Poco después de la aprobación de la Asamblea General de las Naciones Unidas por suspender a Rusia del Consejo de Derechos Humanos, la delegación rusa decidió terminar su mandato en dicho Consejo.

Naciones Unidas, 7 abr (EFE).- Rusia anunció este jueves que ha decidido retirarse voluntariamente del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), después de que los países de la organización aprobasen suspender su participación en ese órgano por sus supuestos abusos en Ucrania.

La Asamblea General de Naciones Unidas aprobó hoy excluir a Moscú en respuesta a presuntas «violaciones graves y sistemáticas de los derechos humanos», una decisión que salió adelante con 93 votos a favor, 24 en contra y 58 abstenciones.

Poco después, en un discurso ante la propia Asamblea, la delegación rusa dijo que ha decidido terminar anticipadamente su mandato en el citado Consejo, al que le quedaba más de año y medio.

Según el diplomático Gennady Kuzmin, tras la decisión de hoy, el órgano que tiene sede en Ginebra se ha convertido en un instrumento de Estados Unidos y sus aliados, que fueron quienes impulsaron la suspensión de Moscú.

El Consejo de Derechos Humanos votó para suspender a Rusia de dicha instancia de las Naciones Unidas. Foto: Twitter @UN

Kuzmin acusó a estos países de «minar la confianza» en el Consejo de Derechos Humanos y de usar la baza de los derechos humanos contra Rusia a pesar de que «han estado durante años involucrados en violaciones masivas» o las han facilitado.

El representante ruso dijo que, pese a su retirada del órgano, su Gobierno «continuará cumpliendo con sus obligaciones» en materia de derechos humanos.

Al anuncio ruso le respondió irónico el Embajador ucraniano, Sergiy Kyslytsya: «Uno no dimite después de ser despedido. Eso es exactamente lo que ha pasado con la Federación Rusa».

El Consejo de Derechos Humanos, que se reúne en Ginebra, es el máximo órgano de Naciones Unidas en este ámbito y está compuesto por 47 países, elegidos para mandatos de tres años.

Su composición, que se decide en elecciones celebradas anualmente, ha sido criticada regularmente por incluir a Estados con historiales muy dudosos.

Durante la Administración de Donald Trump, Estados Unidos se retiró del órgano utilizando ese argumento y un supuesto sesgo contra Israel, aunque luego retornó de la mano de Joe Biden.

Actualmente se sientan en el Consejo, entre otros, China, Cuba, Libia, Estados Unidos, Ucrania o Venezuela. Rusia, por su parte, ha sido un miembro habitual y ahora estaba en el segundo año de un mandato de tres.