«Este abordaje terapéutico podría ser un recurso clave en el manejo de los casos más críticos de COVID-19, donde en ocasiones ni la dexametasona, el remdesivir u otros inmunomoduladores dirigidos tienen un efecto significativo sobre la mortalidad», destacó uno de los médicos.
Madrid, 6 de septiembre (Europa Press).- La combinación de tocilizumab, un fármaco antiinflamatorio, y pembrolizumab, un agente inmunoactivador, utilizados habitualmente en el tratamiento contra el cáncer, podría mejorar el pronóstico de pacientes adultos hospitalizados con neumonía por COVID-19, según se desprende de los resultados del análisis interino de un ensayo diseñado por MEDSIR, presentado en el Congreso Internacional de la Sociedad Europea Respiratoria.
En el estudio, desarrollado en ocho hospitales españoles, se estudió la seguridad y la eficacia de añadir tocilizumab, un anticuerpo monoclonal dirigido contra el receptor de interleucina-6 (IL6), en combinación con pembrolizumab, un inhibidor de la proteína receptor 1 de muerte programada (PD-1), al tratamiento de pacientes de alto riesgo con neumonía por COVID-19.
La IL-6 es una citoquina pro-inflamatoria, mientras que la función de PD-1 es suprimir la acción del sistema inmunitario en múltiples procesos fisiológicos y patológicos mediante la inactivación de las células T. En los casos más graves de COVID-19, los pacientes progresan a insuficiencia respiratoria hipoxémica, un síndrome en el que el sistema respiratorio carece de oxigenación suficiente.
Este proceso está ligado a una respuesta inflamatoria severa, con un rápido aumento de marcadores inflamatorios (IL-6 entre ellos) y una reducción de los niveles y de la funcionalidad de las células T, encargadas de combatir las infecciones.
Los investigadores trabajaron con la hipótesis de que el bloqueo del receptor de IL-6 mediante tocilizumab, combinado con la activación de las células T mediante el agente inmuno-activador pembrolizumab, podría interrumpir esta hiperinflamación restaurando al mismo tiempo la acción del sistema inmune contra el virus.
En el ensayo, un total de 12 pacientes fueron aleatorizados en dos grupos. Todos los pacientes recibieron el tratamiento estándar durante todo el ensayo, pero sólo uno de los grupos recibió, además, la combinación de tocilizumab y pembrolizumab.
El análisis interino ha demostrado que los pacientes que recibieron tocilizumab/pembrolizumab mostraron una mediana de tiempo hasta el alta hospitalaria de sólo 10 días, en comparación con los 47.5 días de los pacientes que únicamente recibieron el tratamiento estándar. Además, el grupo tratado con la combinación presentó más pacientes dados de alta en menos de 90 días, más altas sin síntomas respiratorios y menos efectos adversos de cualquier tipo.
«Este abordaje terapéutico podría ser un recurso clave en el manejo de los casos más críticos de COVID-19, donde en ocasiones ni la dexametasona, el remdesivir u otros inmunomoduladores dirigidos tienen un efecto significativo sobre la mortalidad», resalta el doctor Antonio Llombart, uno de los investigadores del estudio y jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Arnau de Vilanova.
«Iniciamos este ensayo al inicio de la pandemia, cuando las opciones terapéuticas disponibles para los pacientes hospitalizados eran escasas y se sabía muy poco sobre este nuevo virus», explica el doctor Javier Cortés, coordinador científico del estudio y director del International Breast Cancer Center.