Ciudad de México, 6 de febrero (SinEmbargo).– Marcelo Ebrard Casaubón, ex Jefe de Gobierno del Distrito Federal, dijo hoy que las mismas razones que lo llevaron a él a recibir la Línea 12 del Metro como terminada, son las mismas que tuvo el actual gobierno para recibir la obra sin cuestionarla apenas unos meses después.
“Menos política y más responsabilidad respecto a esto”, dijo.
Ebrard respondió esta tarde a las acusaciones de la Comisión Especial para el Seguimiento al Ejercicio de los Recursos Federales que se Destinen o se Haya Destinado a la Línea 12, compuesta en su mayoría por miembros del Partido Revolucionario Institucional (PRI). La Comisión emitió un informe, elaborado por priistas con información del gobierno de Miguel Ángel Mancera, en el que inculpa al ex funcionario. A Ebrard no se le concedió derecho de audiencia en dos ocasiones, por lo que pidió a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) medidas cautelares contra lo que él llama un “linchamiento político del PRI ordenado por Los Pinos”, es decir, por el Presidente Enrique Peña Nieto.
En su primera comparecencia en la Cámara de Diputados, Ebrard dijo que los legisladores del PRI fueron parciales y utilizaron sólo cierta información.
“Se atribuyen los problemas a la corrupción e irregularidades. Ahí sí, la verdad, la intencionalidad no podía ser más clara: es política”, dijo. “No se relacionan las supuestas irregularidades con las fallas; se infieren, se dice que hay versiones periodísticas. Pero no sabía que este informe que señala a su presunto servidor como presunto responsable no tomó en cuenta a la Auditoría Superior de la Federación ASF), que realizó auditorías como a ninguna otra obra pública con inversión federal”.
“Están todos los oficios de la Auditoría, todos, salvo dos que están en trámite y no se mencionan en su informe. Todas las [supuestas inconsistencias] están resueltas. No hay motivo y no me parece justo que señalen la corrupción cuando la ASF dice lo contrario”, señaló.
“La construcción de la obra tuvo la certificación de un consorcio y tuvo una certificación para poder operar que no se ha cuestionado en el GDF y ni por ninguna otra instancia. Si la obra está mal hecha, ¿por qué no se ha hecho ningún procesos contra la certificación? Los de la certificación, hoy, están trabajando en el Gobierno del Distrito Federal”, agregó.
En su intervención, el Senador Mario Delgado defendió que la Secretaría de Finanzas del Distrito Federal, dependencia a su cargo durante la gestión de Ebrard Causabón, sólo se encargó de definir la viabilidad financiera y presupuestal del proyecto, más no de establecer el método de financiamiento. Eso, dijo, se definió a partir de una petición del Sistema de Transporte Colectivo Metro.
Subrayó que tanto el método de financiamiento, a través de un Proyecto de Prestación de Servicios (PPS) a largo plazo, como la previsión presupuestal del proyecto fueron aprobadas por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.
Asimismo enfatizó que las decisiones técnicas del proyecto no eran su competencia, por lo que rechazó que en el informe se le pretenda atribuir responsabilidad por ello.
Sobre el contrato con CAF, del que se ha señalado que estableció un pago a un tipo de cambio de más de 16 dólares, lo que habría generado un sobrecosto en el costo de la renta de los trenes, Delgado aseguró que el contrato se estableció en dólares, por lo que no se definió ningún tipo de cambio de referencia.
El ex funcionario terminó su intervención ante la comisión diciendo que “la Línea 12 no esta cerrada por una cuestión presupuestal ni financiera”.