Líder extremista y 10 personas son acusadas de conspiración por ataque al Capitolio

Stewart Rhodes es fundador de Oath Keepers: un grupo de extrema derecha que participó en el asalto al Capitolio del 6 de enero del año pasado; él y otros participantes ya fueron arrestados.

Por Michael Balsamo, Colleen Long y Alanna Durkin Richer

WASHINGTON, 14 de enero (AP).— Stewart Rhodes, fundador y líder del grupo de extrema derecha Oath Keepers, fue arrestado y acusado de conspiración sediciosa por el ataque al Capitolio estadounidense el año pasado, informaron las autoridades el jueves.

Otras diez personas también fueron acusadas de conspiración sediciosa en relación con el ataque del 6 de enero de 2021, cuando las autoridades dijeron que miembros del grupo extremista llegaron a Washington con la intención de detener la certificación de la victoria electoral del Presidente Joe Biden.

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Estos son los primeros cargos de conspiración sediciosa que presenta el Departamento de Justicia en relación con el ataque liderado por partidarios del entonces Presidente Donald Trump.

Rhodes, de 56 años, de Granbury, Texas, y Edward Vallejo, de 63, de Phoenix, Arizona, fueron arrestados el jueves. Los otros que fueron acusados ya enfrentaban cargos penales relacionados con el ataque. Rhodes es el miembro de mayor rango de un grupo extremista en ser arrestado por el asalto a la sede del Congreso.

El arresto de Rhodes y los demás es una escalada importante de los cargos contra los miles de alborotadores que asaltaron el Capitolio. Los cargos responden en parte a un creciente coro de republicanos que han puesto en duda públicamente la gravedad de la revuelta, argumentando por ejemplo que como nadie había sido acusado todavía de sedición o traición, no fue tan violento.

Rhodes no ingresó al Congreso el 6 de enero, pero está acusado de ayudar a poner en marcha la violencia que interrumpió la certificación del voto. El caso de Oath Keepers (Custodios del Juramento) es el caso de conspiración más grande que las autoridades federales han presentado hasta el momento por el asalto donde los insurrectos atravesaron las barreras policiales y rompieron ventanas, hirieron a decenas de agentes e hicieron huir a los legisladores.