La española Raquel Riba Rossy es las ideas y el talento detrás de Lola Vendetta, ese personaje que no tiene «pelos en la boca» al momento de hablar de las injusticias en contra de las mujeres, de reescribir la historia o compartir sus miedos y luchas constantes. Lola es el espejo de otras mujeres que ellas también han encontrado su historia.
Ciudad de México, 1 de abril (SinEmbargo).– Lola Vendetta no tiene filtros, cuando una injusticia se le pone frente simplemente la combate desde la sátira y con la katana que porta sin miedo alguno. Lola es un personaje que nace desde la rabia y la impotencia de vivir en un mundo donde las mujeres aún se sienten ajenas a él, pero que cree firmemente que ya es tiempo de cambiar eso.
La ilustradora española Raquel Riba Rossy es la mente detrás de Lola Vendetta, desde hace casi diez años le ha venido dando vida a este personaje que funge como su álter ego.
«Yo creo que el personaje empieza dándole un poco de rienda suelta a la rabia que yo sentía por un montón de cosas que yo vivía y que luego me di cuenta, sobre el papel, que eran cosas que yo vivía por el hecho de ser mujer, por el hecho de vivir en un sistema machista y por una serie de cosas, pero al principio, digamos la raíz inicial es porque le di rienda suelta a la incomodidad a través de la viñetas y de ahí nace el personaje», cuenta la escritora en entrevista con SinEmbargo.
Lola nació de manera completamente gore, cuenta Raquel, cortando cabezas «a lo bestia», pero con el tiempo se ha ido transformando y aprendiendo de todas las mujeres que se han acercado a ella, sin embargo la sangre de alguna forma, y en sus formas, sigue estando presente en sus viñetas.
«Desde ese momento, hace ya cuatro libros y diez años, el personaje ha ido evolucionando al igual que lo hacemos nosotras. O sea, empieza desde la rabia que yo creo que es sentimiento que todas podemos compartir en el momento en que empezamos a leer sobre feminismo, en el momento en que te das cuenta en cómo funcionan las cosas, y de los injusto que son muchas de las cosas de las que has vivido, uno de las principales sentimientos con los que encuentras es la impotencia, la rabia, la indignación y el personaje empieza exactamente así».
Raquel Riba Rossy ha publicado Más vale Lola que mal acompañada (2017), ¿Qué pacha, mama? (2018), Lola Vendetta y los Hombres (2019), Lola Vendetta. Una habitación propia con Wifi (2021), todos ellos inspirados desde feminismo al abordarlo desde distintos temas como la relación con su madre, con los hombres y esta idea del amor romántico, la masculinidad, la necesidad de estar sola y el recuperar su propio espacio.
Estas publicaciones son testigos de cómo tanto como autora como su personaje han evolucionado.
«El libro Lola Vendetta. Una habitación propia con Wifi recupera esa necesidad de escucharse después de haberse venido súper arriba y haber creído salvar a todo el mundo, al patriarcado y demás, de repente está súper cansada y se da cuenta que no se ha respetado a sí misma y que tiene la necesidad de descansar y retirarse a un lugar que sea sólo para ella, esa habitación propia».
LAS REDES SOCIALES, LA GRAN CONEXIÓN
Raquel Riba Rossy estudió Bellas Artes en la Universitat de Barcelona e ilustración en la Escola de la Dona de Barcelona. Siempre lo supo. Su pasión por el dibujo estuvo presente desde temprana edad, lo que nunca se imaginó fue que sus dibujos pudieran llegar a lugares por muchas partes del mundo y que fueran las redes sociales ese transporte.
«Una de las principales cosas que significan las redes sociales para mí es que México, Colombia, Argentina y Ecuador no están tan lejos, porque claro, si no existieran las redes sociales y sólo pudiera experimentar ese contacto a través de los libros y de cuando te invitan una feria que es una vez cada año o cada dos, y más en pandemia que no ha habido nada de estas cosas. Claro, hacer contacto con las mujeres de otros lugares, distintos a donde yo vivo, no se daría tan fácilmente, entonces yo creo que sería más pobre el personaje».
La ilustradora atribuye gran parte del crecimiento de Lola a historias de mujeres que desde otros países han compartido con ella. Afirma que redes sociales como Instagram, en la que rebasa los 624 mil seguidores, se han convertido en una «herramienta brutal de unión humana en mutiles niveles» y también para conocer y aprender más sobre el feminismo.
