Entre las más de 200 mil muertes por coronavirus, independientemente de su poder adquisitivo, también hay personajes de la clase empresarial, legisladores y alcaldes. Incluso uno de ellos, un ejecutivo de TV Azteca, que ya había recibido la primera dosis de la vacuna anticovid.
Ciudad de México, 9 de abril (SinEmbargo).– La COVID-19 ha atacado sin importar el nivel económico. Entre los más de 200 mil fallecidos registrados en México por la pandemia, grandes empresarios y políticos también han sido víctimas mortales de esta enfermedad a pesar de su poder adquisitivo para acceder a una atención médica privada.
La Unidad de Datos de SinEmbargo dio a conocer recientemente que el gasto en tratamientos contra el coronavirus va de 23 mil pesos hasta más de un millón de pesos, entre pruebas, medicamentos, oxígeno, hospitalización, entubación y atención de secuelas.
En la Fase I con sólo casos importados, los primeros contagios se atribuyeron principalmente a las personas de altos ingresos que viajaron al extranjero, donde ya se había propagado el SARS-Cov-2.
El 16 de abril pasado, hace casi un año, la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) informó que su presidente Jaime Ruiz Sacristán había fallecido a los 70 años por complicaciones derivadas del coronavirus, luego de ser hospitalizado desde el 16 de marzo del año pasado.
El 8 de marzo de 2020 había aterrizado en un vuelo privado en Toluca, Estado de México. El líder banquero había viajado para esquiar a Vail en las montañas de Colorado, Estados Unidos, junto con otros empresarios como el Consejero de Inbursa y primo del magnate Carlos Slim, el empresario José Kuri Harfush, quien falleció el 26 de julio luego de encontrarse durante meses en estado crítico.
Carlos Slim Helú, el empresario más rico de México (52 mil mdd) y cabeza de América Móvil, se contagió en enero de este año y se recuperó, al igual que Juan Beckmann Legorreta, director general de la tequilera José Cuervo, quien también viajó a Vail con su esposa en marzo del 2020, a inicios de la pandemia.
El dueño de TV Azteca y Elektra, Ricardo Salinas Pliego (12 mil mdd), también dio positivo a la COVID-19 en octubre pasado. El ahora tercer empresario más rico del país –en la lista de Forbes publicada este martes– había cuestionado más de una vez a las autoridades sobre las medidas sanitarias y minimizó su enfermedad al decir que «sólo era una gripa». Para festejar que se recuperó, regaló un millón de pesos a través de Twitter.
Sin embargo, el pasado 24 de marzo el presidente de Contenidos y Distribución de TV Azteca, Alberto Ciurana, falleció por coronavirus, informó en esa misma red social el vicepresidente del Consejo de Administración de Grupo Salinas, Benjamín Salinas.
«La ironía es que el viernes –5 de marzo– recibí la primera dosis de la vacuna. Estaré trabajando desde mi casa», anunció Ciurana en su Instagram.
COVID EN LA POLÍTICA
La COVID-19 tampoco ha hecho una excepción en la clase política mexicana a lo largo de este año y dos meses de pandemia. Al menos cuatro legisladores han fallecido luego de contagiarse, así como decenas de alcaldes y alcaldesas.
El 21 de febrero, el Senador de Morena Radamés Salazar Solorio falleció por esta enfermedad luego de estar hospitalizado durante un mes. El presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, Ricardo Monreal Ávila, expresó sus condolencias en ese entonces.
«Una ausencia insustituible. Elevamos nuestra oración al Creador y enviamos a su familia nuestras condolencias. Descanse en paz», manifestó Monreal en un mensaje en video.
