“Era violento con las mujeres”, dicen compañeros sobre agresor de primaria de Texas

Compañeros de Salvador Ramos, el joven de 18 años identificado como responsable del tiroteo en el colegio Robb Elementary de Uvalde, lo describieron como un hombre que tenía conductas violentas hacia las mujeres.

Los Ángeles, 28 de mayo (La Opinión).– Keanna Baxter rechazó una insinuación del “espeluznante” Salvador Ramos después de presenciar cómo una amiga que salía con él se asustaba de su volátil compañero de estudios de la preparatoria Uvalde.

“Él salió con mi examiga. Y luego se separaron”, dijo Baxter, de 17 años, al San Antonio Express News. “Y luego trató de salir conmigo después de eso, pero le dije que no. Porque siempre tuve este tipo de sentido inquietante sobre él”.

Ramos, de 18 años, asesinó el martes a 19 estudiantes de primaria y dos maestras cuando irrumpió en la Escuela Primaria Robb en Uvalde, Texas, en el tiroteo escolar más mortífero de Estados Unidos desde 2012.

Ramos era impredecible y violento cuando salía con su amiga, dijo Baxter.

“Ella me dijo que él le daba miedo”, dijo Baxter. “Como si se pusiera súper violento. Y cuando él perdía los estribos, ella literalmente temía por su vida, básicamente.

“Él le enviaba estos mensajes realmente desagradables, donde pasaba de súper dulce a gritarle”.

“En general, era simplemente agresivo y violento”, agregó Baxter. “Él intentaría pelear contra las mujeres. Intentaría luchar contra cualquiera que le dijera que no; si no se salía con la suya, se volvía loco. Era especialmente violento con las mujeres”.

Una de esas mujeres era Crystal Foutz, de 17 años, también estudiante de la preparatoria Uvalde.

Ramos la amenazó con hacerle daño en comentarios en Instagram, luego de que se peleara en las redes sociales con su exnovia.

“Fue sólo acoso. Y nunca me ha gustado provocarlo ni nada por el estilo”, dijo Foutz el viernes. “Era agresivo sin razón… Acababa de bloquearlo”.

Foutz también se enteró de que Ramos acosaba a su exnovia después de que se separaron.

“Otra amiga mía, cuando trabajaba con [Ramos], tuvo un incidente entre una novia y un novio: [Ramos] trató de pelear con la novia”, dijo Foutz al Express News. “Y realmente fue por nada. Solo porque era así de agresivo”.

No es la primera vez que sus contemporáneos describen el comportamiento volátil de Ramos.

Santos Valdez Jr., de 18 años, dijo que eran cercanos hasta que el futuro pistolero se descarriló.

Ramos se presentó un día en un parque donde jugaban baloncesto con cortes en toda la cara.

Al principio le dijo a Valdez que su gato lo había arañado, luego reveló la verdad: se había cortado “sólo por diversión”.

Hay un video que circula de Ramos sosteniendo un gato muerto en el asiento del pasajero de un automóvil, dijo Baxter.

Foutz dijo que vio videos de TikTok que Ramos publicó de sí mismo golpeando paredes mientras usaba guantes de boxeo y declaraba que podía pelear con cualquiera.

“Era muy insistente”, recordó Foutz. “Si le pedías algo o si él estaba tratando de meterse contigo o estaba tratando de decirte algo y no le dabas prestabas atención se enfadaba… [Él era] muy insistente, muy agresivo”.

Los rumores que circulan entre los estudiantes de secundaria dicen que Ramos estaba enojado porque no podría graduarse.

Los informes dicen que abandonó la escuela secundaria, pero Baxter lo vio en el colegio el mes pasado. Foutz también recordó haberlo visto en el campus el otoño pasado.

“Para ser honesto, no lo pensé dos veces sobre este niño”, dijo Baxter. “Apenas conocí a este niño durante un año. Apareció de la nada”.

Ambas chicas llamaron a Ramos un “solitario” sin “amigos”.

“Las personas que intentaron darle la oportunidad de ser amigos, las asustó”, dijo Foutz. “Era un bully de verdad. Si no le dabas lo que quería, era un bully contigo”.

“Él no tenía amigos”, dijo Baxter. “Para ser honesto, nadie nunca habló con él. Solo porque la gente realmente le tenía miedo”.

De hecho, algunos estudiantes pensaron que si había un objetivo para este tipo de tragedias, sería la escuela secundaria.

“Todos pensamos que tal vez lo haría en la escuela secundaria, porque hemos recibido amenazas antes”, dijo Baxter. “Pero no para los niños. Deberíamos haber sido nosotros. No había ninguna razón para ir y lastimar a esos niños.

“Ninguno de nosotros somos así. Ninguno de nosotros tiene ese tipo de odio en nuestro corazón para hacer algo así o saber cómo pudo haber sucedido esto”.

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