Ciudad de México, 26 de octubre (SinEmbargo).– Michael Wacha tiene 22 años pero juega con la experiencia de una década en Grandes Ligas. En plena Serie Mundial, el pitcher novato de los Cardenales de San Luis, continuó con este asombroso paso en manos de jóvenes atrevidos que viven apasionadamente el beisbol.
La franquicia roja, ha puesto en el diamante, muchos nombres que por primera vez acceden a territorio sagrado en el otoño de la MLB. Apoyados por Carlos Beltrán y Yadier Molina, unos novatos han puesto calor a la disputa por la supremacía en el mejor beisbol del mundo. La serie entre Boston y San Luis, está empatada y hoy se juega el primero de tres compromisos seguidos.
Yadier Molina, se quitó la careta de Catcher tras el roletazo de David Ortiz que lo llevó a primera base. Con un gesto, le dijo a su manager Michael Matheny que dejará un turno más a Carlos Martínez. La llegada del cuadro fuerte de bateo de las Medias Rojas, propiciaba desde la lógica, un relevo desde el Bullpen. Sin embargo, el puertorriqueño líder de los Cards, confiaba en la mirada del novato dominicano que atento observaba al plato. Cuando sacó los tres outs, lo festejó con gran efusividad. El Rey de los Deportes, lleno de simbolismos, tuvo ese momento glorioso como prueba de que iba a ser muy complicado que San luis perdiera. Al final, ganaron 4-2.
Como ha sido una costumbre durante los Playoffs, un jonrón de David Ortíz puso el partido a favor de los dueños del Fenway Park. Boston volvió a agarrarse de su bate más poderoso, pero fue el talento y la enjundia de San Luis, lo que terminó por balancear el partido a su favor. El Big Papi conectó su cuadrangular 17 en postemporada y el quinto en la actual edición de Playoffs, sin tener fortuna al final en el marcador. Medias Rojas pierden la condición de local y ahora tendrán que ir al Busch Stadium con circunstancias muy distintas a las vividas en los dos primeros partidos.
Boston perdió una racha de nueve partidos ganados de manera consecutiva en Serie Mundial. En medio de la dolorosa derrota, tendrán que sacrificar a uno de sus bateadores más fuertes por estar ahora. La bola ahora es de territorio de Liga Nacional, y las Medias Rojas tendrán que poner a batear a su pitcher perdiendo a su designado. Mike Napoli y David Ortiz, tendrán que intercalar actuaciones en los próximos tres partidos. Perdiendo poder, los dirigidos por John Farrell, tendrán que sacar la casta en un lugar donde la presión es muy considerable para el visitante.
Con un Carlos Beltrán más recuperado, los Cards gozan de la estela lograda por la victoria conseguida como visitantes. Ahora, con sus jóvenes agrandados luego de la gran actuación, esperan no tener que regresar a Fenway Park y enfrentar a ese monstruo verde imponente. La serie ha estado marcada por errores de los dos equipos. Primero fueron los Cardenales, después los Medias Rojas don un doble error en una fatídica séptima entrada que terminó por definir el rumbo del cotejo. Jarrod Saltalamacchia y Craig Breslow, tuvieron un momento de confusión que terminó con un mal lanzamiento a tercera que devolvió la ventaja a los Cards.
Se dice que en cualquier serie al mejor de siete juegos, el tercer partido es clave tras un empate a uno. Hoy, el rumbo de la disputa entre los dos mejores equipos de Grandes Ligas, podría definirse cuando uno de los dos tome una ventaja que podría terminar siendo definitiva. Mermado Boston, tendrá que sacar las fuerzas que lo hicieron levemente favorito en las apuestas antes de iniciar la serie. Enfrente, San Luis quiere continuar su regularidad deportiva con una victoria significativa. Factor fundamental será el temple de los dos equipos que hasta ahora se han equivocado de igual manera en cada uno de los partidos. La necesidad de marcar diferencias, en un encuentro tan parejo, significaría encaminarse para conseguir el Clásico de Otoño.