Ciudad de México, 1 de feb (SinEmbargo).– La política internacional mexicana de los últimos años tiene momentos clásicos. Y frases que, a pesar de que marcan un momento bochornoso para la diplomacia de México, todavía provocan el asombro –en el mejor de los casos– y la risa.
Una de ellas es de Hugo Chávez, mandatario de Venezuela, dirigida al ahora ex Presidente Vicente Fox Quesada:
“No se meta conmigo, caballero, porque puede salir espinao”.
Pero la que hará historia, es la del proprio Fox Quesada para con el Presidente de Cuba, Fidel Castro. Inocente, Fox: la pronunció por teléfono; ni siquiera en privado. Permitió que el mil veces colmilludo hombre fuerte de la isla lo grabara:
“Comes y te vas”.
Las relaciones diplomáticas deterioradas y fracturadas fueron una constante en los 12 años de gobiernos panistas. Vicente Fox, famoso en parte por sus desafortunadas declaraciones, causó gran polémica a nivel internacional por su manera de expresarse de Castro o Chávez; y aunque Felipe Calderón intentó estabilizar la situación, lo hizo de manera débil, según los analistas.
El “comes y te vas”, el “que el Presidente se ocupe de México” o ese famoso apodo de “cachorro del imperialismo”, fueron algunas de las frases que desataron la furia de distintos mandatarios y que dejaron los lazos bilaterales dañados entre 2000 y 2006, periodo en el que, sin embargo, hubo un canciller que, para algunos, tenía un enorme potencial para dar una vuelta de tuerca a la política exterior del PRI, que entonces se antojaba anquilosada.
Pero el sexenio calderonista también tuvo lo suyo. Negó la extradición de Florence Cassez a su natal Francia cuando Nicolas Sarkozy se lo pidió; criticó a Cristina Fernández por haber expropiado Repsol YPF. “Independientemente de que Cassez fuera culpable o no, era moneda de cambio”, dice un observador. Así se ve en los círculos diplomáticos. Lo de la Presidenta de Argentina fue, simplemente, una enemistad gratuita a favor de un gobierno cuestionado por su mismo pueblo: el de Mariano Rajoy, de España.
Ahora, el equipo de Enrique Peña Nieto han emprendido acciones que, de entrada, buscan levantar los platos rotos el suelo. Eso demostró en su gira por América Latina, por lo menos. Desde que era Presidente electo manifestó sus deseos de colaborar con Argentina; Peña y Raúl Castro anunciaron que buscan dejar atrás las malas relaciones de años pasados, y en uno de los hechos más comentados de lo que va de su sexenio, se ha dado la liberación de Cassez que, independientemente de la autonomía de los Poderes de la Unión –si el fallo de la Suprema Corte se negoció o no–, fue aprovechado por México: Francia apoyará el sueño peñista de tener una Gendarmería Nacional.
Los analistas dicen que para el equipo de Peña no será complicado elevar el nivel a la diplomacia mexicana: con sólo abandonar el lenguaje florido y las ocurrencias, afirman, y con sólo crear relaciones formales y de respeto, podrá poner a México en un mejor nivel que el que dejaron los 12 años de gobiernos del PAN.
«COMES Y TE VAS», UN «INCIDENTE DIABÓLICO»
El diferendo entre México y Cuba empezó un poco antes. Los analistas lo enmarcan en 1998, durante el gobierno neoliberal de Ernesto Zedillo. Hubo divergencias en torno a diversos temas económicos y políticos, afectando con ello la relación bilateral.
La fractura se hizo más fuerte, sin embargo, fue en el 2000, cuando Fox nombró a Jorge G. Castañeda como Secretario de Relaciones Exteriores. Los cubanos no quieren a Castañeda. Le ventilaron información sobre su pasado: una foto del canciller con un arma desató raspones.
Fue en marzo del 2002, en la Cumbre de Naciones Unidas para el Desarrollo, realizada en Monterrey, que Fox le dijo a su homólogo cubano Fidel Castro: “Comes y te vas”, para que no coincidiera con el mandatario de Estados Unidos, George W. Bush.
Tras este recordado episodio, el diario cubano Granma publicó un editorial titulado: “El culpable de lo ocurrido en Monterrey se llama Jorge Castañeda”, en el que señalaba:
La Historia de lo ocurrido en Monterrey está muy reciente.
La extrañísima política de México en relación con el incidente tiene un diabólico y cínico arquitecto: se llama Jorge Castañeda Gutman.
