El Ministro de Exteriores de Corea del Norte emitió un comunicado en el que estableció que Estados Unidos «supone una grave amenaza» ante sus ejercicios militares conjuntos que realiza.

Seúl, 2 feb (EFE).- Corea del Norte instó hoy a Estados Unidos a «abandonar la política hostil» en su contra y le acusó de la reciente escalada de tensiones en la península, tras la sucesión de test de misiles por parte del régimen durante las últimas semanas.

A través de un comunicado del Ministerio de Exteriores norcoreano, Pionyang culpó a Washington «del fallo de la situación» en la península coreana y de la «espiral de tensión agravada».

El comunicado también recalca que los ejercicios militares conjuntos que lleva a cabo Estados Unidos en la península «suponen una grave amenaza» para la seguridad nacional.

«Estados Unidos haría bien deteniendo sus amenazas militares contra nuestro país, y retirando, en primer lugar, su política hostil antes que publicitar la llamada ‘solución diplomática’ y el ‘diálogo'», señala la nota.

Corea del Norte ha iniciado este 2022 con diversas pruebas de armas de corto alcance, desafiando a potencias occidentales como Estados Unidos. Foto: Jeon Heon-Kyun, EFE.

El régimen que lidera Kim Jong-Un publicó este comunicado el mismo día en que el Ministro de Exteriores nipón y su homólogo estadounidense mantuvieron una conversación telefónica donde confirmaron su cooperación en materia de defensa tras los recientes test norcoreanos.

El japonés Yoshimada Hayashi y el estadounidense Antony Blinken coincidieron en señalar que las actividades armamentísticas del Norte «amenazan la paz y estabilidad de Japón, de la región y la comunidad internacional», según informó este miércoles el Ministerio de Exteriores de Japón en un comunicado.

Hayashi y Blinken destacaron su preocupación ante el último lanzamiento de Pionyang de un proyectil de alcance intermedio Hwasong-12, el de mayor rango en más de cuatro años, y que fue disparado el pasado domingo hacia el mar de Japón (mar del Este en las dos Coreas), y marcó la séptima prueba armamentística en un mes.