. En realidad, los amaba.
“Después me di cuenta que no se trataba de amor –confiesa- sino de respeto. No los tengo que amar para defenderlos, sólo es cuestión de justicia y darme cuenta de que si yo no hacía las cosas, pues no se hacían. Siempre piensan que alguien tiene que venir a hacer las cosas, hasta que uno se da cuenta que es ese alguien”, asegura en entrevista con este medio.
El activismo en México se ha profesionalizado, explica, también diversificado porque hay varias organizaciones que trabajan distintas agendas. El movimiento animalista en México se ha separado, desde su perspectiva, entre los que protestan y los que proponen.
“Ya no se trata de protestar y hacerlo como un activista que grita, sino como profesionales que se encargan de hacer un trabajo de lo que están capacitados para hacerlo y lograr cambios a través de ello”, explica Franyuti.
Para él, el punto número uno en la agenda de los temas animalistas en México son los animales de producción de alimentos, de acuerdo con el número de animales maltratados y al tipo de maltrato. Pero también, explica, se deben pensar en los que están más cerca de la gente, que son los animales de compañía y se debe trabajar con ellos, para que las personas hagan la conexión con las criaturas que tienen más lejos.
“Es importante que la gente se active y no sólo se queje porque México nos necesita no sólo en esta causa. Por eso nosotros nos llamamos héroes, invitando a toda la gente a que lo sea, a que ocupe su poder de hablar, su poder de denunciar y pedir lo que quiere, para cambiar la realidad de todos los animales y también del país”, finaliza.
MÓNICA PINEDA, GEPDA
Recientemente, la organización Gente por la Defensa Animal fue conocida por lograr, en conjunto con abogados animalistas independientes, que un perro fuera amparado por primera vez en la historia del país. El perro Capitán ganó un amparo para evitar ser sacrificado por haber mordido a una niña en defensa propia. Es un hecho que sentó un precedente a nivel jurisprudencia.
Mónica estudió Ciencias de la Comunicación en la Universidad Intercontinental (UIC) y también se formó como Traductora Intérprete; cuenta con un diplomado en el Colegio de Bioética (ética animal) y además escribe poemas.
En el 2001 asumió la presidencia de la asociación Grupo Educación Pro Defensa Animal, y en el 2005 fundó junto con otros activistas la asociación civil Gente por la Defensa Animal (GEPDA), que preside.
“La mayoría tenemos que partirnos en dos para atender nuestro trabajo y por otro lado, la mitad del día, lo dedicamos a nuestro propio trabajo, y la otra mitad al activismo y a la demanda que requiere una asociación civil y eso complica muchísimo porque muchas veces terminas descuidando tu trabajo o la labor de la asociación”, asegura en entrevista la defensora de derechos de animales.
Ella coincide con los activistas previamente mencionados en que falta profesionalización del gremio, porque a veces se tienen que adaptar a esta circunstancia y se deben enfocar en “sacar el trabajo” como sea posible.
Sin embargo, reconoce que la labor hecha en beneficio de los animales en GEPDA, de ninguna manera sería posible sin el compromiso y extraordinario trabajo de cada uno de los voluntarios, con quienes siempre estará agradecida por su amor y respeto a los animales.
“La realidad del activista animalista en México es distinta a la del gremio de defensa animal en países como Estados Unidos y en Europa, como Inglaterra, Alemania y Suiza en donde las asociaciones sí están profesionalizadas. Su trabajo como activista lo pueden desarrollar de tiempo completo, desarrollándose sólo en el tema del maltrato animal”, ilustra la comunicóloga.
JIMENA MORENO, DENUNCIA MASKOTA
Todo empezó cuando Jimena encontró a un perro de raza pastor belga en una tienda Maskota ubicada en la sucursal de Prado Norte en la colonia Polanco del Distrito Federal. El can tenía ocho meses y estaba dentro de una vitrina “diminuta”. Cuando preguntó por el precio, el pastor tenía el 80 por ciento de descuento lo que implicaban unos 6 mil pesos. Jimena al verlo pidió que lo dieran en adopción para rehabilitarlo, porque necesitaba ayuda psicológica por estar tanto tiempo encerrado.
