Ciudad de México, 6 de mayo (SinEmbargo) .- A tan solo un par de meses de que la tricologista británica Carol Walker iniciara la polémica alrededor de la suciedad presente en el rostro de los hombres con barba, un nuevo experimento realizado por una cadena televisiva de Albuquerque, Nuevo Mexico, llevó el caso a los extremos al concluir que todos los sujetos revisados, llevaban partículas de heces fecales.
«Tu barba, tan sucia como un escusado», titularon algunos, «¿Qué tan asquerosa es tu barba? Un análisis de costo-beneficio de la hombría y la microbiología», fue como difundió la noticia el periódico estadounidense The Atlantic, y varios más lo replicaron.
El medio inicial fue Action 7 News, que por medio de un experimento realizado en condiciones no controladas ni con métodos científicos, colectó con un cotonete muestras de las barbas de algunos hombres que andaban por las calles de Albuquerque, y luego las llevó a un laboratorio, en donde un único microbiólogo, John Golobic, las analizó.
El científico mencionó que en las muestras había presencia de «entéricos», es decir, las bacterias que normalmente viven en los intestinos. «Son el tipo de cosas que puedes encontrar en las heces», dijo. En el mismo ejercicio, aseguraron encontrar estos microorganismos en teléfonos celulares y cepillos de dientes.
A partir de esa declaración, sitios de noticias como el Metro de Reino Unido comenzaron a difundir la noticia con el titular «Algunas barbas están tan llenas de popó que están tan sucias como un retrete», sin embargo, otros como The guardian salieron a la defensa de los lumbersexuales.
«No hubo un estudio apropiado, tampoco un equipo de microbiólogos ni popó en las barbas», escribió Nick Evershed en el sitio del diario inglés, quien aclaró también que aunque las heces humanas estás parcialmente compuestas de la flora intestinal, no es correcto describir estas bacterias como materia fecal en sí.
Por su parte, en el Washington Post, escribieron: «Decir que algo es asqueroso porque está cubierto con bacterias en un poco ridículo, porque todo lo que existe en el mundo físico definitivamente estará cubierto de bacterias [] Pero a menos que la pongas intencionalmente, es casi seguro que no tienes popó en la cara. No importa qué tan espesa esté tu barba».
Un estudio publicado en 1996 ya explicaba que la piel humana aloja una gran diversidad de microbios, como la E. coli, que se encuentra también en el intestino, sin causar mayor daño.
El debate de las barbas
En marzo pasado la experta que estudia el pelo) Carol Walker, del Centro de Tricología de Birmingham, en Reino Unido, puso el tema sobre la mesa al declarar al diario The Daily Mail que las personas con vello facial están más propensas a las infecciones de la piel y a transmitirlas a otros.
Sin embargo, investigaciones anteriores ya habían concluido que la barba puede alojar más gérmenes que un rostro afeitado. El microbiólogo Ron Cutler de la Universidad Queen Mary de Londres, dice que por ello es importante que los hombres que las portan la laven, recorten y peinen con regularidad, además de asegurarse que no haya áreas enrojecidas por los vellos encarnados.
Por otro lado, el profesor de la Universidad Aston y también microbiólogo, Anthony Hilton llevó a cabo un estudio que determinó que los médicos con barba desprenden más gérmenes que aquellos sin vello o las mujeres, aún cuando portan máscaras quirúrgicas.
Aunque se comprobó que hay más gérmenes en un rostro barbudo, expertos dicen que no implica un daño a la salud.
“No es raro encontrar 20 mil bacterias en la piel, y esto no es perjudicial”, dijo al rotativo. Por su parte, también citan a Hugh Pennington, profesor emérito de bacteriología de la Universidad de Aberdeen, quien declara: “son las mismas bacterias que hay en la piel. No es problemático y no es un riesgo para la salud”.
Por su parte, Carol Walker explica que las personas tienden a tener el hábito de tocarse la barba varias veces al día, muchas de ellas con las manos sucias, lo cual puede transferir esta suciedad a la cara y boca.