El Secretario de Seguridad capitalino, de amplio pasado en el sector policiaco, ha esquivado varias acusaciones que lo ligan con el caso Ayotzinapa, desde su ausencia la noche de la desaparición de los estudiantes hasta otras acusaciones como la del supuesto «cónclave» de Murillo Karam para orquestar la «verdad histórica».
Ciudad de México, 25 de agosto (SinEmbargo).– Omar García Harfuch, el Secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, enfrenta de nueva cuenta cuestionamientos por su pasado, en esta ocasión al ser señalado como uno de los “enlaces operativos para desarrollar la investigación” de la denominada “verdad histórica”, de acuerdo con lo contenido en el informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del caso Ayotzinapa.
El Jefe de Policía de la capital no ha titubeado en defender su carrera ante cada uno de estos señalamientos. “Rechazo la versión absurda de haber participado en una reunión para ‘fraguar la verdad histórica’; ojalá quienes llevan las investigaciones detengan a quien hizo daño a los jóvenes en lugar de arruinar vidas y reputaciones de los que sí hacemos algo por nuestro país todos los días”, escribió este lunes.
Cuando sucedió la desaparición forzada de los 43 normalistas, García Harfuch tenía 32 años y era delegado de la —ahora extinta— Policía Federal en Guerrero. Ocupó el puesto oficialmente entre diciembre del 2012 y octubre de 2014. Sin embargo, la noche del 26 de septiembre del 2014, según su propia versión, él no se encontraba en la entidad.
“Es importante precisar que cuando suceden esos hechos, es importante decir dónde estaba yo. Yo estaba en Michoacán, exactamente en Buenavista, Tomatlán y en Nueva Italia, Michoacán […] Yo no estaba en Guerrero, si hubiera estado en Guerrero, por supuesto salir a asumir y dices ‘me hago responsable de la Policía Federal’”, dijo García Harfuch en julio de 2022 durante una entrevista con Álvaro Delgado y Alejandro Páez en el programa de Los Periodistas que se transmite por YouTube a través del canal de Sin Embargo Al Aire .
Omar García Harfuch explico que él ya había sido designado a cumplir con una serie de labores en el estado de Michoacán en el Gobierno de Enrique Peña Nieto.
En todas las ocasiones, que García Harfuch ha sido ligado al caso Ayotzinapa no ha tardado en rechazar las acusaciones. Incluso, la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, se ha sumado a su defensa. Tuvo que hacerlo, por ejemplo, en octubre de 2019, cuando lo nombró Jefe de Policía de la capital.
«Para todos los funcionarios que tienen que ver con temas de seguridad (…) se hizo una consulta a la Fiscalía General, si es que estaba implicado en alguna investigación y no está implicado en ninguna investigación», aseveró la Jefa de Gobierno el 4 de octubre de 2019. «Hicimos las consultas a las diferentes instancias del Gobierno federal y a la propia Fiscalía General [de la República] y no está implicado en ninguna investigación de este tipo, no lo haríamos si estuviera involucrado”, zanjó Sheinbaum.
LA PF, GUERRERO Y LA NOCHE DE AYOTZINAPA
García Harfuch comenzó su carrera en el brazo policiaco a los 26 años, cuando ingresó a la Policía Federal como jefe de departamento para coordinar la inteligencia para la prevención de delitos, un puesto que delinearía su formación al interior de la institución y en sus futuros ascensos.
García Harfuch pasó a Guerrero, coordinando a la PF, en diciembre de 2012. Desde este puesto surgieron los señalamientos que lo ligan al caso Ayotzinapa. Uno de ellas surgió en 2014, pero no se reveló sino hasta 2016.
A mediados de octubre de 2014, las autoridades mexicanas detuvieron a Sidronio Casarrubias, supuesto líder de Guerreros Unidos, la banda criminal que habría orquestado la desaparición de los normalistas. Entre sus cosas, recuperaron una agenda donde, entre otros, se habría encontrado el nombre de García Harfuch, con nombre y celular.
Sin embargo, las autoridades nunca encontraron una relación entre ambos, ni registros telefónicos, de acuerdo con el diario La Jornada. La información de la agenda se dio a conocer recién en 2016 –cuando Harfuch ya era Comisionado de la Agencia de Investigación Criminal (AIC)– debido a que la evidencia nunca se presentó ante el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) del caso Ayotzinapa ni ante el Ministerio Público previamente.
En 2017, la entonces Procuraduría General de la República aseguró a Animal Político que «hasta ahora no existen elementos para confirmar que las autoridades que aparecen en esa libreta realmente tengan un nexo con el grupo criminal, o si simplemente se trataba de una relación de autoridades recolectada por Sidronio Casarrubias, sin que hubiera contacto con ellos».
ACUSACIONES DE UN TESTIGO PROTEGIDO
García Harfuch, que se mantuvo en la AIC hasta 2019, enfrentó un señalamiento más, en enero de 2021. En aquel momento, el diario Reforma, y antes el semanario Proceso, publicaron información de un supuesto «testigo protegido» bajo el alias de «Juan» que afirmaba que el funcionario había recibido 200 mil dólares mensuales por parte del Cártel Guerreros Unidos.