Con profundo dolor, me enteré hoy del fallecimiento de nuestro amigo y compañero Radamés Salazar, senador de la República por el estado de Morelos; una ausencia insustituible. Elevamos nuestra oración al Creador y enviamos a su familia nuestras condolencias. Descanse en paz. pic.twitter.com/gJWkwvMiko
— Ricardo Monreal A. (@RicardoMonrealA) February 21, 2021
Salazar Solorio es el segundo Senador que muere por esta causa. El Senador de Morena Joel Molina Ramírez había fallecido el 24 de octubre del año pasado internado en un hospital del ISSSTE de Tlaxcala. Días antes, el Senado había sesionado de manera presencial para discutir la eliminación de más de 100 fideicomisos.
“Abrazo con afecto a familiares y amigos del profesor Joel Molina, Senador de la República, quien falleció en Tlaxcala, su tierra natal. Siempre lo recordaremos por su abnegada entrega en favor de la transformación de México”, escribió el Presidente Andrés Manuel López Obrador en Twitter.
En la Cámara de Diputados también se han reportado fallecimientos por coronavirus. El 15 de septiembre, el Diputado del Partido Encuentro Social, Miguel Acundo González, perdió la vida por esta enfermedad. En la sesión del 22 de septiembre, para recordar al legislador en el Salón de Sesiones se proyectó un video en homenaje a su labor legislativa y el Pleno rindió un minuto de silencio.
Y el 28 de diciembre del año pasado el Diputado local oaxaqueño de Morena, Othón Cuevas Córdova, murió a consecuencia de la COVID-19. El 15 de diciembre informó que había contraído la enfermedad y posteriormente fue entubado. Su madre había falleció el 22 de diciembre por la misma causa.
Además, se han registrado diversas muertes de presidentes municipales a causa del coronavirus en Oaxaca, Veracruz, Tlaxcala, San Luis Potosí, Nayarit, Yucatán, entre otros estados.
El primer Presidente Municipal que —se informó— perdió la vida por COVID-19 fue José Esteban Cortés Torres de Mazatecochco, Tlaxcala. El Alcalde, cuya administración terminaba en agosto de este año, ingresó al Hospital General del ISSSTE en la capital de la entidad con fiebre y dificultad para respirar, y falleció en la madrugada del 15 de mayo, informó la Secretaría de Salud estatal.
Del mismo estado, el Presidente Municipal de Amaxac de Guerrero, Faustino Molina Castillo, falleció el 12 de julio luego de ser hospitalizado.
En Moloacán, Veracruz, la Edil Victoria Rasgado Pérez falleció el 9 de agosto por COVID-19 en el Hospital General de Alta Especialidad del puerto de Veracruz. Tres meses después, la Alcaldesa sustituta, María del Carmen Prieto Mortera, también murió debido a secuelas del virus. Sólo había gobernado durante unas semanas antes de contagiarse y ser hospitalizada.
«Aunque propiamente ya había superado la infección del virus, la prolongada hospitalización enmarcó complicaciones adicionales que deterioraron su estado físico», informó el Gobierno local.
Otros alcaldes de Oaxaca que han muerto por esta causa han sido Artemio Ortiz Ricardez, de Tamazulapam del Espíritu Santo; Florencio San Germán de Chichicapam, Oaxaca; Javier Santiago Ruiz, de Reyes Etla, Oaxaca; Fernando Bautista de Tuxtepec; y Pedro Modesto Santos, de Santa Cruz Xitla.
De otros estados han perecido los ediles Rigoberto Tun Salas de Samahil, Yucatán; Josué García de Vanegas, de San Luis Potosí; Humberto Arellano de Acaponeta, Nayarit; Rigoberto González de Bacoachi, Sonora; Sergio Anguiano de Coyotepec, Estado de México; y Reina Marlene Catzín, de Maxcanú, Yucatán.
Este año, a menos de tres meses de tomar el cargo, la Alcaldesa de Tesquillo, Hidalgo, María de Jesús Chávez, murió el 30 de enero. Y el 8 de febrero el Edil de Atzacan, Veracruz, Octavio Misael Lorenzo Morales, falleció luego de permanecer hospitalizado en Córdoba por más de una semana, lo confirmó el Secretario del Ayuntamiento, Luis Bermúdez Aleluya.