Ciudad de México, 15 de mayo (SinEmbargo).– Las agresiones ocurridas la madrugada del pasado 7 de mayo en la colonia San Mateo Tlalnenango, en Cuajimalpa, y de las que perredistas y priistas se acusan mutuamente, significaron el punto más álgido, hasta ahora, de la batalla que ambos partidos mantienen en esa Delegación y que data desde antes de que comenzaran las campañas electorales.
Aunque el Partido de la Revolución Democrática (PRD) ya había acusado agresiones contra sus brigadistas, así como al Diputado federal y candidato a jefe delegacional Luis Espinosa Cházaro, supuestamente por personas al servicio del Gobierno delegacional o de plano vinculadas con el actual Delegado con licencia, Adrián Rubalcava Suárez –quien ahora busca ser Diputado local por el Partido Revolucionario Institucional (PRI)–, lo ocurrido la semana pasada significó un de los momentos más violentos del enfrentamiento que esas fuerzas políticas mantienen.
Incluso el llamado a la civilidad entre los partidos políticos hecho por el Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF) pareció tambalearse, aunque finalmente ambas fuerzas políticas estuvieron presentes en la suscripción del acuerdo.
El lunes de esta semana, sin embargo, el caso volvió a atizarse con la denuncia de hechos interpuesta por los líderes nacional y local del PRD ante la Procuraduría General de la República (PGR) contra Rubalcava Suárez y contra quien resulte responsable por las agresiones de esa madrugada. La denuncia es por los delitos de portación de arma de fuego, disparo de arma de fuego, tentativa de homicidio y lo que resulte.
El día que interpusieron la denuncia, el líder perredista capitalino, Raúl Flores García, reiteró el señalamiento que ha hecho desde las primeras agresiones que han sufrido integrantes de su partido: que los responsables son integrantes de la banda delincuencial «Los Claudios», la cual ha sido vinculada con Rubalcava Suárez. El PRI, por su parte, ha insistido en que la agresión del pasado 7 de mayo provino de los perredistas.
Las mutuas descalificaciones entre los partidos y sus candidatos ocurren mientras las campañas electorales siguen su curso, de cara a la elección del domingo 7 de junio. Es decir, mientras el resto de los candidatos en la contienda continúan haciendo su trabajo de proselitismo para tratar de conseguir votos en la demarcación.
¿Quiénes son esos otros candidatos que también están buscando la jefatura delegacional en una demarcación que, a diferencia de la mayoría, no ha sido gobernada por un solo partido político?
PAN: RECUPERAR LO PERDIDO
Desde que los jefes delegacionales son elegidos democráticamente, el Partido Acción Nacional (PAN) ha ganado dos veces la delegación Cuajimalpa (una de ellas en conjunto con el Partido Verde Ecologista de México, hoy aliado del PRI). No han sido gestiones sucesivas, pero el actual candidato panista parece querer recuperar la continuidad de la gestión que dejó en 2012 Carlos Orvañanos Rea.
Y es que se trata del mismo candidato que fue postulado hace tres años: Camilo Campos López, quien era director general Jurídico y de Gobierno en la administración de Orvañanos Rea.
Hace tres años, la designación de Campos López como candidato a jefe delegacional causó polémica al interior del PAN debido a que sobre él pesaban señalamientos de acarreo, compra de votos, rebase de tope de gastos de campaña y el apoyo del entonces delegado, para quien trabajaba. También fue acusado de supuestamente usar el programa social federal Oportunidades para promover el voto a su favor.
Los otros precandidatos panistas –Kenia López Rabadán, Manuel Garrido y José Rendón– presentaron una denuncia contra Campos López ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) de la PGR y pidieron que se le quitara el registro.
Pero con todo y la denuncia, presentada unos 10 días antes de la elección interna, Campos López ganó la candidatura de su partido. Sin embargo, debido a la denuncia que había contra él, la Comisión Nacional de Elecciones de su partido determinó quitarle la candidatura. En su lugar, la dirigencia panista designó como candidata a López Rabadán.
Campos López se inconformó ante el Tribunal Electoral del Distrito Federal, instancia que determinó que las pruebas en su contra no eran suficientes para acreditar la acusación. Se habló entonces de que a Campos López le habría servido su amistad con el magistrado Alejandro Delint para que el Tribunal fallara a su favor, ordenara invalidar la candidatura de López Rabadán y que se le repusiera a él.
Campos López consiguió la candidatura entonces, pero un mes antes de las elecciones apareció un video titulado “Alianza del mal en Cuajimalpa”, en el que el entonces candidato priista Rubalcava Suárez hablaba de una alianza entre su equipo y el de Campos López durante una reunión vecinal. Previamente a la aparición de ese video, también se habló de que supuestamente Campos López buscaba aliarse con René Bejarano, líder de la corriente perredista Izquierda Democrática Nacional (IDN), para llevar al entonces candidato del PRD, Luis Rosenso Gutiérrez, a la jefatura delegacional.
