La Organización Panamericana de la Salud señala que «al temor de contraer el virus en una pandemia como la de COVID-19, se suma el impacto de los importantes cambios en nuestra vida cotidiana provocados por los esfuerzos para contener y frenar la propagación del virus». De acuerdo con César Montesano, asesor y psicoterapeuta, la «Cuarta Ola» se trata de la incapacidad o la imposibilidad de mantener una rutina sana, de los problemas psicológicos y mentales como ansiedad, depresión y estrés provocados por la pandemia o agravados por esta.
Ciudad de México, 6 de septiembre (SinEmbargo).- La pandemia de la Covid-19 llevó a millones de personas en el mundo a confinarse en sus casas como una medida para evitar el contagio, aunque en diversos países las personas han retomado sus actividades diarias en la «nueva normalidad» el estrés, la ansiedad, el insomnio y la depresión se hacen presentes provocados por el encierro o por el miedo de enfrentarse a salir de casa, de esto trata la llamada «Cuarta Ola» de la pandemia.
César Montesano, asesor y psicoterapeuta humanista con maestría en Gestalt por el Instituto Humanista de Psicoterapia Gestalt, explicó a Magazine que la «Cuarta ola» se trata de la incapacidad o la imposibilidad de mantener una rutina sana, el cuerpo necesita cargarse de energía y las actividades que generalmente ayudan a mantener una vida activa aún no se pueden realizar, estar encerrados requiere un esfuerzo del organismo.
«En países de Europa como España y Gran Bretaña, los médicos se están preocupando por esta ‘Cuarta Ola’, la primera según la gaceta médica española, tiene que ver con toda la saturación de los hospitales por temas de COVID, la gente se enferma y se saturan los hospitales, ocurre lo que ha pasado en el mundo que no hay posibilidad de atender a tanta gente; la ‘Segunda Ola’ tiene que ver con pacientes de tratamiento continuo que tuvieron que verse interrumpidos, entonces baja un poco la COVID y llegan todos los pacientes que tienen que ver con cáncer, con diabetes, con todas las enfermedades de tratamiento continuo, los hospitales se saturan ahora de estos tratamientos; la ‘Tercera Ola’ tiene que ver con que va a bajar la saturación por los pacientes de tratamiento continuo y viene una ola más de todas las enfermedades de tratamiento no continuo pero que ahora se convierten en graves, entonces si alguien se tenía que operar la rodilla en abril ya no pudo y ya se complicó», dijo Montesano.
«La ‘Cuarta Ola‘ según las revistas médicas tiene que ver con los problemas psicológicos y mentales porque se espera un incremento del suicidio, un incremento de la depresión, obviamente saturación en los hospitales respecto a estos temas», agregó el especialista.
La Organización Panamericana de la Salud señala que «al temor de contraer el virus en una pandemia como la de COVID-19, se suma el impacto de los importantes cambios en nuestra vida cotidiana provocados por los esfuerzos para contener y frenar la propagación del virus».
De acuerdo con César Montesano es estrés es común en esta situación y se manifiesta con una baja de energía, ya que concentra toda la energía en los órganos de acción porque el cuerpo y la mente mandan la señal de moverse y sobrevivir, el problema con el estrés es que se mantienen estos órganos todo el tiempo preparados para salvar la vida peo en realidad no hay un momento de huida; esto genera que toda la energía se acumulé en algún lugar y provoca que se agote.
La ansiedad esotro de los estragos de la pandemia; «a veces no la alcanzamos a identificar pero sí nos damos cuenta que estoy comiendo más veces se lo normal, como demasiadas ‘chucherías’ y ahora se te antojan mucho […], tiene que ver con ansiedad, tiene que ver con esta energía en la que sube como nerviosismo, se acelera la respiración y el ritmo cardiaco por una situación incomoda de la que no encontramos la manera adecuada de solucionar», refirió el psicoterapeuta.
HERRAMIENTAS PARA EL CONTROL DE EMOCIONES
Ante la «nueva normalidad» muchas personas que tuvieron la oportunidad de quedarse en casa han regresado a sus actividades y a la oficina, ante esto Montesano compartió algunas herramientas para retomar el control de las emociones y seguridad en la «nueva normalidad».
Mantener la calma: Encontrarse en espacios concurridos como lo puede ser el metro o el camión, de inmediato causan ansiedad, por ello es importante tener control de las emociones y hacer una pausa en nuestra respiración y repetir el ejercicio tres veces, para volver a tomar el autocontrol.
Socializar: Compartir con compañeros y amigos tips que les funcionan y ayudan a mantener la calma en el regreso a las labores, esto crea empatía y armonía. Las reuniones digitales o videollamadas con familiares y amigos ayudan a liberar angustia. El especialista resaltó la importancia de buscar maneras de volver a entrar en contacto con la gente con las debidas precauciones.
Motivación: Bien dicen que la unión hace la fuerza, por ello es importante que como compañeros de trabajo, implementen nuevas acciones que les permitan despertar su creatividad para alcanzar un determinado fin.
Resilencia: Aprender de experiencias pasadas, y nuestra capacidad de adaptarnos a ellas en el contexto que vivimos es clave, ya que si identificamos patrones de conducta positivos y negativos, y trabajamos en ellos para mejorarlos nos permitirá llegar al éxito.
Movimiento: El darle movilidad a tu cuerpo incluso en el espacio de trabajo es importante, como los ejercicios de estiramiento cada dos horas e hidratarse.
Respeto: Esta última herramienta es clave, ya que al estar en un espacio compartido es importante ser respetuosos con los compañeros de trabajo, adaptándose a las nuevas medidas y prácticas de protección y desinfección, recuerda que hoy más que nunca si te cuidas tú, proteges a todos.