Pero le dieron largas, llamó a Atención a clientes y luego le dijeron que lo habían vendido, sin embargo ella tenía fotos.
“Entonces dije: ‘voy a hacer una pagina’ y así nada más, un día hice la página, subí la foto y, entre suerte o el momento justo, hubo likes y más fotos que tomaba la gente de las tiendas. Así todo se empezó canalizar a través de la página”, recuerda Jimena.
Moreno asegura que el maltrato animal es un reflejo de nuestra sociedad, dada la impunidad que predomina en el mundo del activismo animal, pero también en todo el país. También señala que en el gremio hay mucho “protagonismo”, gente que encontró en la protección animal una forma de vida, por la cual reciben dinero de otras dependencias.
“Hay gente que es mascotera o perrera que sólo rescata y que no les importan los cerdos y comen carne. Eso causa fricción, pero sí se puede llegar a la unión cuando se trata de algo grande como la prohibición de la venta de los animales o luchar por la abolición de las corridas de toros o de los circos con animales. Sí podemos llegar a unirnos cada quién con su manera de trabajar y de hacer todo”, explica la activista.
Sobre el ciberactivismo, ella afirma que ha funcionado por ser una manera más fácil de llegar a cientos de personas a través de un teléfono celular. Acciones que aceleran los cambios, como las mujeres de Aguascalientes que compartieron un video en Facebook de cómo quemaban a un gato y las autoridades actuaron por la indignación de los cibernautas.
“Porque seguramente si un vecino las hubiera visto y subido su denuncia y pasarse cinco horas ahí pues no hubieran hecho nada. Pero la presión a través de las redes funciona”, afirma Jimena.
DULCE RAMÍREZ ISLAS , IGUALDAD ANIMAL
Ella es licenciada en Filosofía y Letras, diseñadora gráfica y editora independiente, además de fungir como la coordinadora de Igualdad Animal México (IA).
Igualdad Animal es una organización internacional con base en España que se dedica a revelar la explotación animal a través de investigaciones que realizan en distintos puntos y de distintos temas de maltrato.
Es por ello que Dulce, que radica en Guadalajara, destaca estas labores de campo para que las personas se den cuenta de las injusticias que padecen los animales.
«Es necesario, que existan personas que defiendan a los animales, las acciones que se hagan en favor de ellos serán determinantes para lograr cambios profundos en la sociedad que todavía los ve como recursos. El movimiento de derechos animales es uno solo y busca su reconocimiento como seres sintientes, con intereses que deben ser respetados, busca mostrar la terrible realidad que padecen en rastros, granjas, zoos, laboratorios, circos, etc., una realidad que debe terminar. Es importante informar, organizarse, fijarse objetivos y estrategias para ayudarlos de la mejor manera posible”, dice a SinEmbargo.
Dulce cita un fragmento de un discurso que dio IA el Día Internacional de los Derechos Animales en 2014 sobre la agenda de la organización en México: «El movimiento social que defiende a los animales se basa en los mismos valores inalienables de todos los movimientos sociales: justicia e igualdad”.
La activista afirma que la gente puede empezar a hacer acciones pequeñas para hacer la diferencia, como denunciar una injusticia y ayudar a quien lo necesita, acciones que «nunca podrán ser pequeñas».
“Siempre animamos a las personas a que actúen en favor de los animales, les proporcionamos la información y orientamos sobre las dudas que surjan al respecto. La mayoría de las personas nos oponemos a la violencia, sabemos que no es correcto causarle sufrimiento a alguien y es así como muchas personas que ayudan perros y gatos en situación de abandono, logran darse cuenta que no hay diferencia entre ellos y otros animales”, concluye la defensora.