Campos López es originario de la colonia San José de los Cedros, en Cuajimalpa, es licenciado en Derecho y pasante de maestría en Administración Pública por en Instituto Nacional de Administración Pública.
Antes de afiliarse al PAN fue miembro del Partido Verde Ecologista de México, al amparo del cual se convirtió en Diputado local en el periodo 200-2003 y luego en Diputado suplente de Jaqueline Argüelles Guzmán, de 2003 a 2006.
En esos años se desempeñó también como secretario de Acción Electoral en la Cámara de Diputados.
Durante el proceso electoral de 2009 para jefaturas delegacionales fue el coordinador de campaña del candidato Carlos Orvañanos Rea. Una vez que el panista llegó a la jefatura delegacional, Campos López se convirtió en su director general jurídico y de gobierno durante el trienio que concluyó en 2012, cuando se postuló a jefe delegacional por primera vez.
Tres años después, ya sin el cobijo que le dio entonces la administración panista en Cuajimalpa, Campos López busca nuevamente convertirse en delegado.
MORENA Y LA PRIMERA DELEGADA
Si la apuesta del PAN es repetir al candidato que postuló en la anterior elección, la de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) es llevar como su candidata a quien en 1997 se convirtió en la primera Delegada de Cuajimalpa: Jenny Saltiel Cohen.
Se trata de una ex funcionaria del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, a quien es cercana. De hecho, antes de ser postulada como candidata a jefa delegacional, Saltiel Cohen era promotora de Morena en Cuajimalpa.
Fue guía Montessori durante 10 años y posteriormente, a los 33 años, cursó la licenciatura en Ciencia Política y Administración Pública en la Universidad Nacional Autónoma de México. Durante la gestión de López Obrador fue primero Secretaria de Transportes y Vialidad (dependencia hoy convertida en Secretaría de Movilidad) y posteriormente Secretaria de Desarrollo Económico.
También ha trabajado en la iniciativa privada como coordinadora de Relaciones Institucionales de Grupo Xtra, de 2007 a 2014. Además mantiene un contrato de prestación de servicios con SP Mercadotecnia desde junio de 2014, que concluirá en junio próximo, de acuerdo con la declaración de intereses que hizo pública en la plataforma Candidato Transparente.
En febrero de 2006, su hermano Alberto Saltiel Cohen fue detenido por la Agencia Antidrogas (DEA, por su sigla en inglés) por supuestamente ser uno de los principales fabricantes de esteroides del mundo, los cuales distribuía en Estados Unidos. Para entonces ella se desempeñaba como secretaria de Desarrollo Económico con López Obrador.
En diciembre pasado, antes de convertirse en candidata de Morena a la jefatura delegacional, Saltiel Cohen defendió públicamente a su ex jefe López Obrador cuando a éste se le acusó de tener una millonaria casa en Bosques de las Lomas, en el Desarrollo Residencial La Toscana, en la Delegación Cuajimalpa, la misma que tiempo atrás ella había gobernado. El 2 de diciembre de 2014, Saltiel Cohen leyó ante vecinos de la colonia Cooperativa Palo Alto una carta del desarrollador de ese conjunto residencial, Pascual Ortiz Rubio, en la que éste afirmaba que López Obrador no tenía ni había tenido nunca una propiedad en La Toscana.
De acuerdo con una nota de ese día del diario La Jornada, Saltiel Cohen dijo en el acto que Ortiz Rubio era amigo suyo y él le había facilitado la carta.
Quince años después de haber gobernado Cuajimalpa, Saltiel Cohen quiere regresar, aunque ahora de la mano de un partido político que por primera vez participará en elecciones.
LOS OTROS CONTENDIENTES
En la disputa por la delegación también están los candidatos de Movimiento Ciudadano (MC), María Xochiquetzal Garibay Tovar; del Partido Nueva Alianza (Panal), Julia Bonetti Mateos, y un candidato independiente, Alejandro Vinay Melgar.
Garibay Tovar es activista en la Delegación Cuajimapa, consultora de Marketing Integral y profesora de Mercadotecnia en la Universidad Iberoamericana.
Bonetti Mateos es licenciada en Derecho por la UNAM, con experiencia de 15 años en el sector privado. Es titular del despacho Gunter&Bonetti Abogados, especializado en obra pública.
Mientras que Vinay Melgar es licenciado en Comunicación por la Universidad Anáhuac y con experiencia en la iniciativa privada.
