El Gobierno de Puebla indicó que 100 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal serán enviados al penal de San Miguel como policías de custodia tras el hallazgo del cuerpo de un bebé, quien habría sido exhumado de un panteón en la Ciudad de México.

Por Edmundo Velázquez

Puebla, 15 de febrero (Periódico Central).– Tras el hallazgo del cuerpo del bebé Tadeo, localizado sin vida en un contenedor de basura del centro penitenciario de San Miguel, en el estado de Puebla, la Secretaría de Seguridad Pública Estatal determinó redoblar la presencia de elementos y 100 de ellos serán integrados como policías de custodia.

Como parte de la glosa del Informe de Labores del Gobernador Miguel Barbosa Huerta, el Secretario de Seguridad Pública, Daniel Iván Cruz Luna, explicó ante el Congreso Local que, a pesar de que lleva unas semanas en el cargo, han tomado acciones directas para mejorar la situación del penal de San Miguel.

Al respecto, el Diputado local de Acción Nacional, Rafael Micalco, comentó sobre casos como la fuga del interno conocido como “El Pirulí” y el hallazgo del bebé Tadeo, que han provocado que el centro penitenciario de la capital sea exhibido como un foco rojo.

Cerco de seguridad en el panteón de San Nicolás Tolentino en la Alcaldía Iztapalapa, Ciudad de México, por el caso un bebé encontrado sin vida en el penal de San Miguel, en la ciudad de Puebla y que se ha confirmado fue exhumado de este cementerio. Foto: Edgar Negrete, Cuartoscuro.

El Secretario Cruz Luna explicó que entre las medidas tomadas para estabilizar el penal doce internos de San Miguel fueron enviados a centros penitenciarios federales además de que llegó una nueva funcionaria, María del Rayo Mendoza Farfan, como directora general.

Bajo este mismo esquema se fortalecerá con 100 elementos custodios más el centro penitenciario, agregó Cruz Luna.

El titular de SSP recalcó lo dicho ayer por el Fiscal General del Estado, Gilberto Higuera Bernal, el titular de la Fiscalía General del Estado, quien detalló ayer que internos que disputaban el control del centro penitenciario y buscaron desestabilizarlo a través de un escándalo de tal nivel.

Higuera Bernal explicó que el interno que ordenó ingresar al bebé Tadeo al penal de San Miguel buscaba “el liderazgo de las actividades delictivas” realizadas al interior.

Se trata de Antonio «N», alias “El Soto”, quien ordenó a su pareja, Nadia Carolina «N», ingresar el cadáver del bebé. “El Soto”, según detalló el titular de la Fiscalía, tuvo incluso una noche y un día los restos de Tadeo en su celda hasta que encontró el momento para que sus cómplices lo sembraran.

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Redacción/SinEmbargo

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