Matrix Resurrections es una cinta que sin duda dividirá opiniones ya que retoma una trilogía que en su momento marcó a toda una generación, además de dejar su huella a través de los efectos especiales y escenas icónicas como la de Neo esquivando las balas, para darle un nuevo respiro a Neo y Trinity junto a nuevos y jóvenes personajes que parece buscan cautivar ahora a las nuevas generaciones.
Ciudad de México, 22 de diciembre (SinEmbargo).- Después de 18 años, Keanu Reeves y Carrie-Anne Moss regresan a la pantalla grande como Neo y Trinity con Matrix Resurrections, una cinta escrita y dirigida por Lana Wachowski que busca sumergir a todos en la cuarta entrega de la franquicia revolucionaria que redefinió el género.
Matrix Resurrections es el regreso a la vida cotidiana y a la otra, a lo que hay detrás de ella. Para descubrir si su realidad es una construcción física o mental, para conocerse realmente a sí mismo, el Sr. Anderson tendrá que optar por seguir al conejo blanco una vez más. Y si Thomas / Neo ha aprendido algo, es que la elección, aunque es una ilusión, sigue siendo la única forma de salir o entrar en la Matrix. Por supuesto, Neo ya sabe lo que tiene que hacer, lo que aún no sabe es que la Matrix es más fuerte, más segura y más peligrosa que nunca. Déjà vu.
Matrix Resurrections es una cinta que sin duda dividirá opiniones ya que retoma una trilogía que en su momento marcó a toda una generación, además de dejar su huella a través de los efectos especiales y escenas icónicas como la de Neo esquivando las balas, para darle un nuevo respiro a Neo y Trinity junto a nuevos y jóvenes personajes que parece buscan cautivar ahora a las nuevas generaciones junto a la que, sin duda, disfrutó de las primeras películas en su lanzamiento.
Se puede decir que la cinta se divide en dos partes, en la primera se muestra qué pasó con Neo después de ese trágico «final» de Matrix Revolutions, con Trinity y con la Matrix, ¿pastilla azul o roja? En esta primera parte la historia es muy consciente de ella misma, es decir, hasta hay algunas bromas al respecto y pareciera estarle hablando directamente al espectador en la sala de cine. Después, en lo que podemos decir que es como la segunda fase de la cinta, regresan las escenas de peleas, de transiciones entre la Matrix y el mundo «real» y los personajes que tanto se esperaban.
La recomendación es ver las tres primeras películas de Matrix otra vez para tener fresca la historia y los personajes o en caso de no haberlas visto antes, para poder comprender todo y emocionarse con los flashbacks, con este elemento nostálgico y decir: ‘claro, eso pasó en la primera cinta’ o ‘ese personaje apareció en la segunda película’ y realmente disfrutarlo.
Los efectos especiales están muy bien logrados y no quedan a deber, además de las escenas de peleas y combates, en especial en la segunda parte de la cinta donde parece que toda la acción explota y Neo vuelve a parar balas y a saltar de edificios. Respecto a las actuaciones, Keanu Reeves hace un buen trabajo, la madurez y experiencia adquirida tras los casi 20 años desde la última vez que interpretó a Neo se ve reflejada en la pantalla, (aunque con ese look es inevitable recordar a John Wick), Carrie-Anne Moss luce en cada minuto, la mexicana Eréndira Ibarra también participa en las escenas de acción y Jessica Henwick es una sorpresa muy agradable, además de tener a Neil Patrick Harris y a Jada Pinkett Smith.
Un punto que puede no resultar tan a favor es que, aunque el amor es un aspecto sumamente importante en las tres primera películas y nos demuestra que prácticamente lo puede todo, o casi todo, se mantenía como un elemento muy importante y relevante pero sin caer en lo cursi, algo que sí parece suceder en esta cuarta entrega, incluso da la impresión de reducir todo al tema del amor. Esta película parece estar en otra Matrix, en otro espacio muy diferente al de las tres anteriores.
Matrix Resurrections es una película entretenida que apela a la nostalgia y que hace pasar un buen rato con escenas de acción, efectos especiales y por supuesto con Keanu Reeves y Carrie-Anne Moss. Esta Matrix es algo nuevo y diferente, con un amor más evidente, una buena opción para ir al cine y cerrar el año.