Los agentes migratorios identificaron a casi 200 migrantes, principalmente centroamericanos, hacinados en un hotel ubicado en Apodaca, en el estado de Nuevo León.
Por Félix Márquez
JESUS CARRANZA, 17 de noviembre (AP) — Mientras los líderes de América del Norte se preparan para reunirse en Washington con la migración como uno de sus temas centrales, los migrantes siguen desplazándose por México a través de diversas vías.
Unos optan por hacerlo de manera visible y en grupo, como la caravana que sigue avanzando por el sur ya con menos de un millar de personas. Otros escogen las rutas clandestinas controladas por los traficantes, como aparentemente hicieron las casi 200 personas que las autoridades localizaron el miércoles hacinadas en un hotel del norte del país.
Según indicó el Instituto Nacional de Migración (INM) en un comunicado, 195 migrantes, la mayoría centroamericanos y entre los que había menores, fueron ubicados en Apodaca, una localidad en las afueras de Monterrey, «hacinadas, sin alimento ni agua, en cuartos de un hotel».
El @INAMI_mx, con apoyo de @GN_MEXICO_, rescató a 195 personas extranjeras hacinadas en un hotel ubicado en #Apodaca, NL. Provienen de Honduras ?? El Salvador ?? Guatemala ?? Nicaragua ?? Cuba ?? Perú ?? y República Dominicana ?? https://t.co/W576bNI2kh pic.twitter.com/GNs3EZD0p3
— INM (@INAMI_mx) November 17, 2021
Ochenta eran de Honduras; 38 de El Salvador; 36 de Guatemala; 36 de Nicaragua; una de Cuba; una de Perú, y tres de República Dominicana.
Los migrantes, que fueron detectados por la Fiscalía estatal, quedaron bajo tutela del INM, que ante este tipo de situaciones suele retenerlos en estaciones migratorias o devolverlos a sus países de origen.
En las últimas semanas, las acciones de detención de migrantes que transitan por México de manera irregular han ido acompañadas de ofrecimientos de regularización propuestos por el INM a los integrantes de la caravana que lleva casi un mes caminando por el sur de México y que en su punto álgido llegó a reunir a unas cuatro mil personas.
Después de recorrer casi 500 kilómetros, desde que el 23 octubre salieron de Tapachula, casi en la frontera con Guatemala, apenas queda un millar que el miércoles pasaba la noche en una comunidad del municipio de Jesús Carranza, en el estado de Veracruz. El resto se había ido separando del grupo o ha aceptado la propuesta del Gobierno.
«Voy a confiar en ellos, ya no quiero seguir caminando, no puedo, yo lo que quiero es trabajar y si es cierto, lo voy a aprovechar», dijo el hondureño José Luis Rodríguez, que confiaba en lograr los papeles y encontrar un empleo en Monterrey, donde amigos suyos le dijeron que necesitaban mano de obra.
A lo largo del miércoles, mientras unos grupos se subían a plataformas de camiones para avanzar más rápido y otros seguían caminando, en torno a medio centenar de migrantes hicieron lo mismo que Rodríguez. Según el INM, más de mil 500 habían aceptado la propuesta que miembros del instituto les reiteran en cada parada del camino.
«No los vamos a regresar en Tapachula», garantizaba el martes desde el vecino estado de Oaxaca Héctor Martínez Castuera, el funcionario del INM que ha estado negociando con los integrantes de la caravana. «A nombre del Gobierno Federal, reiteramos lo que el Instituto Nacional de Migración ha venido manifestando: Uno, regularizar a todas las mujeres embarazadas con su núcleo familiar; a los menores con su núcleo familiar; a las personas en estado vulnerable y su núcleo familiar; a discapacitados y a adultos mayores con su núcleo familiar».
La desconfianza, sin embargo, persiste porque el INM decía que para poder acogerse a esta propuesta, los migrantes debían ser trasladados a otros estados del país.
La hondureña Ingrid Linares, que se define como «mujer trans», denunció que cuando había acudido a aceptar la oferta oficial se habían burlado de ella por pertenecer al colectivo LGBT+, algo que un agente de migración reconoció ante las cámaras de la prensa mientras pedía disculpas y decía que se había equivocado.
La caravana, que avanzó muy lentamente y ante la atenta mirada de las fuerzas de seguridad con las que hubo choques solo en un par de ocasiones, tiene previsto seguir caminando hacia el norte.
Mientras tanto, en Tapachula algunos migrantes se preparaban ante el rumor de que un nuevo grupo pudiera empezar a caminar el jueves, justo cuando el Presidente Andrés Manuel López Obrador tiene previsto reunirse con Joe Biden en la Casa Blanca para hablar, entre otros temas, de migración. En la cita de Washington también estará el Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau.
El Gobierno de México ha apostado por la contención de los flujos migratorios desde la anterior administración estadounidense liderada por Donald Trump, cuando López Obrador desplegó miles de efectivos de la Guardia Nacional. Ahora el mandatario confía en concretar propuestas para invertir en el desarrollo de los países de origen aunque la contención continúa. De enero a octubre de este año las autoridades detuvieron a más de 190 mil migrantes, más que en todo el año 2019.