La comunidad de Santa Teresa que es la segunda más grande del municipio, y muy cerca del Naranjo, también quedó con varias casas solas desde septiembre, cuando comenzó el conflicto y anunciaron por bocinas que las familias de los delincuentes tenían que salir. En esas fechas destruyeron tres casas con maquinaria pesada.
Por Israel Flores
Ciudad Altamirano, Guerrero, 4 de febrero (ElSur).– Más de dos mil personas de los municipios Zirándaro y Coyuca de Catalán han abandonado sus hogares en los últimos seis meses y dejaron los pueblos solos, producto de la ola de violencia y las confrontaciones entre grupos antagónicos de la delincuencia organizada.
En Zirándaro los pueblos de San Rafael, Los Alacranes, las Mesas, y otras rancherías dejaron sus casas desde septiembre, y los últimos que quedaban se fueron en el mes pasado. También recientemente quedó solo el pueblo de Pandacuareo del municipio de Zirándaro.
Pero también de la cabecera municipal salieron familias. Personas que sólo por temor a que llegue la violencia a su localidad decidieron irse.
Lo anterior de acuerdo con registros municipales que estima tan sólo en su municipio unas mil 200 personas que dejaron los pueblos.
En el municipio de Coyuca de Catalán, se encuentran solos las localidades de Los Fogones, Pueblo Nuevo, también hay familias desplazadas de Mesas de Pineda, El Pescado y otras rancherías cercanas.
También reportaron esta semana la salida de familias del pueblo del Naranjo que es una comunidad con más de 500 habitantes. Varias casas quedaron solas.
La comunidad de Santa Teresa que es la segunda más grande del municipio, y muy cerca del Naranjo, también quedó con varias casas solas desde septiembre, cuando comenzó el conflicto y anunciaron por bocinas que las familias de los delincuentes tenían que salir. En esas fechas destruyeron tres casas con maquinaria pesada.
También está solo el pueblo de El Jabalí, Las Ciénega de Arriba y la de Abajo, Piedra Imán, entre otros cercanos.
Recientemente se anunció la salida de familias de la comunidad de Zihuaquio, de donde se reportaron unas 100 personas que fueron escoltadas a la comunidad de Vallecitos y en donde se encuentran bajo resguardo policiaco.
Suman otras mil personas entre las diferentes localidades que salieron de sus hogares del municipio de Coyuca de Catalán.
En estas zonas el Gobierno federal y del estado han reportado que los enfrentamientos no han cesado entre grupos antagónicos.
El Gobierno del estado reportó que mantiene atención de asistencia social a los desplazados de Zihuaquio.
En un boletín se reportó que en Vallecitos el DIF- Guerrero entregó diversos apoyos consistentes en 500 despensas, 3000 aguas embotelladas, 300 colchonetas, 500 cobertores e instaló una cocina para comida caliente”, para las familias desplazadas de Zihuaquio.