El trabajo infantil aumentó por primera vez en 20 años y la ONU advirtió que la pandemia puede empeorar la situación.
Ciudad de México, 14 junio (EFE).- El nuevo Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que el 1 de julio cumple un año de entrar en vigor, no ha logrado aún impactar en la erradicación del trabajo infantil en el país, advirtieron este lunes especialistas.
Aunque el T-MEC establece una serie de penalizaciones en materia de trabajo infantil, Jennifer Haza, directora ejecutiva de la organización Melel Xojobal, lamentó que estas medidas no alcancen a la infancia.
«Los verdaderos beneficiados de los tratados internacionales son los grandes capitales internacionales y nacionales, no los niños, niñas ni adolescentes», zanjó.
Este fue uno de los puntos de debate durante la presentación del informe «Compromisos y dilemas del T-MEC: políticas laborales, familias y trabajos de niños, niñas y adolescentes en México» elaborado por la Red Por los Derechos de la Infancia en México (Redim).
Tania Ramírez, directora ejecutiva de Redim, detalló que según la Encuesta Nacional de Trabajo Infantil (ENTI), en 2019 había 3.3 millones de niñas, niños y adolescentes laborando en el país. Pero la pandemia de la COVID-19 habría elevado la cifra a más de 3.5 millones.
Mientras que 93.8 por ciento de los niños, niñas y adolescentes que trabajan están en una ocupación no permitida, mientras que 52.5 por ciento de la población infantil (entre 5 y 17 años) ocupada se desarrolla en trabajos peligrosos.
Además, dijo, el 4.4 por ciento de los adolescentes entre 16 y 18 años no se inscribió en el ciclo escolar 2020-2021 porque tenía que trabajar y casi el 1 % de los de entre 13 y 15 años, puntualizó Ramírez.
Indicó que existen varios factores estructurales asociados al trabajo infantil, entre ellos la precarización del empleo, la carencia de oportunidades laborales para las familias, disparidades salariales, la migración y el desplazamiento forzado.
Acotó que, de acuerdo con el instituto de estadística de México, existen tres razones principales por las que niños, niñas y adolescentes trabajan: para pagar la escuela o sus gastos propios, porque su hogar necesita aportación económica y para el pago de deudas.
NECESARIO REGULAR
La Ley Federal del Trabajo (LFT) prohíbe cualquier tipo de labor para quienes no han cumplido 15 años y el T-MEC se ha sumado a las leyes mexicanas, ya que las tres naciones involucradas en el acuerdo se comprometieron a abolirlo.
Mary Ellison, agregada de asuntos laborales de la Embajada de Estados Unidos en México, señaló que el T-MEC tiene su capítulo laboral.
«Dentro de ese capítulo hay un reconocimiento a los más importantes derechos laborales como la libertad de asociación y la eliminación de todas las formas de trabajo forzoso», afirmó.
Pedro Américo Furtado, director de la Oficina de País de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para México y Cuba, señaló que es importante atender las causas, especialmente la pobreza pues «no hay evidencia de que el trabajo infantil rompa los ciclos de pobreza», dijo.
El informe presentado por Redim señaló que en el tratado las sanciones se centran en las empresas de sectores definidos por el acuerdo, mientras que las familias que obligan a sus hijos a trabajar están exentos.
El reporte da una serie de recomendaciones, entre las que se incluyen aumentar el presupuesto, el número y la capacitación de inspectores, así como instar a que la Secretaría de Trabajo y Previsión Social realice inspecciones.
El trabajo infantil aumentó por primera vez en 20 años y la pandemia puede empeorar la situación, advirtió la ONU con motivo del Día Mundial contra el Trabajo Infantil, que se conmemoró el pasado sábado, 12 de junio.