Economía

El Gobierno de México, en conjunto con una treintena de representantes empresariales del país, presentó la pasada semana un plan para combatir la elevada inflación, especialmente de la canasta básica, con el fin de incrementar la oferta y reducir precios durante al menos seis meses.

Ciudad de México, 9 may (EFE).- La tasa de inflación en México subió en abril hasta el 7.68 por ciento, su mayor nivel desde enero de 2001, tras un aumento de los precios en el cuarto mes del año del 0.54 por ciento respecto al mes anterior impulsado por los alimentos y los pecuarios, informó este lunes el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

«En abril 2022, la inflación general anual fue de 7.68 por ciento, mostrando un incremento mensual de 0.54 por ciento», dijo en Twitter la presidenta del Inegi, Graciela Márquez.

En abril de 2021, hace justo un año, hubo un aumento mensual del 0.33 por ciento en el Índice de Precios al Consumidor (IPC), con lo que la inflación quedó entonces en el 6.08 por ciento.

El dato anual de abril supone también un aumento frente al de marzo, cuando la inflación quedó en un 7.45 por ciento interanual.

El índice de precios subyacente, considerado un mejor parámetro para medir la carestía general porque elimina artículos de alta volatilidad en sus precios, aumentó el 0.78 por ciento mensual y dejó la tasa anual en el 7.22 por ciento, señaló el Inegi en un comunicado.

Dentro del subgrupo de bienes y servicios subyacentes, las mercancías aumentaron el 1.03 por ciento y los servicios crecieron un 0.48 por ciento, con una tasa anual del 9.33 por ciento y del 4.83 por ciento, respectivamente.

En los no subyacentes, los agropecuarios aumentaron un 1.05 por ciento respecto al mes anterior, y los energéticos y tarifas autorizadas por el Gobierno cayeron un 1.07 por ciento.

Dentro de los agropecuarios, los precios de los productos pecuarios (ganaderos) aumentaron un sustancial 1.58 por ciento mensual.

Mientras que los energéticos cayeron en abril un 1.53 por ciento mensual.

A nivel anual, los precios de los agropecuarios aumentaron un 14.36 por ciento, mientras que las tarifas energéticas se elevaron un 5.18 por ciento.

De este modo, la partida de no subyacentes cayó 0.14 por ciento mes contra mes y aumentó un 9.07 por ciento interanual.

Por último, el índice de precios de la canasta de consumo mínimo, conformada por 176 productos y servicios, presentó un aumento del 0.44 por ciento mensual y del 8.31 por ciento interanual.

Los tres productos con el mayor aumento mensual en su precio fueron el chile serrano (25.65 por ciento), el jitomate (20.23 por ciento) y el aguacate (13.94 por ciento).

El Inegi también anunció que en abril el índice de precios al productor, incluyendo el petróleo, presentó una variación al alza del 0.46 por ciento respecto del mes anterior, alcanzando una variación anual del 10.35 por ciento.

Los precios al consumidor cerraron 2021 con una subida del 7.36 por ciento, un nivel no visto en dos décadas, debido a la preocupante alza de insumos básicos como los agropecuarios o la energía.

La inflación de 2020 cerró en un 3.15 por ciento, mientras que en 2019 la inflación fue del 2.83 por ciento y en 2018 los precios al consumidor se elevaron un 4.83 por ciento.

Los precios al consumidor escalaron hasta el 6.77 por ciento a finales de 2017, la tasa más alta desde 2000, que fue motivada por un alza en el precio de los combustibles.

La meta del Banco de México (Banxico) es del tres por ciento anual.