Vincent Cassel, el malo más refinado del mundo, vuelve a las andadas en “Trance”, de Danny Boyle

19/04/2013 - 1:00 am
Foto Especial
Foto: Especial

Ciudad de México, 19 abr (Sin Embargo).- El próximo 3 de mayo llega a las salas mexicanas el esperado filme de Danny Boyle, Trance, un trabajo con el que célebre cineasta inglés pretende redefinir las estructuras del cine negro, cargándolo de una emotividad nueva, refrescando sus harto conocidos paradigmas.

“Cuando digo actualizar, también me refiero a hacerlo desde un punto de vista emocional. Cualquiera de estos personajes no tiene a nadie a quien recurrir, no hay sistemas, no hay una cadena de comando, y no hay parientes, o estructuras de apoyo. Están solos. Esta es la razón por la cual este tipo de filmes siempre están ligados al crimen, porque siempre tratan de personas que se valen por sí mismas, fuera de la ley”, dice el director de Slumdog Millionaire.

En Trance, Simon (James McAvoy), hace equipo con una banda criminal para robar una obra de arte valuada en millones de dólares, pero después de sufrir un fuerte golpe en la cabeza durante el atraco, se despierta para descubrir que no recuerda dónde escondió la pintura.

Cuando amenazas y torturas físicas fallan en un intento por hacer que diga la verdad, el líder de la pandilla (Vincent Cassel) contrata a una terapeuta de hipnosis (Rosario Dawson) para que se sumerja en los rincones más oscuros de la psique del ladrón olvidadizo.

Conforme se adentra más en su dañado subconsciente, los riesgos se vuelven mayores y los límites entre el deseo, la realidad y la sugestión hipnótica comienzan a desdibujarse y a desaparecer.

El filme que será distribuido por la Fox en nuestro país, tiene muchos ingredientes atractivos: desde el director hasta la estrella principal (James McAvoy), ese actor inconmensurable que nos hiciera vibrar al lado de Forest Whitaker en El último rey de Escocia, pasando por la imprescindible mujer hermosa en la piel y en los huesos de Rosario Dawson, la novia de Danny Boyle en la vida real, hasta el malo perverso en la estampa fascinante de Vincent Cassel.

UN AUTÉNTICO CABALLERO FRANCÉS

Suspiros y más que suspiros levanta el actor francés en la vida real. Es uno de esos “feos” luminosos que ejerce un profundo magnetismo entre quienes tienen el privilegio de estar cerca suyo.

Dulce, amable, cortés, el célebre esposo de la actriz italiana Mónica Bellucci e hijo a su vez del fallecido Jean-Pierre Cassel, una figura extraordinaria del cine galo contemporáneo, derrocha simpatía y se muestra siempre amable y abierto con la prensa.

 

Foto Especial
Foto: Especial

En nada se parece el actor de Black Swan y Promesas del Este a los personajes egomaníacos, malvados y perturbados que suele ofrecer en la pantalla grande, hecho que obedece, según él, “a la necesidad de exorcizar mis demonios en el cine, para poder ser una buena persona en la vida”.

Tiene un rostro peculiar, pero nadie podría decir que no es un hombre sumamente atractivo, a pesar de las canas que, a sus 45 años, ya pueblan su cabeza.

Casado con una de las mujeres más hermosas del mundo, Vincent suele decir que no fue él quien conquistó a su hermosa mujer, sino que fue la Bellucci la que hizo todo por ambos. La pareja está casada desde 1999 y ha procreado dos hijas, Deva y Leónie.

Considerado por los espectadores galos como el primer hijo de Francia, Cassel  es la estrella de algunos de los filmes más aclamados del país de los últimos 20 años, tales como La Haine, Mesrine e Irreversible.

“Lo que me gustó de la película es que comienza como algo normal. Pero ese tipo de película que para la página 25 se convierte en algo totalmente distinto. Innova el género. Realmente juega contigo”, comenta Cassel a propósito de Trance.

“No se ve de una manera clara quién es bueno o quién es malo. Al principio, podrás pensar una cosa y después se convierte en algo distinto y después, al final, vuelve a cambiar todo totalmente. Los personajes evolucionan. Caes en la trampa cuando juzgas a alguien. De repente, te percatas que quizás ibas un poco rápido y no es exactamente lo que pensaste que era”, agrega.

ES DIFÍCIL ENCONTRAR A UN ACTOR TAN BUENO COMO ÉL

“Es difícil encontrar en este planeta un actor tan bueno como él”, dice Danny Boyle.

“Hay que recordar que, aunque habla muy bien el inglés, el diálogo, obviamente, no está en su idioma, así que esa es una limitación que hasta cierto punto tenía. Pero verlo actuar va más allá de eso es una experiencia realmente fascinante. Es raro toparte con un actor así”, agrega con entusiasmo el cineasta de Trainspotting.

Foto Especial
Foto: Especial

Boyle recuerda un momento durante el rodaje cuando el equipo de producción había ocupado una escalera en un departamento de South Kensington, por la tarde.

“Por cierto, la gente que vivía en uno de los departamentos, casualmente, era una familia francesa ubicada en Londres. Tenían hijos pequeños que estaban en pijamas, sentados en las escaleras, viéndolo actuar. Recuerdo haber pensado que era un momento maravilloso, porque estaban viendo actuar a una de las leyendas del mundo actoral francés. En términos galos, estás hablando acerca del equivalente de Marlon Brando o Lawrence Olivier”, afirma.

“Si tienes un buen guión y un buen director, como actor tienes mucho menos que hacer”, relativiza Cassel.

“Cuando tu guión está bien escrito, tus diálogos son buenos y no tienes que reinventarlos, sólo aprendértelos, y cuando sabes que el director está a cargo —y ése es definitivamente el caso con Danny— rara vez lo tienes que cuestionar. Siempre está intentando cosas nuevas. Lo chistoso es que hace este tipo de cine moderno, pero, al mismo tiempo, proviene del mundo teatral, por lo que su relación con la actuación y los actores e incluso con el guión, en general,  es muy orgánica”, expresa.

“La otra cosa que noté con él es que su estilo de dirección siempre es muy visual y original, hasta incluso barroco. Pero nunca es sólo por el estilo. Siempre tiene un significado. El encuadre podrá ser distinto y moderno, pero siempre busca contar una historia”, concluye.

Mónica Maristain
Es editora, periodista y escritora. Nació en Argentina y desde el 2000 reside en México. Ha escrito para distintos medios nacionales e internacionales, entre ellos la revista Playboy, de la que fue editora en jefe para Latinoamérica. Actualmente es editora de Cultura y Espectáculos en SinEmbargo.mx. Tiene 12 libros publicados.
en Sinembargo al Aire

Opinión

más leídas

más leídas