Destaca que estas redes sociales no sólo le han permitido llegar a más lados, sino a este movimiento de mujeres ilustradoras que crece cada vez más con nombres como Moderna de Pueblo o Flavita Banana de España, Sofia Weidner de México, Sara Fratini de Venezuela, por mencionar solo algunas, que dibujan y comparten el feminismo.
«Estamos hablando de que de repente entra esta información desde el celular que es un aparato enano, muy pequeño que tú te lo llevas a todos lados, encerrada en el baño estás mirando información, eso cambia totalmente las reglas del juego. No todas las mujeres tienen un celular en casa, eso también es verdad y propio, pero es verdad que de repente multiplican la cantidad de información que puede llegar a las mujeres y se dan cuenta, nos damos cuenta de los derechos que tenemos, empezamos a hacernos de espejo con mujeres que están al otro lado del mundo, se hace una cadena de mujeres en la India, y nos damos cuenta, nos sentimos relacionadas con ellas, nunca hemos pisado la India, nunca conoceremos a nadie de las personas que formaron esa cadena, pero te sientes relacionada con estas mujeres porque de repente se puede generar un link, entre ellas y yo, y yo creo que una de las cosas increíbles que estamos viendo en este momento».
10 AÑOS CON LOLA
«Nosotras es que somos uña, carne y katana», escribe Raquel al referirse a su relación con Lola Vendetta de la que ha aprendido conocerse a sí misma.
Son 10 años, un tercio de su vida que ha compartido con este personaje que la ha ayudado ha colocarse en el ojo público y crear redes de apoyo con otras mujeres, pero también de ser el canal que le ha permitido compartir sus miedos, sus luchas, momentos de quiebre y, por supuesto, sus alegrías.
«Es increíblemente gratificante poder vivir del arte que siempre me ha gustado hacer, este primer punto es importantísimo, y poder ganar dinero a través de él para poder vivir mi vida, para poder pagar mi casa, poder pagar mi comida, cuando a mí todo el mundo me había dicho que como artista eso era algo imposible, que no iba a pasar, en ese sentido estoy contentísima. Luego, como digo, la sensación de conexión con mujeres con las que jamás quizá habría hablado y de repente este personaje, las redes, la situación en la que vivimos, en el momento en el que está el feminismo en muchas países del mundo, eso me brinda la oportunidad de conocer realidades de mujeres que siendo muy distintas, tenemos paralelismos, y se parecen mucho, yo creo que estos factores son los más bonitos».
A Raquel le pone los vellos de punta la frase «Los trapitos sucios se lavan en casa». La odia. La detesta porque limita a las mujeres, las hace vivir violencia en silencio y hoy más que nunca está convencida que ese debe eliminarse se raíz.
Ahora la lucha de Riba Rossy trasciende del papel para ser escuchada. La ilustradora debutó este año como cantautora con su primer álbum musical “El Primer Canto”, son 10 canciones con las que sigue creando redes y expresando su arte con mucho empoderamiento femenino.
«Hay muchas letras que tienen mucho que ver con lo que habla Lola Vendetta, otras igual le tocan historias paralelas que sucedieron también en toda la evolución. Si me pusieran a contar todo el significado de todas las canciones de repente yo creo que leyendo los cuatro libros de Lola y sabiendo el resultado de las canciones se atarían conceptos, uno iría hilado con el otro, tiene bastante sentido, pero de momento no las que he contado, entonces ahí están en secreto».
La música siempre estuvo presente entre dibujo y dibujo, pero el proyecto pudo consolidarse hasta la pandemia. Una amiga con la que pasó el confinamiento la motivó para grabar de una vez esas letras.
Hoy “El Primer Canto” es el siguiente paso para Lola Vendetta, pues Raquel desea que en los próximos meses la música y la ilustración, sus dos lenguajes, logren unirse.
«Yo quiero hacer una fusión de la música y la ilustración en un escenario, quiero poder hacer eso, quiero llevar a Lola a otras plataformas, a otros lenguajes, me encantaría poder llevarla a la pantalla ya sea en el escenario como en formatos de película o serie, lo que sea. Tengo una relación con este peonaje que creo que va durar muchos años, no me canso de ella, me cae bien convivo bien con ella, no es un personaje con el que diga ‘¡uff!, me equivoqué construyendo su personalidad o su enfoque’. Creo que se ha presentado de una manera en la que es vulnerable y se admiten errores y cambios, entonces es un personaje con el que me siento muy cómoda, y me encanta llevarlo a otros niveles, claro».
“El Primer Canto” ya está disponible en todas la plataformas de música y la ilustración de Lola Vendetta a través de redes sociales.