SANDRA SEGOVIA, TODOS SOMOS ANIMALES
Sandra es la vocera de Todos Somos Animales, un grupo de ciudadanos que buscan difundir, vincular y re-educar a los humanos para concientizarlos acerca de que todos los animales tienen derechos. Actualmente la asociación trabaja en la modificación de leyes y reformas, algunas de carácter federal, para generar un “cambio masivo que beneficie a más animales”.
La activista considera que la defensa de los derechos de los animales tiene repercusiones, no sólo para los animales, sino también para la sociedad en general y que hace a todos más conscientes de contar un carácter preventivo.
“No es un tema que sólo tenga que ver con los animales, sino también es una cuestión social mucho muy importante. Desde luego, es interesante considerar que los grupos deben ser más organizados y trabajar en conjunto”, afirma Sandra Segovia.
La directora de Todos Somos Animales concuerda en que falta mucha profesionalización del activismo, pero por lo pronto está creciendo y es un movimiento bien intencionado.
“Muchas personas piensan que ser activista es ponerse una playera y salir a una marcha, pero el activismo requiere de leer, de informarse, estudiar, de preparase, porque si fuera un sindicato, podríamos pedir la opinión a nuestros representados, pero en el caso de los animales, pues no se puede», dice Sandra entre risas.
Finalmente la activista invita a la gente a contactar al grupo que más confianza le tengan y a sumar esfuerzos en la medida que puedan, ir a voluntariados y correr la voz con mensajes como que los animales no son para comer, vestir o divertirse.
PAULINA BERMÚDEZ LANDA/ PROYECTO GRAN SIMIO
El Proyecto Gran Simio (The Great Ape Project) es una asociación que tiene por objetivo la protección de los grandes simios (chimpancés, gorilas, bonobos y orangutanes) y los lugares donde habitan. Se trata de una organización que en México busca que los orangutanes machos (Toto y Jambi) del Zoológico de Chapultepec en la Ciudad de México sean trasladados a un santuario en Brasil donde obtendrían mejores tratos.
Los nombres Toto y Jambi cobraron popularidad en las redes sociales gracias al trabajo de esta organización, de la cual Paulina es miembro. Para lo cual tuvo que trabajar anteriormente en el Zoológico de Chapultepec donde cayó en cuenta de las labores que debía hacer como defensora de los derechos de los animales.
“Yo creo que a donde nos vamos a dirigir en algún punto los activistas, va a ser para cambiar el status legal de los animales, a personas no humanas, tal vez, como lo hizo India con los delfines o Francia con el conocimiento de que son seres dotados con sensibilidad. Ya que ahorita el status que tienen es de simples objetos que pueden ser apropiados”, señala Paulina, quien de profesión es Licenciada en Desarrollo y Gestión Intercultural.
La activista reconoce que hay una diversificación en la lucha e incluso la integración de personas que a lo mejor no llevan un activismo dentro de una organización, pero sí llevan cambios en el día a día como es simplemente no comerlos.
“La lucha de los animales es un nicho importante para pedir ciertas condiciones de igualdad y justicia que a lo mejor otro tipo de luchas no las piden en la manera en que nosotras lo hacemos”, explica la activista, sobre los estereotipos de activistas.
Incluso, el ex baterista de la banda Caifanes, Alfonso André, llamó a través de su cuenta oficial de Twitter a seguir a la organización no gubernamental: “Les invito a seguir a Proyecto Gran Simio México, una organización que está tratando de sacar a los dos orangutanes de Chapultepec para llevarlos a un santuario en Brasil”, tuiteó.
NITIN SUSANA SERRATO/ NITIN NEZA
Nitin Neza empezó como un proyecto en 2009 con el objetivo del rescate, protección y albergue de animales. Hasta la fecha han rescatado a más de 700 animales, principalmente perros y gatos, pero también aves y caballos de tracción.
«Empezamos campañas de esterilización en nuestro domicilio, apoyadas por una fundación. De ahí empezamos a ayudar a más gente y cuando se enteran que hay alguien que ayuda a los animales, nos llenamos de casos de animalitos. En ese intermedio conocieron a un señor que estaba enfermo y ciego y que tenía 15 perritos, los sumé a los que ya tenía rescatados en total tuve 25, lo demás no sé cómo pasó», evoca Susana o Nitin, como mejor la conocen.
