Hincar la rodilla en el suelo se ha convertido en un símbolo de las protestas que se han extendido por todo el mundo.
Por Álvaro García Hernández
Madrid, 12 de junio (ElDiario.es).- Las protestas contra el racismo, que comenzaron en Estados Unidos y ahora se han extendido por todo el mundo, tras la muerte de George Floyd a manos de la policía, tienen un gesto que se ha repetido entre los manifestantes y figuras políticas como el Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau, y la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, o incluso algunos agentes de policía: arrodillarse.
Este gesto, que ahora se ha convertido en un símbolo de las protestas se popularizó ya en 2016 cuando el jugador de la liga profesional de fútbol americano (NFL) Colin Kaepernick, quarterback del equipo San Francisco 49ers, decidió arrodillarse en lugar de mantenerse en pie mientras sonaba el himno de EU antes de un partido.
En su momento, el jugador aseguró que no dejaría de hacerlo «hasta que haya un cambio significativo», en relación a las muertes que EU lleva años registrando de personas racializadas a manos de la policía.
«No voy a ponerme de pie para mostrar orgullo por una bandera de un país que oprime a los negros y a las personas de color», explicó Kaepernick. La imagen generó mucha polémica en el país y le costó la carrera deportiva al jugador, aunque otros también lo apoyaron y repitieron su gesto en otros encuentros.
El sindicato policial encargado de la seguridad durante los partidos del equipo californiano también mostró su malestar y amenazó con boicotear la vigilancia del estadio si la NFL no amonestaba a Kaepernick.
El, en ese entonces, candidato republicano a la presidencia de EU, Donald Trump, aseguró que era «algo terrible» y le sugirió «que se buscara un país en el que encaje mejor». Una línea que ha mantenido durante su mandato.
#StrongerTogether pic.twitter.com/sfwF9Uvgaa
— Patrick Mahomes II (@PatrickMahomes) June 5, 2020
En 2017 criticó a la NFL por no prohibir lo que consideraba «una total falta de respeto», y un año después, obligaron oficialmente a que los jugadores se mantuvieran en pie mientras sonaba el himno nacional o se quedaran en el vestuario, pero cualquier otro gesto que no mostrara «respeto» hacia el himno sería sancionado.
Varios días después de la muerte de George Floyd, la NFL emitió un comunicado en el que aseguraban que «estas acciones demuestran la necesidad urgente de pasar a la acción. Reconocieron «el poder de su plataforma» hacia la sociedad estadounidense y el «compromiso» de la NFL con ese cambio. Un comunicado muy criticado por los jugadores afrodescendientes, que publicaron un vídeo en el que pedían una condena en firme del racismo.
Además, tacharon al comisionado en jefe, Roger Goodell, de hipócrita por ese mensaje cuando ha intentado acallar las protestas de sus jugadores prohibiendo el gesto que realizó Kaepernick durante un partido. Lo que obligó a que el propio Goodell reconociera su «error» por «no escuchar a los jugadores» y pidió que alzaran su voz y protestaran «pacíficamente».
«Sin jugadores negros la NFL no tendría sentido y las protestas por todo el país son un emblema de los siglos de silencio, desigualdad y opresión a jugadores, entrenadores, fans y otro personal», explica en el vídeo. Aunque no tuvo mención para la normativa de prohibir arrodillarse ante el himno ni a la polémica entorno a Colin Kaepernick.
Ahora, casi cuatro años después, hincar la rodilla en el suelo se ha convertido en un símbolo de las protestas que se han extendido por todo el mundo.
Los manifestantes lo han utilizado para mostrar su rechazo al racismo sistémico en EU y han pedido a la Policía que escoltaba sus protestas que lo hicieran con ellos y muchos no solo se han arrodillado sino que también se han unido a las marchas en solidaridad con el movimiento.
En cambio, algunos manifestantes han tildado a las fuerzas de seguridad de hipócritas porque en otras ocasiones se han arrodillado pero segundos después han cargado contra ellos usando gases lacrimógenos.
WATCH: Police officers across the country kneel and march in solidarity with protesters. pic.twitter.com/QnuWcH6fPL
— CBS News (@CBSNews) June 1, 2020
Aunque los agentes de policía no han sido los únicos. Líderes políticos como el candidato demócrata a las elecciones presidenciales de noviembre, Joe Biden, que el pasado 1 de junio se arrodilló durante una manifestación en Delaware. Este gesto contrasta con unas declaraciones de ese mismo día en las que proponía «dispararlos en la pierna en vez de en el corazón».
We are a nation in pain right now, but we must not allow this pain to destroy us.
As President, I will help lead this conversation — and more importantly, I will listen, just as I did today visiting the site of last night's protests in Wilmington. pic.twitter.com/0h2ApbKT0C
— Joe Biden (@JoeBiden) May 31, 2020
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, acompañada de varios congresistas demócratas, también se ha arrodillado en solidaridad con las protestas. Ocurrió el pasado lunes.
Ataviados con pañuelos de kente, utilizado por el Caucus Negro del Congreso para simbolizar su trabajo y las raíces africanas de su cultura, los legisladores permanecieron durante 8 minutos y 46 segundos en silencio, el mismo tiempo que estuvo George Floyd con la rodilla de un policía blanco sobre su cuello antes de morir asfixiado.
El Primer Ministro de Canadá, el pasado sábado se unió a una manifestación en Ottawa contra brutalidad policial e hincó la rodilla en señal de respeto también durante cerca de 9 minutos junto al resto de los asistentes a la protesta en la capital canadiense.
WATCH: Canadian PM Justin Trudeau takes a knee in solidarity with demonstrators rallying against police brutality and racial injustice pic.twitter.com/xSLGqHS3gx
— Bloomberg Quicktake (@Quicktake) June 6, 2020
Pero ya en 1965, Martin Luther King jr. se arrodilló durante un rezo frente al Palacio de Justicia del condado de Dallas, en Alabama después de que detuvieran a 250 manifestantes que protestaban para pedir el derecho al voto.
Rest in power, George Floyd. ??
I join with Americans across the country in support of a thorough investigation into what feels like another murder of an African American man by a white police officer. Policemen should serve and protect, not kill. #JusticeForGeorgeFloyd pic.twitter.com/MS6DWEKokd
— Martin Luther King III (@OfficialMLK3) May 27, 2020
Ahora, 55 años después, se ha convertido en todo un símbolo que ya recorre todo Estados Unidos y se ha exportado a otros países donde las protestas se han multiplicado, en solidaridad con el movimiento Black Lives Matter de EU y para pedir el fin del racismo también en sus países.