Fue él quien ideó y concertó con el Departamento de Estado norteamericano el plan de que México, junto con Argentina y alguna otra Cancillería latinoamericana, presentaran un proyecto de resolución en la Comisión de Derechos Humanos de Ginebra para condenar a Cuba, algo tan desprestigiado que ya ni siquiera el Gobierno checo estaba en disposición de continuar realizando Con relación a la Cumbre de Monterrey, su idea era que durante la visita a Cuba el pasado 3 de febrero se solicitara al compañero Fidel el “favor” de no asistir a la Conferencia de México Nadie se atrevió, sin embargo, a plantear este espinoso tema La primera reunión entre ambas delegaciones adquirió carácter profundo y serio Las francas e irrefutables palabras de nuestro Comandante en Jefe acerca de las indignantes maquinaciones yanquis contra Cuba en Ginebra fueron escuchadas con respeto por el Presidente Fox, y sin duda influyeron en el ulterior desenvolvimiento de los contactos e intercambios entre los Presidentes de México y Cuba.
Un mes después, en abril, el mexicano no atendió un exhorto del Senado sobre la posición que debería asumir México ante la ONU por los derechos humanos en Cuba y contrario a lo que le pidieron los legisladores, Fox votó a favor de una resolución que criticaba a La Habana.
El 1 de abril de 2004, durante su tradicional discurso, Fidel Castro aseguró que “el prestigio de México a nivel internacional se había reducido a cenizas”. Y dos días después, el entonces secretario de Relaciones Exteriores, Luis Ernesto Derbez, anunció el retiro de la embajadora mexicana en Cuba, Roberta Lajous, e informó que el Gobierno había fijado un plazo de 48 horas para la salida del embajador cubano, Jorge Bolaños. También indicó que las relaciones bilaterales quedaban a nivel de “encargados de negocios”, lo que significa tenerlas en el nivel más bajo.
Derivado de esto, el consejero para Asuntos Políticos acreditado por esta Embajada, Orlando Silva, fue declarado persona non grata, por lo que debía abandonar el país de manera inmediata.
La relación se intentaría restablecer en abril de 2012, cuando Felipe Calderón proclamó una “etapa renovada” en las relaciones con Cuba, en una visita destinada a sellar la reconciliación luego del distanciamiento de 10 años.
“Nos proponemos refrendar al pueblo cubano el respeto y la amistad del pueblo mexicano y llevar nuestra relación bilateral a su mejor nivel”, dijo Calderón a su llegada a La Habana. Incluso criticó el bloqueo económico impuesto a la isla por parte de Estados Unidos.
Pasaron los meses y el 27 de enero de este año, ya con nuevo Presidente se acordó relanzar la relación entre ambas naciones.
En el marco, Peña Nieto y Raúl Castro expresaron que buscan hacerlo a partir de los estrechos vínculos culturales e históricos, además de los lazos de mutuo afecto que unen a los países.
ASPEREZAS CON ARGENTINA
Las diferencias con el Gobierno argentino, en la última década, se acentuaron en el sexenio de Fox, cuando en noviembre de 2005, durante la IV Cumbre de las Américas celebrada en Mar del Plata, el mexicano criticó al entonces Presidente de Argentina, Néstor Kirchner.
En los debates entre los líderes de la región, Fox propuso que los países que apoyaran el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) firmaran un comunicado de apoyo, a lo que Argentina, Brasil y Venezuela respondieron que el encuentro de líderes no tenía como objetivo este tema. El mexicano entonces manifestó que Kirchner estaba más interesado en cumplir con la opinión pública argentina que lograr el éxito de la Cumbre.
En respuesta, el argentino le dijo: “Que el presidente Fox se ocupe de México. A mí me votaron los argentinos y yo me ocupo de ellos, como corresponde (…), algunos piensan que la buena diplomacia es tener una actitud de pleitesía y agachar la cabeza ante los fuertes”.
Tras dos años de una helada relación, ésta mejoró súbitamente cuando el 30 de julio de 2007 Néstor Kirchner llamó “querido amigo” a su homólogo Felipe Calderón, respaldó a México para que se integrara al Mercosur y hasta se ofreció para ayudar en el mejoramiento de las relaciones con Venezuela.
Pero las relaciones tuvieron otro tropiezo. Fecha: 17 de abril de 2012. Otro Kirchner estaba ahora en la presidencia. Calderón calificó de “muy lamentable” la decisión del gobierno de la actual Presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner de expropiar Repsol YPF, de capital español. Dijo también que se trataba de una medida “que no le va a hacer bien a nadie”.
Actualmente existe un trato cordial que fue reafirmado por Peña Nieto en septiembre pasado. El mexiquense acordó fortalecer la relación entre ambos países, deteriorada un poco.
Peña Nieto manifestó a Fernández de Kirchner su disposición de fortalecer el Acuerdo de Asociación Estratégica, suscrito desde 2007.
