El ataque fue registrado en el pueblo de Serhiivka a 50 kilómetros al suroeste de Odesa, Ucrania; recientemente, otro ataque ruso destruyó un centro comercial, donde 19 personas perdieron la vida.

KIEV, Ucrania, 1 de julio (AP).— Un ataque ruso con misiles contra edificios residenciales en la ciudad costera ucraniana de Odesa la madrugada del viernes mató al menos a 18 personas, entre ellas dos niños, informaron las autoridades, un día después de que las fuerzas rusas se retiraron de una isla estratégica del Mar Negro.

Un video del ataque de la madrugada del viernes mostró los restos carbonizados de edificios en el pequeño pueblo de Serhiivka, ubicado a unos 50 kilómetros al suroeste de Odesa. Los reportes de noticias ucranianos señalaron que los misiles dieron en un edificio de apartamentos de varios pisos y un área recreativa.

“Un país terrorista está matando a nuestra gente. En respuesta a las derrotas en el campo de batalla, luchan contra los civiles”, dijo Andriy Yermak, Jefe de gabinete del Presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy.

El subjefe de la oficina presidencial de Ucrania, Kirill Tymoshenko, dijo que 18 personas murieron, incluyendo dos niños. Un portavoz del gobierno regional de Odesa, Serhiy Bratchuk, dijo en la aplicación de mensajería Telegram que otras 30 resultaron heridas.

El ataque se produce un día después que los soldados rusos se retiraron de la Isla de las Serpientes, una isla clave del Mar Negro, relajando potencialmente la amenaza a la crucial ciudad portuaria ucraniana de Odesa. Pero mantuvieron sus acciones para rodear el último bastión de resistencia en la provincia oriental de Luhansk.

El Kremlin catalogó la retirada de la Isla de las Serpientes como un “gesto de buena voluntad”. El ejército de Ucrania aseveró que obligó a los rusos a huir en dos pequeñas lanchas rápidas luego de un aluvión de ataques de artillería y misiles ucranianos. No se reveló el número exacto de soldados.

La Isla de las Serpientes se encuentra a lo largo de una ruta de navegación muy transitada. Rusia tomó el control de ella durante los primeros días de la guerra aparentemente con la esperanza de utilizarla como base para un ataque contra Odesa.

Los bombardeos rusos mataron a un gran número de civiles a principios de la guerra, incluyendo gente que se encontraba en un hospital y un teatro en la ciudad portuaria de Mariúpol. Las bajas masivas parecían tornarse menos frecuentes a medida que Moscú se concentraba en apoderarse de toda la región de Donbás, en el este de Ucrania.

Sin embargo, un ataque con misiles registrado el lunes en un centro comercial en Kremenchuk, una ciudad en el centro de Ucrania, mató al menos a 19 personas e hirió a otras 62, informaron las autoridades el viernes.

El Presidente ruso Vladimir Putin negó el jueves que las fuerzas rusas hayan atacado el centro comercial y dijo que su país no ataca instalaciones civiles. Afirmó que el objetivo en Kremenchuk era un arsenal cercano, algo que ya habían sostenido sus oficiales militares.