Ciudad de México, 12 de mayo (SinEmbargo).– Los cárteles mexicanos de la droga tiene ya presencia en 1,200 ciudades de Estados Unidos, y hay lugares en donde ya se reporta la presencia de los siete mayores grupos criminales, alertaron los representantes norteamericanos Beto O’Rourke y Steve Pearce.
Los dos legisladores dieron una conferencia de prensa en El Paso, Texas. Ambos señalaron que estaban de acuerdo en que las soluciones al problema de las drogas deben basarse en el respeto mutuo entre México y Estados Unidos.
“La gente no dejará las drogas hasta que puedan lidiar con el vacío espiritual que lleva al consumo de drogas”, dijo Pearce.
Expresó que fue informado por fuentes de alto nivel en Washington, DC, que el gobierno mexicano había pedido a Estados Unidos ayuda dos veces. “Pero no consiguieron una respuesta en ambas ocasiones”, dijo Pearce.
El gobierno de los EE.UU. proporcionado casi 2 mil millones de dólares en equipo y capacitación a través de la Iniciativa Mérida, que comenzó durante la presidencia de George W. Bush y continuó durante la administración del Presidente Barack Obama.
O’Rourke dijo que cree que es necesario un mejor enfoque para hacer frente a la violencia relacionada con la droga en México. La guerra desatada por Felipe Calderón en diciembre de 2006 dejó al menos 10 mil homicidios en CIudad Juárez, pero no provocó ninguna alteración en la ciudad vecina, El Paso, Texas.
O’Rourke también dijo que cree que el gobierno federal der Estados Unidos debe permitir que los ciudadanos decidan si quieren despenalizar o legalizar la marihuana. El año pasado, los estados de Washington y Colorado votaron a favor de despenalizar el uso recreativo de la marihuana, y New Mexico, previamente, había aprobado el uso médico de la marihuana.
El Presidente Obama, durante su reciente viaje a México, dijo que se opone a la legalización de la marihuana.
El pasado 26 de abril, el ex Presidente mexicano Felipe Calderón afirmó que durante su gobierno él no le declaró la guerra a las drogas, sino que luchó “por aplicar la ley y enfrentar a los criminales con toda la fuerza del Estado”.
En un foro realizado en la Universidad de Harvard, Calderón expresó que la violencia comenzó a crecer en México en 2004, cuando expiró la prohibición de la venta de armas de asalto en Estados Unidos.
Apenas el 10 de mayo, mientras cientos de madres protestaban para demandar investigaciones confiables para miles de desaparecidos en la guerra de Calderón, el gobierno de Enrique Peña Nieto informó que en lo que va de la actual administración se han registrado cinco mil 296 homicidios dolosos, esto es 18 por ciento menos (mil 136) en relación a los últimos cinco meses de la pasada administración, cuando se contabilizaron seis mil 432.
En un comunicado conjunto de las secretarías de Gobernación (Segob), de la Defensa Nacional (Sedena), de Marina-Armada de México (Semar), del Sistema Nacional de Seguridad (SSN) y la Procuraduría General de la República (PGR), se informó que del 1 de al 30 de abril se registraron mil 47 homicidios dolosos relacionados a delitos federales.
De ellos, 991 son personas presuntamente responsables de hechos ilícitos vinculados a averiguación previa, 39 servidores públicos caídos en el cumplimiento de su deber y 17 personas presumiblemente ajenas a los hechos.
En el periodo en cuestión, fallecieron en el cumplimiento de su deber 218 elementos de seguridad, en tanto que el aseguramiento de cocaína registra un incremento de poco más de 43 por ciento con respecto al periodo equivalente del año anterior, al pasar de mil 310 a mil 871 kilogramos.
Las dependencias dieron a conocer que se tiene ubicados a seis delincuentes como objetivos de “alto valor” y 121 más integrantes de estructuras intermedias, de los cuales 52 han sido neutralizados, 47 detenidos y cinco abatidos.
En la zona noroeste del país han sido detenidos 18 y un abatido; en la noroeste 21 detenidos y un abatido; en la occidente cuatro detenidos; en la centro un detenido y un abatido, mientras que en la sureste, tres personas fueron detenidas y dos abatidas.