“SALE ESPINAO”
Calificado por el diario El Clarín como “el peor conflicto diplomático entre México y Venezuela”, este encontronazo también tuvo su inicio en 2005, durante la Cumbre en Mar de Plata, debido a sus distintas posturas sobre el ALCA.
Los medios indicaron que el primero en iniciar con las infortunadas declaraciones fue Vicente Fox, quien expresó que había presidentes, «por fortuna, los menos, que siguen culpando al exterior de todos su problemas».
Chávez pronto reaccionó y manifestó que le entristecía que un «pueblo heroico como el de México» tuviera un Presidente que «se arrodille al imperio y después salga arremetiendo contra los que defendemos la dignidad de nuestros pueblos». Además le dijo al panista «cachorro del imperio».
En su programa de radio y TV Aló Presidente, Chávez volvió a referirse a Fox y le advirtió. “No se meta conmigo, caballero, porque sale espinao”.
El conflicto derivó en que los dos gobiernos decidieron retirar sus respectivos embajadores y reducir sus relaciones al nivel de encargados de negocios.
Sería hasta mayo de 2006 que Chávez declaró que las relaciones bilaterales estaban congeladas y anunció formalmente el retiro de su país del G3 (acuerdo de libre comercio con México y Colombia).
Durante la campaña presidencial de Calderón, éste comparó a su rival Andrés Manuel López Obrador con Chávez lo que provocó que el venezolano expresara: “Parece que este caballerito va por el mismo camino” que su antecesor.
La relación comenzó a estabilizarse poco a poco y el 21 de febrero de 2010 Hugo Chávez viajó a Cancún, para la Cumbre de la Unidad de América Latina y del Caribe. En diciembre de 2011 Felipe Calderón realizó la primera visita de su sexenio a Venezuela, en la que se reunió por algunas horas con Chávez.
En julio de 2007 Chávez felicitó al entonces virtual ganador de las elecciones presidenciales en México, Enrique Peña Nieto, y ratificó su intención de profundizar la cooperación bilateral “para la unión de nuestros pueblos”.
EL CASO CASSEZ
Otro episodio que derivó en tensiones diplomáticas fue el caso de la francesa Florence Cassez, acusada de secuestro en nuestro país.
Cassez, quien fue detenida en medio de un montaje realizado el 9 de diciembre de 2005, cuando todavía era Presidente Vicente Fox Quesada. Genaro García Luna era director de la Agencia Federal de Investigación (AFI); después sería Secretario de Seguridad Pública federal en el sexenio de Felipe Calderón. Fue ligada a la banda de secuestradores «Los Zodiaco» y estuvo presa hasta el 23 de enero de 2013.
La situación de la presunta secuestradora fue uno de los principales temas de los que habló el ex Presidente Nicolas Sarkozy durante su visita a México en marzo de 2009.
Al siguiente año, Sarkozy solicitó a Felipe Calderón que la mujer fuera entregada a Francia para cumplir la pena de 60 años de prisión impuesta por delitos cometidos en México. El mexicano se negó e insistió en la culpabilidad de Cassez. El Gobierno francés presentó un recurso de amparo contra la sentencia.
Calderón defendía una posición interna en un conflicto que se había vuelto internacional. Defendía a García Luna, cuestionado por grupos de la sociedad civil y por partidos políticos. También trataba de tomar vuelo, con el caso, en su planteamiento de que “los criminales paguen”. Pagó México: el 15 de febrero de 2011 el Gobierno federal canceló la participación de su representación artística en el denominado Año de México en Francia, luego de que Sarkozy anunciara que todos los eventos estarían dedicados a Florence.
El 27 de abril de 2012, en el Distrito Federal, fueron detenidos Mario Vallarta Cisneros, presunto fundador de la banda «Los Zodiaco», y tres presuntos cómplices. Vallarta Cisneros, alias “El Chaparro”, declaró que Cassez sí participó en los plagios que perpetró el grupo criminal.
Pese a esto, Cassez fue liberada. La Suprema Corte juzgó que las autoridades habían violado sus derechos más elementales.
Tras su liberación, el Presidente Enrique Peña Nieto deploró los errores y violaciones que permitieron la liberación de Cassez, y dio instrucciones a la Secretaría de Gobernación y a la Procuraduría General de la República (PGR) para que las acciones del Ministerio Público Federal y la Policía Federal “sean con apego a la ley”.
Peña Nieto, en Los Pinos, dijo: “Lamento que en este y en cualquier otro caso, errores o violaciones al debido proceso impidan al Poder Judicial determinar la culpabilidad o inocencia de otra persona”.