Ciudad de México, 17 de ene (SinEmbargo).-El Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) busca la austeridad no sólo como una propuesta nacional dirigida a los tres poderes de gobierno del país, sino al interior de su organización como aspirante a partido político.

Martí Batres, presidente del Comité Ejecutivo Nacional de Morena, retomó como plan alternativo al gravamen de alimentos, medicinas y transporte para recuperar recursos, la propuesta de campaña de Andrés Manuel López Obrador de ahorrar 300 mil millones de pesos al disminuir los salarios, prestaciones, lujos y gastos innecesarios de todos los funcionarios y burócratas del país.

En su recorte presupuestal entraron desde el ejecutivo nacional, hasta los gobernadores, presidentes municipales, ministros, diputados, generales y los partidos políticos.

Pero no sólo eso, sino que al interior del partido aseguran que funcionan con austeridad.

La meta del movimiento es recabar 20 millones de pesos durante el año entre bonos que van desde 100 a los 50 mil pesos, explicó Marco Medina, secretario de Finanzas de Morena.

Una cantidad inferior a lo que requieren cualquiera de las tres fuerzas políticas más grandes del país, quienes funcionan con un estimado de mil millones de pesos anuales, detalló Medina.

Morena, aseguró, funciona con un millón  y medio de pesos mensuales, cantidad que se utiliza para pagar sólo lo necesario para su movimiento.

Impresión de formatos y folletos, la renta del inmueble donde reside la sede nacional, así como sus gastos de mantenimiento, las campañas nacionales, la construcción de comités seccionales y municipales y la organización de las 32 asambleas estatales para lograr su registro.

Morena además planea recabar fondos con la aportación obligatoria de un peso diario de sus afiliadas, así como de la realización de rifas y eventos culturales, aseguró.

Con este plan de austeridad al interior del movimiento, buscan predicar con el ejemplo y convencer a los gobernantes que sí se puede funcionar con menos recursos.

Martí Batres en la misma lógica propuso que si se disminuye 50%  las percepciones salariales de las plazas de mando superior de la administración pública el ahorro es de 44 mil 17 millones de pesos.

A esto se le pueden sumar 45 mil millones de pesos por la reducción de salarios de altos funcionarios de organismos y poderes autónomos.

Y si se reduce el recurso que se destina a gastos de operación distintos a sueldos y salarios, como viajes costosos al extranjero, lujos, automóviles, entre otros, se pueden obtener 175 mil millones de pesos.

Por último, el país podría ahorrarse 50  mil millones por la reducción del gasto corriente de los estados, añadió.

Esta propuesta pretende  el apoyo popular y no existe un acercamiento con el gobierno federal para analizarla, indicó.

Morena pretende difundirla entre la población y quizás llevarla a la Cámara baja a través de los diputados simpatizantes con el movimiento.

Shaila Rosagel

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