Ciudad de México, 11 de mayo (SinEmbargo).- Vecinos de las colonias Ajusco y Santa Úrsula, de la Delegación Coyoacán, denunciaron el «avance sigiloso» del proyecto Ciudad del Futuro, una de las cinco Zonas de Desarrollo Económico y Social (Zodes) que promueve el Gobierno capitalino a través de la Agencia de Promoción, Inversión y Desarrollo para la Ciudad de México (PROCDMX).
PROCDMX es una empresa de participación estatal mayoritaria creada durante la gestión de Marcelo Ebrard Casaubón para diseñar y realizar proyectos de desarrollo urbano.
Entre sus proyectos están las llamadas Zodes, definidas por las autoridades como áreas a las que por su ubicación, usos de suelo, equipamientos y otros activos intangibles se puede potenciar para generar inversión e infraestructura, mediante “asociaciones estratégicas”.
Una de las cinco Zodes que el gobierno capitalino promueve es la llamada Ciudad del Futuro, cuya área de actuación abarcaría 528 hectáreas, que incluiría las 15.2 hectáreas de la Planta de Asfalto y siete colonias aledañas, de acuerdo con el Documento Ejecutivo de Difusión del proyecto. Las colonias son: Santa Úrsula Coapa, Ajusco, Ajusco, Huayamilpas, Deportivo Huayamilpas, Adolfo Ruiz Cortines y La Zorra Ex Ejido de Santa Úrsula Coapa.
La Ciudad del Futuro contempla, entre tras cosas, convertir la planta de asfalto en un desarrollo urbano con usos habitacionales, comercial y de servicios; reutilizar 44.13 hectáreas de suelo; modificar las condiciones del espacio público, e intervenir los centros de transferencia multimodal Universidad y Paradero Huipulco.
Para ello plantea modificar los usos de suelo de la zona, que actualmente concentra más del 60 por ciento en uso de suelo habitacional. La intención es modificarlo por usos de suelo habitacional mixto, habitacional comercial, equipamiento, espacios abiertos y áreas verdes.
A los vecinos les inquieta las consecuencias que traerán esos cambios en los usos de suelo, ya que al modificarse se permitirán construcciones de edificios más altos o con vocación comercial o mixta en áreas que hasta ahora son consideradas habitacionales. De acuerdo con un plano incluido en el documento ejecutivo del proyecto, la mayoría del área tendría un uso de suelo habitacional mixto, con densidades de construcción que irían de los 6 a los 40 niveles.
La multiplicación de obras que conllevaría a una redensificación de la zona podría acarrear, además, un problema de escasez de servicios. Los que más les preocupan a los vecinos son el abasto de agua –de por sí insuficiente en las colonias, dicen– y la recolección de basura, también deficiente.
No es esa su única preocupación. Los vecinos también advierten del riesgo de ser desplazados al estarse promoviendo una redensificación de la zona, sobre todo si se considera que el proyecto de Ciudad del Futuro planea la inversión tanto pública como privada.
AVANCE SIGILOSO
El primer antecedente de la Ciudad del Futuro fue la donación de la Planta de Asfalto, ubicada en avenida del Imán 263, en la colonia Ajusco. El 8 de agosto de 2013, Calidad de Vida, Progreso y Desarrollo para la Ciudad de México (como se constituyó originalmente la actual PROCDMX) la desincorporó para posteriormente enajenarla, a título gratuito, para destinarla al proyecto de Zodes Ciudad del Futuro.
Sin embargo, el proyecto contempla mucho más que sólo la Planta de Asfalto, pues abarcaría más de 500 hectáreas.
Hasta ahora la información disponible sobre el proyecto de Ciudad del Futuro es escasa. En su portal electrónico sólo figuran dos respuestas que dio a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal tras un punto de acuerdo promovido por algunos legisladores.
Según las contestaciones que el director general de PROCDMX, Simón Levy Dabbah, ha dado a los cuestionamientos de la Asamblea, hasta noviembre del año pasado la creación de una Zodes seguía siendo evaluada.
No obstante, los vecinos de las colonias Ajusco y Santa Úrsula hablan de veladas acciones que se están realizando y que estarían relacionadas con el proyecto Ciudad del Futuro.
Una de ellas es la adquisición de predios. De acuerdo con Francisco Yoshihein Loredo Flores, vecino de la Colonia Ajusco, hay personas que están acudiendo a ver predios abandonados, con irregularidades o que quedaron intestados.
Otro hecho que consideran relacionado con empujar el proyecto de la Ciudad del Futuro es el cierre de los parques Huayamilpas, Zapata y Durango. Los tres espacios, relatan los vecinos, fueron cerrados a principios de año supuestamente para trabajos de remodelación. Sin embargo, dicen, hasta ahora no se han visto avances en esas remodelaciones y quienes han podido entrar a los parques les han hablado de que por dentro están en obra negra.
En el caso del parque Huayamilpas, cuya extensión es de más de 16 hectáreas, el documento ejecutivo del proyecto lo señala con potencial de convertirse en un parque urbano y podría representar un polo de atracción para nuevos desarrollos inmobiliarios. Para ello se propone cambiar su uso de suelo de ser un espacio abierto a uno de equipamiento con construcción de hasta tres niveles.
Los vecinos lamentaron que los proyectos de modificación de ese tipo de espacios no se estén haciendo en función de las necesidades y usos actuales que le dan la gente que vive en la zona.
Ejemplo de ello es el señor Genaro Jiménez, quien tenía un equipo de cachibol en el Parque Durango, pero los 25 jugadores del equipo fueron sacados de ese espacio con el argumento de que se construiría una alberca. Jiménez critica que se pretenda hacer ese tipo de equipamientos en una zona donde escasea el agua, en lugar de permitirle al grupo de ancianos que usara el espacio.
La señora Concepción Gutiérrez añadió otro problema que, dice, están viviendo en la colonia Santa Úrsula y que también estaría relacionado con el proyecto Ciudad del Futuro: el aumento en los costos del impuesto predial. Refirió que en su caso, de los 2 mil pesos que habitualmente pagaba al año, en 2014 le llegó una cuenta por 12 mil pesos, pese a que no había hecho ninguna construcción a su casa. Este año, el monto fue de 16 mil pesos.
Los vecinos ven estos aumentos desproporcionados como una forma de presionarlos para que paulatinamente se vayan de la zona.
Otro mecanismo a través del cual los estarían presionando, y que al mismo tiempo demostraría que hay una intención de renovar la zona, es el cambio de autobuses y el aumento del pasaje en una de las rutas que abarca las colonias implicadas en el proyecto, a decir de Loredo.
Desde hace varios meses algunos vecinos se enteraron de los planes que hay para modificar la zona donde viven, pero se quejan de que no fueron ni han sido tomados en cuenta por las autoridades sobre los cambios.
Tampoco, dijeron, han sido atendidos por las distintas autoridades del Gobierno capitalino a las que se han acercado: la Jefatura de Gobierno, la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda, la Procuraduría Ambiental y de Ordenamiento Territorial, el Instituto de Vivienda del Distrito Federal y la delegación Coyoacán, cuyo ex titular, Mauricio Toledo Gutiérrez, busca ahora ser Diputado local.