La pandemia ha sido «un golpe durísimo». «Siempre trabajamos con productos locales, con productores más pequeños, y siempre pensando en un comercio justo, en que haya un consumo responsable de cerveza, pero también que haya una producción responsable», expresó la Gremio Mexicano de Cerveceros.

«Esperamos alcanzar nuestros máximos de producción que teníamos los años anteriores, apostamos a la fortaleza de la industria y la calidad del producto», dijo la directora de Cerveceros de México.

Por Pedro Pablo Cortés

México, 7 de agosto (EFE).- Los mexicanos festejan este Día Internacional de la Cerveza como los principales exportadores de esta bebida a nivel mundial tras superar una sequía de varios meses, obligada por la pandemia, que afectó a industriales y especialmente a artesanales.

Después de la emergencia sanitaria que paralizó el sector en abril y mayo, la operación se ha normalizado al 80 por ciento, la distribución al 90 por ciento y las exportaciones al 70 por ciento, revela en entrevista Karla Siqueiros, directora general de Cerveceros de México: Cámara de la Cerveza y de la Malta.

«Esperamos alcanzar nuestros máximos de producción que teníamos los años anteriores, apostamos a la fortaleza de la industria y la calidad del producto para alcanzar los niveles de producción que nos permitan estar no solo en la mesa de los mexicanos, sino en todos los países», expresa.

El Día Internacional de la Cerveza se conmemora el primer viernes de agosto desde 2007, cuando inició como una celebración en un bar de Santa Cruz, California (EU), que luego se popularizó en unos 80 países.

México es el cuarto productor de esta bebida a nivel mundial, con 124.5 millones de hectolitros en 2019, y el primer exportador, con 40 millones de hectolitros vendidos en más de 180 países, detalla Siqueiros.

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Una persona sirve una cerveza este viernes, en Ciudad de México (México). Foto: EFE, José Pazos.

«Tiene que ver con la gran historia que hay en toda la cadena de valor, no solo es hablar de la cerveza como el producto final, sino una historia que nace en el campo, en las manos de más de 5.000 familias de agricultores. En México se siembran más de 300.000 hectáreas de cebada», profundiza.

La agroindustria cervecera aporta 1 por ciento del PIB nacional y representa 25 por ciento de las exportaciones agroindustriales con un superávit comercial de 4.763 millones de dólares, subraya la directiva.

Del sector, añade, dependen 55 mil puestos directos y más de 600 mil empleos en toda la cadena de valor.

«Esto habla de la importancia de la industria cervecera en el desarrollo económico nacional y hoy es un aliado importantísimo en la recuperación de la economía mexicana», indica la representante de Cerveceros de México.

AFRONTAR LA CRISIS

La crisis impacta en especial a los productores artesanales en México, donde la elaboración crecía a una tasa media anual del 53.29 por ciento hasta llegar a 189 mil 250 hectolitros en 2018 y más de 900 cervecerías independientes, informa la Asociación de Cerveceros Artesanales de México (Acermex).

«Está complicado, el que se esté alargando tanto esta pandemia está haciendo la vida difícil para una industria que apenas empezaba a nacer, a desarrollarse», lamenta Alejo Magallanes, presidente de Acermex.

Además de más de 50 mil  muertos y 460 mil casos, la pandemia causó una contracción de 18.9 por ciento del PIB en el segundo trimestre.

Por el contexto internacional, las exportaciones de cerveza disminuyeron 19 por ciento en los primeros cinco meses del año hasta un valor de mil 688 millones de dólares, según el Banco de México.

Asimismo, provocaron el cierre de 90 mil restaurantes en el país, de acuerdo con la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados (Canirac).

Aunque durante el desabastecimiento de cerveza, la Acermex percibía clientes que optaban por bebidas artesanales porque estaban disponibles, ahora preocupa el cese de bares y restaurantes, que representan 95 por ciento del consumo, menciona Magallanes.

«Tengo una analogía que es triste, pero muy certera, que es que estamos sufriendo un sangrado pequeño y lento después de un par de semanas, incluso meses, porque cuando empezó la pandemia no se sentía y hasta estábamos optimistas», dice.

UNA COMUNIDAD

La pandemia ha sido «un golpe durísimo» para las cervecerías artesanales, que son pequeñas y medianas empresas (pymes) cercanas a su comunidad, señala Pablo Aguilar, director general del Gremio Mexicano de Cerveceros.

«Siempre trabajamos con productos locales, con productores más pequeños, y siempre pensando en un comercio justo, en que haya un consumo responsable de cerveza, pero también que haya una producción responsable», manifiesta.

La asociación capacita a emprendedores e incluso imparte un diplomado con la Facultad de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Pero ahora coincide con Acermex en que este será un año dedicado a sobrevivir.

«El daño es tan grave, que existen cervecerías que ya dieron por perdido todo el 2020», advierte.