A través de su cuenta de Twitter, el funcionario de seguridad aseguró que no tiene nada que ocultar y que su trayectoria laboral es la que “habla por sí misma”.
“Niego categóricamente las declaraciones dolosas hechas contra mi persona por un delincuente, hoy ‘testigo protegido’, publicadas por Reforma. Mi trayectoria en el combate a la delincuencia organizada en distintos frentes habla por sí misma. No tengo nada que ocultar”, tuiteó Harfuch, en respuesta a la nota: “Salpican a Harfuch en pagos del narco” del 21 de enero de 2021.
Niego categóricamente las declaraciones dolosas hechas contra mi persona por un delincuente, hoy “testigo protegido”, publicadas por @reforma. Mi trayectoria en el combate a la delincuencia organizada en distintos frentes habla por si misma. No tengo nada que ocultar.
— Omar Garcia Harfuch (@OHarfuch) January 21, 2021
De acuerdo con la versión del supuesto testigo de “Juan”, el ahora titular de la SSC-CdMx daba información sobre posibles operativos “y facilitaba el trasiego de heroína, dinero y armas”. Harfuch negó todo. En aquel momento, Sheinbaum también salió a defender a su Secretario de Seguridad.
“Leí la nota de Reforma con cuidado. Ahí lo que hablan es que hay una persona, un ‘testigo’, que está diciendo esto (…) Lo que entiendo por la nota es que había un testigo que menciona esto, hoy el Presidente en la mañanera dijo que es una filtración, que en efecto hay esta información por parte de la FGR; eso no quiere decir que haya una investigación al secretario de Seguridad Ciudadana, sino un testigo que está diciendo esto”, expresó la mandataria capitalina en videoconferencia de prensa.
El año pasado, Claudia Sheinbaum también sostuvo que cuando invitó a García Harfuch para ser parte del Gobierno, «se llevaron a cabo todas las consultas al Centro Nacional de Inteligencia (CNI)», así como a distintas personas tanto de la sociedad civil como de instituciones de seguridad.
“Siempre tuvimos la información de que su trabajo hablaba por sí mismo y que no había absolutamente nada contra él. Lo hicimos así y confiamos en el trabajo que está haciendo porque lo ha demostrado durante este tiempo que ha estado en el Gobierno”, agregó Sheinbaum en aquel momento.
EL «CÓNCLAVE» DE LA «VERDAD HISTÓRICA»
La detención de Jesús Murillo Karam, el exprocurador del sexenio de Peña Nieto que orquestó la «verdad histórica» de Ayotzinapa, la cual postulaba que los normalistas habían sido incinerados en el basurero de Cocula, volvió a colocar sobre García Harfuch la sombra del caso.
El sábado, durante la presentación de pruebas contra Murillo Karam, los representantes de la FGR argumentaron que el exprocurador, junto a García Harfuch y otras figuras de alto nivel –el entonces Gobernador guerrerense, Ángel Aguirre; Tomás Zerón, titular de la Agencia Federal de Investigación y hoy prófugo del Gobierno mexicano en Israel; así como de Gualberto Ramírez Gutiérrez, entonces Fiscal especializado en delitos de secuestro– habrían participado en un «cónclave» para «fraguar» dicha «verdad histórica».
Una vez más, Harfuch negó haber participado en la reunión supuestamente organizada por Murillo Karam. A través de su cuenta de Twitter, el funcionario capitalino calificó de “absurda” la versión que lo nombra a él como uno de los que participó en la reunión realizada el 7 de octubre de 2014, en Iguala, Guerrero, entidad en la que entonces había estado a cargo de la Policía Federal.
Rechazo la versión absurda de haber participado en una reunión para “fraguar la verdad histórica”;ojalá quienes llevan las investigaciones detengan a quien hizo daño a los jóvenes en lugar de arruinar vidas y reputaciones de los que si hacemos algo por nuestro país todos los días
— Omar Garcia Harfuch (@OHarfuch) August 22, 2022
Antes, el domingo, Ángel Aguirre, entonces Gobernador guerrerense, también descartó haber participado en una reunión así.
Sheinbaum, más tarde el lunes, reiteró la defensa que una y otra vez ha asumido desde aquel 2019 en que lo llevó a su gabinete:
“Omar García desde que se integró al Gobierno de la Ciudad de México ha desempeñado un papel excepcional, y varias veces ha dado la explicación de que él en ese momento no estaba en el estado de Guerrero, lo ha dicho públicamente en distintos momentos”, expuso la mandataria durante una entrega de patrullas en la Alcaldía Cuajimalpa.
De igual forma, Sheinbaum explicó que no peligra el puesto de García Harfuch y destacó su integridad al frente de la Secretaría y su labor en torno al respeto de los derechos humanos. “Al frente de la CdMx ha desempeñado un papel sumamente importante para beneficio de las familias”, agregó.