A pesar de que han pasado seis años desde su creación y establecimiento en el Estado de México, Susana confiesa que en cuestión de recursos no hay apoyos de otros lados, pues son independientes y se mantienen con ventas, acopios, servicios, colectas, rifas y amigos que apoyan en gastos de animales enfermos. «Pero la carencia sigue siendo la misma un poco maximizada junto con el número de animales que sigue creciendo», afirma.
«Tengo una teoría de que si lo ves, te toca: que ibas pasando y viste su atropello, o una situación que te toca responsabilizarte del animal», propone la activista en entrevista.
También buscan hacer hincapié en la importancia de las campañas de esterilización para evitar que la población canina crezca desmedidamente y sobre todo en que se logre llevar a cabo una ley contra el maltrato animal que aplique en el Estado de México.
LEONORA ESQUIVEL/ ANIMANATURALIS
Ella nació en México, cuenta con un doctorado en Filosofía por parte de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y es la cofundadora de la organización AnimaNaturalis Internacional.
Se encuentra en la promoción de su libro Abriendo Jaulas, que narra el surgimiento de AnimaNaturalis y los valores que fomenta el movimiento de los derechos de los animales.
«Un texto para inspirar al cambio del mundo que compartimos, y hacerlo un lugar más justo para todos», explica la descripción, además que pide una donación mínima por 100 pesos en ayuda a animales.
Es ganadora del Premio a la Sustentabilidad 2011 en la categoría Mejor Activista y también trabajó en la Delegación Miguel Hidalgo, Distrito Federal, en el área de medio ambiente y desarrolló un proyecto sobre respeto a los animales para escuelas primarias y preescolar.
AnimaNaturalis es una organización no gubernamental y sin fines de lucro, que trabaja para la defensa de los animales en España y Latinoamérica. Se centra en evitar el sufrimiento de los animales en las principales áreas donde son utilizados, como en la industria de la alimentación, en laboratorios, como vestimenta y en espectáculos.
APASDEM
Asociaciones Protectoras de Animales de México (Apasdem) Es una organización que nació en 2006, en la década en la que los movimientos en defensa de los derechos animales se formaran y comenzaban a establecerse formalmente. A la fecha, está conformada por 99 grupos protectores de todo el país y tienen como objetivos conjuntar esfuerzos para lograr en todo el país acuerdos con las autoridades y miembros de la sociedad para poner fin a la crueldad contra los animales no-humanos.
«Una de las premisas de APASDEM es trabajar por una cultura de respeto, protección y buen trato a los animales, así como erradicar la violencia que se ejerce en contra de ellos, abriendo frentes de lucha desde la educación, el impulso reiterado de la aplicación de leyes de protección animal y el fomento de una cultura de respeto y trato humanitario hacia ellos a nivel nacional», explican en una declaración de su página oficial.
Entre sus actividades se encuentran conciertos musicales organizados para recaudar alimento de animales de compañía, que sirvan a los refugios y hogares temporales, pero también la difusión de noticias sobre maltrato animal.
De hecho ellos denunciaron en 2014 que el mercado de animales «más cruel del mundo» está en Almoloya, Edomex: el Mercado de San Bernabé, y exigieron medidas a las autoridades correspondientes.
Por otro lado, son partidarios ávidos de las redes sociales y el ciberactivismo al argumentar que las páginas y correos electrónicos ayudan a resolver casos de perros perdidos y obligan a pagar multas a compañías abusivas de animales, han dado a conocer estos casos de maltrato que de otro modo nunca se hubieran conocido y reunido dinero para apoyar.
«Entendemos que a veces te sientas agobiado por tantos correos y mensajes pidiendo ayuda, pero todo lo que tienes que hacer es mover un par de dedos para poner tu granito de arena ayudando a que un animal deje de sufrir ¿es eso mucho pedir?», finaliza su declaración.